Siempre juntos.

Cosa del destino.

-Nunca lo habría creído si no me hubiera pasado, me enamore de alguien sin siquiera verlo, sin un primer beso, ni una primera cita, me enamore desconociendo su sonrisa, me enamoré de una manera pura, me enamoré de verdad. Siempre pensé que el amor trasciende lo físico, pero con él, lo llevé a la practica. Si no me entienden, él es de México, yo de Costa Rica y nunca nos hemos visto en persona.

Puedo decir que soy una ocurrente, soñadora, creo en la magia de las pequeñas cosas, me gusta ver cosas que nadie mas ve, esas pequeñas cosas que el mundo ha olvidado. Vivo cerca de un área rural, así que adoro el olor a tierra mojada, el volcán Arenal tiene todo mi respeto por su belleza y esplendor, para mí el cielo es hermoso aunque esté nublado, amo la manera en la que las gotas de lluvia caen en el patio de mi casa, dicen que mi alma es vieja. Pero a pesar de ser soñadora, soy escéptica en cuanto algunas cosas

Siempre he sido una muchacha de pocas palabras en cuanto a interactuar con otras personas se trata, nunca me agradó que un muchacho me tuteara, ya que para mi no era adecuado, además en mi país se utiliza el voseo mayormente.

Todo comenzó por una equivocación, una aplicación, me llevó a él, y una tarde de agosto nos hablamos por primera vez, ninguno de los dos pudimos imaginar que un "hola" podría llegar a ser el comienzo de algo grande.

Ese primer "hola", fue el inicio de largas conversaciones, acerca de cualquier tema, cualquiera!, al principio no estaba interesada en lo más mínimo en él, pero el insistía tanto que era imposible no notar cuán ocurrente llegaba a ser para obtener mi atención. Con el tiempo esa ocurrencia y esa insistencia, crearon un sentimiento, algo...nuevo, algo que jamás había sentido, y aunque tenia una idea de lo que ese sentimiento significaba no quería aceptarlo.

Algo me estaba pasando con alguien que nunca había visto, alguien que podría engañarme, alguien que podría no ser real, pero dentro de mí, sentía que él inspiraba confianza, había una fuerte atracción entre ambos, y no solo porque nuestros gustos fueran semejantes sino porque lo sentía, es ese tipo de momento en el que solo sientes que esa es diferente, especial.

Todo esto era hermoso pero...ya estábamos con otras personas... Yo, estaba con una persona que no me hizo adquirir nada positivo durante nuestro tiempo juntos; y se podría decir que entre mi entonces novio y yo, ya no había nada, no pasó mucho tiempo antes de que culminara ésa relación, entre nosotros nunca hubo nada, con esa persona no conocí el amor. Él estaba teniendo problemas con su respectiva novia, y ambos teníamos un problema en común; nos estábamos enamorando, era imposible no sentir celos, pero solo podíamos ser amigos, por ese momento, no podía ser, el ya tenía novia y aunque yo estaba sola...quería quedarme sola.

Pasamos madrugadas platicando acerca de cualquier tontería, riéndonos de nosotros mismos, hablando de nuestras vidas, hablando acerca de mis sueños donde la luna es de queso y ratones viven en ella, y Mateo, solo escuchaba con atención mis locuras, no era una atención fingida, en realidad prestaba atención y esto poco a poco me acercaba más a el.

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