La Hija De Las Tinieblas (Blue Exorcist)

Ana E Inma

Después de asegurarse de que todo estaba en su sitio, bueno excepto el edificio, Rin y Gabriel se sentaron sobre unos escombros para hablar.

-Una pelea impresionante- dijo Rin sonriendo ligeramente.

-Si, aunque estoy un poco cansada- dijo Gabriel sonriendo igual que Rin. Al decir esto perdió un poco el equilibrio pero se estabilizó rápidamente.

- Seguro que estas bien? -pregunto Rin con aire preocupado y poniéndole una mano en el hombro.

-Si, no te preocupes- contesto Gabriel dando una sonrisa tranquilizadora. A esto Rin quito la mano de su hombro

-Oye... ¿Podemos contarle lo de tu poder a Yukio?- dijo Rin medio rogando.

-No se, es que se supone que es un secreto- dijo Gabriel, sintiéndose un poco mal por tener que obligar a Rin a que no se lo Co tase a nadie.

-Porfa! Es mi hermano! Tu primo!- replicó Rin con cara de cachorrito- No puedes ocultarle eso a tu propio primo, es de tu familia!

-Hm.. -Gabriel no estaba muy segura, pero era de su familia. Además Yukio se veía un chico bien responsable- Esta bien.

-SI!!!!!

-SHHH! -Lo callo Gabriel, los demás estaban dormidos.

Rin se callo al instante y se quedó mirando a Gabriel con una cara de mucha ilusión.

- Pero no se lo contaremos hasta que estemos los tres solos ¿entendido? -dijo Gabriel haciendo bajar loa ánimos de este un poco.

El se dio por aludido y asintió. Gabriel le dijo a Rin que tenía que irse a ver a sus amigas y que hacía mucho tiempo que no las veía. El reacciono bien, le dijo que él lo tenía todo controlado. Así que se fue del colegio.

Si mal no recordaba la casa de Ana se encontraba en la cuesta próxima al barrio del limón. Así que siguio el camino hasta su casa. Cuando llegó a la casa se encontraba un poco nerviosa, se quedó unos segundos en la puerta haciendo un debata mental. Le resultaría tan duro volver a ver a sus amigas sabiendo que después tendría que dejarlas de nuevo. No siguió pensando en eso, se armo de valor y con un tembloroso dedo llamó al timbre de al lado de la puerta.

Una mujer, no muy mayor, abrió la puerta. Gabriel recordaba perfectamente esas gafas y ese pelo rizado. La madre de Ana se quedó unos segundos con la boca abierta y mirando a Gabriel de arriba a abajo, como si estuviera comprobando que lo que veía no era una ilusión.

Entonces, y sin avisar,  se dejó caer al suelo de espaldas. Gabriel se sobresalto y corrió a ayudar a la madre de su amiga. Esta la miró con sorpresa y los ojos se le cristalizaron.

-¿Eres tú? -dijo la Ana mayor con mientras dibujaba una pequeña sonrisa sobre su rostro.

-Si soy yo- dijo la chica ayudandola a levantarse- Gabriel

-Bienvenida a casa Gabriel- dijo la señora dándole un gran abrazo.

-Gracias señora Méndez- respondió Gabriel. La señora dibujo una sonrisa de oreja a oreja.

-Lamame Ana- le dijo- An esta arriba con Inma, te esperan con ansia.

Gabriel asintió y subió rápidamente por las escaleras. Al llegar a la puerta de la habitación la abrió sin rodeos y entró parándose en seco al ver a sus amigas sentadas en la cama, calladas. Las chicas al ver a Gabriel se levantaron y le dieron un largo, fuerte y nostálgico abrazo.

Después de un largo rato abrazadas se separaron. Se sentaron en la cama y dibujaron una amplia sonrisa.

-Estas bien Gabriel? -dijo Ana preocupada, obviamente

-Si tranquilas, estoy algo cansada, pero estoy bien- les dijo Gabriel a sus mejores amigas.

-Y has usado? .. Ya sabes- pregunto Inma con una curiosidad.

-Si os lo digo no me vais a creer- dijo Gabriel bromeando

- Di Di -dijeron las dos marujas al unísono

-Si

-QUEEE?! -Y las marujas se quedaron perplejas

-Si, pero solo lo sabe una persona- las tranquilizó Gabriel mientras reía como una psicópata. Ana e Inma reían igual.

-Y quien es?? -las marujas al unísono.

-Si os lo digo no me vais a creer- repitió Gabriel otra vez.

-QUÉ LO DIGAS!!!!!

-va va, un chico..

-uuuuh- saltaron las chicas. Gabriel rio.

-Un chico...

-uuuuh- siguieron diciendo

-Ya vale! -dijo Gabriel haciéndolas callar.

- un chico que es el vástago de...

- De qué de qué??? -pregunto Inma ansiosa por saber de quién era vastago.

-De Satan.

La sala se inundó de un silencio algo incómodo. Silencio que Ana de odio romper.

-Y.. Que significa vastago de Satan? -al decir esto Inma y Gabriel se echaron a reir

-Muy graciosa- inquirio Inma. Mientras Gabriel a sentía. En cambio, a Ana no parecía hacerle gracia.

-Lo digo en serio- dijo con una cara todo sería. Algo típico de ella cuando no entendía.

-Es que es hijo de Satan, Ana- le dijo Inma- Como puede alguien no saberlo que significa eso?

-Pues yo no lo sabía, cerebrito. La gente no es tan lista como tú. -dijo Ana riendo como una psicópata.

Las demás también rieron como psicópatas. Era la risa característica de ese trío de locas. Estuvieron charlando un rato y Gabriel preguntó por sus compañeros de colegio.

-Pues están súper bien ahora estamos todos haciendo 4 de la ESO. Y nos va muy bien a todos en general. -le dijo Ana

-ah los hecho tanto de menos, sobre todo a Marc. Ese chico era mi mejor amigo. Hasta que me mude a Tokyo. El hizo una nueva mejor amiga- dijo Gabriel recordando.

-Ya, pero en tu caso pasó lo mismo. Tu ahora tienes a Saku- dijo la cerebrito(osea Inma).

-Si, La verdad es que Saku me cae genial. Es amable y atento y le gusta el anime y el manga. Que más se puede pedir? -dijo Gabriel

-Pero no te habrás echo otras mejores amigas no? -dijo Ana bromeando.

-No eso si que no- dijo Gabriel.

-Ya se vamos a hacer una fiesta con todos nuestros compis, y tus nuevos amigos tambien están invitados-dijo Ana sacando el movil y haciendo un grupo de WhatsApp.

-Y eso a que viene ahora? - pregunto Gabriel.

-Tu los hechas mucho de menos, ellos te echan mucho de menos a ti. Tu has venido a pasar unos días. Es la ocasión perfecta para una fiesta- dijo Inma.

-Esta bien- dijo Gabriel.

Luego pasaron un buen rato charlando, hasta que Gabriel se acordo de que tenía que ir con Rin. Les dijo a sus amigas que tenía que irse, ellas se resistieron un poco pero al final cedieron. Gabriel se fue caminando hacia el colegio.