Formemos Un Eclipse

5. Yo nunca nunca

Me encontraba cenando junto a mi familia, hace un rato había llegado de casa de Elara, me hubiera quedado más tiempo, pero si queria ir al antro tenía que estar en mi casa. 

—¿Cyra a qué hora saldrás a la fiesta? —pregunto mi padre

—A las ocho me iré papá

—¿No crees que Cyra ya ha salido mucho, papá? —enarque una ceja al no entender su comentario  

—No, está disfrutando su juventud y es bueno, porque una vez que entre a la universidad las cosas se le van a complicar, te tiene de ejemplo —mi padre lo miro—. Además, ella cumple con sus clases, tienes buenas notas y es la mejor en el tenis, no como alguien que ha descuidado sus clases de natación, piano, y casi no va a las sesiones de fotos —para este punto mi padre ya estaba molesto— así que, ¡deja de ver que tanto hace tu hermana y empieza arreglar tus problemas! —el golpe en la mesa nos hizo sobresaltar 

—Alejandro te he dicho ... —mi padre la interrumpió

—No, no digas nada mujer desde hace días te digo que hables con él de estos problemas y cada vez algo me dice que no podrá con el negocio de la familia, así que ya no defiendas más a tu hijo —mamá ya no dijo nada más y todos nos limitamos a terminar de comer— ¿Princesa iras con alguien?

A veces me sorprendía lo fácil que mi padre cambiaba de expresión de enojo, hacer como que nada paso, y también me daba miedo.

—Sí papá, Liane ira conmigo. No hay ningún problema con eso ¿cierto? —lo miré

Algo me decía que no me dejaría llevarla, pero por otro lado tal vez si lo permita, él volteó a ver a mi hermana que solo sonreía.

—Está bien. Las quiero a la una, ni más ni menos 

—Por fin, siempre me quieres a las once 

—Porque aún tienes dieciséis y cómo vas con tu hermana esa es su hora de llegada, y si te pido llegar antes tu hermana tendría que llegar antes

—En cinco meses tengo diecisiete 

—En cinco meses, aún falta y si sigues contestando te quito el permiso —la mire diciendole que cerrara la boca, ella solos encogio de hombros 

—Bien si iremos —comento una vez que estuvimos en las escaleras 

—Por poco la jodes, ¿no te puedes quedar callada? —la mire mal 

—Relájate Cyra, no paso nada —me abrazo

—¿Se pueden dar prisa?, tengo que llegar a mi habitación —comento Morris, ya que estábamos a mitad de la escalera 

—La escalera esta grande enano —contestó Liane

—Ustedes bloquean el pasó

—Te veo abajo —comentó Liane, entrando a su habitación

***

Después de un rato, me coloqué frente al espejo para ponerme mis accesorios. Escuche unos golpes en la puerta. 

—Adelante

—¿Estás lista? —pregunto Liane entrando a mi habitación 

—Pero que guapa —la alague mientras buscaba mi bolsa 

—Gracias, tú estás demasiado hermosa como para ir a algo más que a un club —reí negando 

—Gracias. Bien, vamos —salimos de mi habitación 

—Bien, como me voy contigo y supongo que pasaras por Elara es obvio que Gerardo se va con nosotras ¿cierto? —pregunto una vez que llegamos a la sala