eres tu

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POCHE:

Cuando fui a reclamar mi habitación me dijeron que una pareja ya la ocupaba pero que podía compartirla, ósea me estas diciendo una pareja sin tener reservar está en mí habitación y yo tuve que reservar desde hace 1 mes sin casi habitaciones me estas jodiendo estaba tan malhumorada me fui a mi habitación compartida la numero 309 antes de entrar tropecé con alguien no estaba de buen humor, pero no le iba a faltar el respeto a la muchacha.

Calle: parece que el destino nos quiere juntas- dijo en forma de broma.

Yo no le preste atención a lo que decía no estaba para nada contenta y me tiene que pasar le conteste.

Poche: no estoy de buen humor sabe, disculpe me tengo que ir- le dije de manera cortante.

Al levantar la cara me di cuenta de que era aquella castaña de ojos avellana que conocí en el avión me sonroje al verla, no puedo creer que le haya dicho eso, era calle.

Calle: hay pues perdón pitufo que no estés de buen humor- dijo de manera sarcástica eso causo que sonriera.

Poche: perdóname es que resulta que me toca compartir mi habitación ya reservada y pagada para que venga una pareja con dinero y se la lleve como si nada.

Calle: perdóname por decirte pitufo, pero es que tu estatura y tus mechones azules no pude evitarlo- dijo dejando escapar una leve carcajada y mirándome, yo fruncí el ceño no me parece gracioso.

Poche: pues este pitufo va a ser el único que veras en tu vida así que yo que tu no me burlo- la deje con la palabra en la boca.

Calle: pues si quieres visitarme, o hacerme compañía mi habitación es la 310- dijo y después me guiño el ojo.

Poche: pues fíjate que no así que me voy a MI habitación- dije llevando mis maletas seria.

Estaba a punto de abrir mi habitación, pero escuche algo asome mi oído a la puerta y vaya sorpresa eran gemidos lo que escuche, solo me quedaba una opción ir a la habitación de calle y rogarle porque no había mas habitaciones en el hotel y tengo pereza de buscar otro a esta hora es muy tarde y hace frio.

CALLE:

Estaba revisando mis redes sociales cuando escucho que tocan la puerta, la verdad no quiera pararme de mi cómoda cama, pero no hay nadie más entonces pues a levantarse.

Llegue a la puerta, la abrí y vaya sorpresa poche afuera con sus 2 maletas gigantes y su bolsito, me dio ternura ver como un ser tan pequeño podía llevarse esas 2 maletas gigantes eso causo que sonriera.

Calle: pero mira que tenemos aquí la reina de Inglaterra, pero qué hace aquí la señorita en mi humilde habitación- dije riéndome por la cara que puso.

Poche: calle todavía hay espacio para alguien más en tu humilde habitación- dijo haciendo un puchero me dieron ganas de besarlo (pero que carajos me está pasando)

Calle: quien se niega ante esa carita- vi que comenzó a saltar y quería molestarla- pero tiene que hacer algo a cambio.

Esa escena fue muy cómica al ver como su sonrisa desapareció e hizo una cara de disgusto recordando como le habló antes.

Poche: ¿tú sabes que no estaba de buen humor cierto? – dice con una voz nerviosa- eso quedó en el pasado- dice casi segura.

Calle: me debes 1 poche entra antes de que me arrepienta- le digo con una sonrisa triunfante.

Poche: hay gracias su majestad- dice haciendo una reverencia.

A pesar de que no llevamos mucho conociéndonos parecía que fuéramos amigas desde hace años me hacía sentir muy bien, pocas veces me he sentido así.

La tarde se paso en organizar la ropa de poche, hablar, jugar, contarnos chistes, saber más de cada una y vimos la sirenita a petición mía, pedimos tacos al pastor de domicilio los queríamos probar desde hace horas y vaya sorpresa nos encantaron.

Calle: se nos hizo tarde doña poche ahora que hacemos- dije con una sonrisa- me imagino que dormir.

Poche: cómo vamos a dormir calle no quiero que te sientas incomoda- dijo nerviosa.

Calle: no me incomodas si quieres dormimos en cada lado una.

Poche: a la orden mi capitana- dice haciendo el saludo militar.

Calle: descansa poche- dijo después de cerrar sus ojos.

Poche: hasta mañana-dijo repitiendo la misma acción de calle.

las dos nos quedamos dormidas aunque la verdad sentía frío quería que me abrazara pero mejor no quiero incomodarla, me dí vuelta y me encontré cara a cara con poche (casi la beso) me sentía bien en esta posición cerca de poche, tenía una tentación de probar sus labios pero me resistí y le di un pico en la mejilla menos mal que estaba dormida.

no paso mucho tiempo y me gano el cansancio


El mejor regalo fuiste tuWhere stories live. Discover now