20. 2022-Raoul

364 33 119
                                    

2022. Raoul

La última semana de septiembre nos tuvo bastante ocupados con diferentes eventos. Tuvimos la premiere de «A domicilio», a la que acudimos juntos y en la que también apareció el resto de nuestro cast. Durante el visionado, tuve claro que solo era otro éxito de Agoney uniendose a la lista.

Por otro lado, también grabamos la escena que nos quedaba de «Alzar la voz» en dos noches diferentes. No entendía por qué la habían dejado para el final, porque era una escena del centro de la serie, de las que salen al final de capítulo y te hacen poner el siguiente capítulo lo antes posible.

La primera noche grabamos con todo el grupo todo lo referente a Halloween de todos juntos, incluida la parte en que su personaje se pierde.

La segunda grabamos en un McDonald's, tanto dentro como fuera.

—Muy bien, última escena —anunció el director. Yo estaba en plena calle, él en las escaleras que separaban el establecimiento de la calle—. Recordad, la emoción a flor de piel. Esta escena marca la diferencia entre una serie del montón y la calidad que buscamos.

En cuanto se gritó "acción", Agoney bajó las escaleras corriendo y consiguió alcanzarme.

—¿A dónde te crees que vas? —Jadeó.

—A mi casa. —Refunfuñé—. No tengo ganas de compartir espacio con ellos ahora mismo. —Me detuve cuando se colocó frente a mí y puso su mano en mi pecho—. ¿Y tú ahora qué coño quieres?

—Lo primero, te has dejado esto. —Me tendió la capucha de mi disfraz—. Lo segundo, tenemos que hablar con ellos ahora, que lo tienen fresco, y nos aseguramos de que no se vayan de la lengua.

—Esto es un desastre, espero que te des cuenta. —Meneé la cabeza, con una risita que indicaba su histeria.

—Diego...

—¡Es que joder...! ¡No puedo permitir que los del equipo se enteren de que soy gay, ya lo sabes!

—Por eso ahora tenemos que hablar con ellos —bajó el tono—. No dirán nada sobre nosotros, solo tienes que explicárselo igual que con lo de ser gay.

—Tenemos que dejarlo.

Agoney arqueó una ceja.

—¿Y qué más da dejarlo ahora, si ya se han enterado? Y no precisamente por mí, el bocazas fuiste tú.

Solté un suspiro de frustración y pegué una patada a una piedra.

—Nico, no es por eso... —Me mordí el labio, con esa tristeza de quien no puede creerlo—. Lo que ha dicho Lucía... Te gusta alguien.

Se tensó por completo.

—No iba en serio. Ya sabes cómo es la cría, tergiversa la información.

—No se ha equivocado con lo de follar, aunque no sepa lo que significa. Y todo encaja, tampoco se ha equivocado en esto... Llevas desde tu cumpleaños pasando de mi cara. No sabía qué pensar, si no te gustaba ser pasivo..., pero resulta que estás enamorado de otro. Tú pusiste las reglas: ninguno será el segundo plato de otro, así que lo mejor es dejarlo ahora.

Grabamos ese trozo tres veces, desde varias perspectivas y cámaras, incluidos planos más cercanos de la incertidumbre en su mirada.

—Diego, voy dentro a coger mis cosas y lo hablamos.

—No, es que... Lo mejor es que empecemos ya a distanciarnos, ¿vale? —Me sorbí la nariz—. Podemos ser amigos, sé que sí. Nos hemos ayudado mucho y eso no tiene por qué cambiar, aunque entendería que si te echas novio pases más tiempo con él, no pasa nada... —Me agarró el brazo, pero lo alejé—. Mejor me voy.

Pareja de oro-RAGONEYDonde viven las historias. Descúbrelo ahora