𝗖𝗔𝗡𝗔𝗥𝗜𝗔𝗦 | pedri gonzález ✔️

035. 𝗥𝗘𝗘𝗡𝗖𝗨𝗘𝗡𝗧𝗥𝗢

   
                                 JULIA;

Bajaba las escaleras de la casa que habíamos alquilado en Bajamar.

Pedri tenía casa aquí, y desde el principio se había ofrecido para prestar la casa, pero finalmente decidimos alquilar una ya que la casa que era de Pedri ahora no estaba disponible, sus padres la estaban remodelando.

Teníamos que desayunar para empezar el día recorriendo un poco Bajamar.

La única que no conocía aquí era Agus. Gabi había venido varias veces con Pedri y bueno, yo conocía aquí por mí abuela.

Apenas pise el comedor pude oler el olor a comida que salía de la cocina. Vi a Agus sentada con los ojos semi abiertos. Supuse que Pedri estaba cocinando y Gavi aún no bajaba.

— Agus —le hablé mientras le tocaba el hombro.

La rubia pegó un salto leve y me miró rápidamente mientras trataba de abrir los ojos.

— La concha de tu madre, me cague toda Julia —me miró fijamente mientras fruncia los labios.

Me reí levemente mientras me disculpaba.

— ¿Pedri esta en la cocina? —pregunte.

Ella asintió.

— Yo voy a ir a buscar a Gavi, porque ya va a estar el desayuno —rodo los ojos.

— Vale —rei y comenzé a caminar hasta la cocina.

Apenas entré divisé a Pedri haciendo hotcakes de espaldas. Iba con una camiseta negra un poco suelta y unos pantalones blancos un poquitín sueltos igual.

Me acerque sin hacer mucho ruido y rodee su cintura con mis brazos.

El pegó un saltito tenso pero al sentirme se relajo.

— Buenos días guapo —dije con una sonrisa.

El se dio la vuelta y con una sonrisa me saludo con un beso en la mejilla.

— Buenos días, bella durmiente.

— ¿Cómo estás? —le pregunté mientras me separaba de su cuerpo.

Camine hasta la heladera y saque una botella de agua para beberla. Tenía bastante sed.

— Pues muy bien, he dormido genial, ¿tu? —pregunto por lo último mientras seguía haciendo el desayuno.

— Muy bien amor, dormí genial —deje la botella nuevamente en la heladera.

— Ya vi eh —dijo mientras apagaba el fuego.

Había preparado unos hotcakes, tazones de frutas, café, yogurt con cereales y tostadas con aguacate. Un montón de comida.

— ¿Necesitas ayuda? —me acerque a el.

El asintió con el ceño fruncido.

Con ayuda de los dos conseguimos llevar todo a el comedor.

A los dos segundos vimos como Agustina y Gavi bajaban las escaleras.

— Tardaron mucho —dije viéndola a Agus con sospecha.

Ella me miró por unos segundos, estaba un poco roja. Gavi sonrió y se sentó al lado de Pedri.

— La he entretenido en algo —dijo el sevillano guiñandome el ojo.

Los mire a los dos con las cejas alzadas.

— Cállate boludito —la rubia lo miro mal. El rodo los ojos y comenzó a comer.

[....]

— ¿Tienen todo lo esencial? —pregunto Pedri antes de poner en marcha el coche.