Arco 8.9

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El chico se acercó, un aura cálida bañada por el sol lo rodeaba, luciendo guapo y brillante. Tang Tang miró el gran caramelo de conejo blanco que tenía en la mano, se los metió en el bolsillo y se presentó cortésmente: "Hola, soy Tang Tang".

La sonrisa del niño se volvió aún más encantadora, dos dientes caninos afilados mostraban: "Gege, ¿eres médico?" Sus ojos color té recorrieron la bata blanca del joven y exclamó mientras leía la posición en la insignia: "Wow, gege, eres realmente increíble".

Había una admiración estrellada en los ojos del niño, lo que hizo que Tang Tang inexplicablemente se sintiera un poco tímido. Frunció los labios y se ajustó las gafas para ocultar su vergüenza.

¿Qué es tan asombroso?, se preguntó.

"Me acabo de mudar aquí, soy un extraño en el lugar. Gege, después de tu trabajo de hoy..." Yu Zixu de repente se convirtió en un hermano pequeño devoto, como un husky que agita su cola, se detuvo y sacó su teléfono, "Intercambiemos WeChat, gege. Te invito a cenar esta noche".

Tang Tang no era del tipo sociable y, cuando estaba a punto de declinar, vio al perro grande moviendo la cola. Felizmente, sus ojos brillantes se fijaron en él

"..."

Tang Tang permaneció en silencio por un momento, sacó su teléfono y agregó al amigable hermano pequeño en WeChat. Después de la comida, se despidieron y Tang Tang se dirigió al estacionamiento subterráneo.

No miró hacia atrás, por lo que no sabía que el perro grande, aparentemente amigable, había cambiado de expresión en su rostro después de irse. Un par de ojos color té miraron fijamente su figura que se alejaba mientras su dueño lamía sus afilados dientes caninos.

"No soy un perro doméstico dócil.. Gege". Él sonrió, mostrando el comportamiento de un perrito loco, tarareando alguna melodía desconocida mientras caminaba hacia la casa que de repente se había convertido en suya.

Después de unos pocos pasos, de repente sonó el teléfono que tenía en el bolsillo. Yu Zixu hizo una pausa, sacó su teléfono, lo miró y vio que había llegado la sangre que tenía de An Jiajin. Yu Zixu frunció el ceño. Ya había encontrado sangre que se adaptaba a su gusto y no necesitaba beber la sangre sucia de otras personas.

Pero...

Yu Zixu pensó por un momento. Este An Jiajin parecía ser su empleador, ¿verdad? El empleador pagó el dinero y extrajo la sangre, y ahora la persona que reclutó se encontró interesada en el objetivo de la misión. Pensándolo bien, este An Jiajin era bastante lamentable. Sin embargo, Yu Zixu sonrió de repente. Fue divertido, ¿no?

 Emplear un demonio significaba estar preparado para ser apuñalado por la espalda. Nunca había sido un caballero que cumpliera sus promesas.

"¿Deberíamos simplemente matarlos a todos?" Yu Zixu asintió para sí mismo, respondiendo su propia pregunta, con una sonrisa siniestra en sus labios: "Todo lo relacionado con gege, incluso un mechón de cabello, me pertenece. Nadie... Uno... Puede... Tocarlo..."

Como un perro loco protegiendo su comida.


.......

Tang Tang estacionó el auto, abrió la puerta y se sentó en el asiento del conductor. Recordó la mirada de Yu Zixu detrás de él como si lo marcara y se pasó la mano por la piel de gallina en su cuerpo, murmurando: "Otro pequeño lunático".

Encendió el motor y silenciosamente sacó el auto del estacionamiento. Pasaron cosas fuera de la ventana y el vehículo blanco pronto se dirigió hacia el hospital.

Transmigración: Robando a los gongs protagonistas para tener s*xo en grupo (np)Where stories live. Discover now