Capítulo 12 "Problema"

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Eren y Levi intercambiaron las almohadas en las que dormían para que por la noche se sintieran un poco más cerca del otro gracias al olor impregnado en ellas, la verdad es que el pelinegro lo había agradecido mucho pues cuando tenía pesadillas solo necesitaba abrazar la almohada y podía dormir como bebé. El alfa por su parte le había pedido a su pareja que esperaran un poco para decirle a su madre pues aún estaba algo enfadado con ella.

Ackerman había aceptado solamente porque en gran medida era su culpa lo que había pasado pero le hizo prometer que de todos sería la primera en saberlo por lo que cuando la familia regresó a casa hicieron como si nada hubiese ocurrido apenas hablándose para no levantar sospechas de nadie, especialmente por Sasha pues por lo que ambos habían notado su familia no era muy tolerante de los beta.

Eren realmente estaba enfadado con lo que presenciaba a veces pero no podía decir nada porque Levi le había pedido que se mantuviera al margen para no causarle problemas, la castaña siempre menospreciaba al pelinegro y lo trataba peor que a un esclavo, incluso algunas ocasiones le daba tareas inútiles que terminaba menospreciando cuando las completaba.

Mikasa había comenzado a notarlo y siempre buscaba la manera de zafar a su hermano de las groserías que su pareja le hacía, no quería ser tan obvia porque sabía que podía causar un gran problema al decir la verdad pero conforme los días pasaban se cansaba de la actitud infantil y egoísta de Sasha.

El Ackerman mayor no quería que su hermana se peleara con su pareja por lo que pedía que fuera paciente y que esperara a que ella cambiara pero la menor no estaba de acuerdo con eso, si no le decía nada jamás arreglarían ese problema.

—Llévate eso, sabe horrible—Sasha alejó el plato para dárselo a Levi.

Eren contuvo la mueca y continuó comiendo, de no ser por la petición de su pareja y porque la castaña era pareja de su hermana...ya la habría corrido hace mucho.

—Como ordene—contestó el beta tomando el plato para llevárselo a la cocina en silencio.

—Creí que tú habías pedido la comida Sasha—dijo Mikasa comiendo sin levantar la mirada.

—En realidad esto no me gusta, solo lo pedí para molestar a Levi—dijo con una media sonrisa viendo la puerta de la cocina.

La pelinegra azotó su cuchara contra la mesa y se puso de pie de forma ruidosa, la amaba, mucho, pero era su hermano al que estaba humillando.

—Sasha, ¿podemos hablar en privado?

—Podemos hablar aquí.

—En privado—ordenó caminando fuera del comedor para ir a la habitación.

La alfa de inmediato se puso de pie y la siguió confundida, no entendía que había hecho para que su pareja se enfadara.

Caminaron en silencio hasta su habitación y Mikasa cerró la puerta con seguro para que no los interrumpieran.

— ¿Qué te pasa? —preguntó en cuanto su mirada se cruzó con la de su pareja.

—No entiendo, ¿de qué hablas?

—De tu actitud, eres grosera con Levi y nunca lo fuiste antes con nadie.

La castaña arqueó una ceja sin comprender.

—No veo la importancia.

—Yo sí y ese es el problema—la omega cruzó los brazos frunciendo más el ceño y apretando los puños.

—Es un beta, ¿a quién le importa?

—A mí.

— ¿Y por qué te importa tanto ese maldito beta? —preguntó Brauss con el ceño fruncido. —No es importante en nuestra vida, que me guste fastidiarlo es solo un pasatiempo... ¿Acaso te has encariñado con él? —preguntó tomándole de los brazos.

Beta's testingDonde viven las historias. Descúbrelo ahora