012 | Una propuesta.

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Luego de aquella platica comprometedora, aún no era capaz de confesarle aquello a Adrián. No le hablaría sobre la carta pero si sobre engañar a Amber

Al terminar las clases rápidamente me levante del asiento para salir hacia afuera y fue entonces que alguien me tomó del brazo, evitándome salir

—Tenemos que hablar.—Suplica Melissa con los ojos reteniendo lágrimas

—Eso no funciona conmigo, pierdete.—le confieso mientras arrebato su mano de mi brazo. Me abraza por detrás haciéndome sentir incómodo

—Te lo suplicó, no me dejes. Te quiero tanto, no puedo estar sin ti—me confiensa

—¡SUELTAME! ¿¡No te das cuenta del ridículo que estas haciendo!?—todo el salón nos veía como cine o drama de novela, es tan ridícula. Esta vida no es un cuento de hadas para solucionarse de la noche a la mañana

Ingenua.

Amber Brinley.

Gerardo estaba siendo demasiado cruel con Melissa, ninguna mujer merece ser tratada de esa manera, al menos si eres Yesenia Willes.

Le grito tan feo, esta saliéndose enojado, mientras ella llora sin consuelo, que monstruo sin sentimientos, hijo de su mami

—JAJAJAJAJAJAAJAJAJAJA, Le pasa por zorra, por estar dando el mandado antes de tiempo.—carcajea Britney con gran gozo

—¿Como puedes expresarte así? Te lo creería si fuera Yesenia, pero es Melissa. Al menos tiene algo de sentimientos.—dije algo sacada de onda, como podía decir eso

Para empezar lo que paso fue culpa de Britney, no debió meterse ni decirle nada a Natha sobre su hermana, cada quien que haga lo que quiera. Para el colmo la que salió afectada fui yo, y todo por proteger a Britney

—Ya nadie puede reírse a gusto, las dos malditas son la misma cosa.

—Tal vez, pero siento que Melissa es diferente a lo que aparenta.—Estaba cien por ciento segura de que era así, nunca fallo cálculos y esperó no fallar esta vez

Adrián Watson.

—En serió, que poca madre tienes Gerardo.—Le contesto demasiado molesto a Gerardo con unas ganas inmensas y golpearlo

—¡YA ME TENÍA HARTO! ¿Que esperabas? ¿Algo de nobleza de mi parte? Y lo siento mucho pero soy diferente.

  — Pudiste ser algo más sensible, de verdad eres un patán. Si ella fuera mi hermana, ya te hubiera golpeado la cara, de verdad...

 — Da igual. Tengo otras cosas más importantes del cual pensar.— Contesto algo misterioso, veía al horizonte algo preocupado y estresado mientras se golpeaba la cabeza

¡Esta completamente demente!

 En eso siento un golpe en la nuca. No lo esperaba, era nada más y nada menos que mi primo Robert

   —Hola tarado. — saludo con gran actitud

Robert era el típico chico cliché de las novelas juveniles, el chico frió que se burla de las mujeres. Era incluso más popular que Gerardo y yo juntos. 

   —¿Que paso? Por que traen esas caras, y sobre todo tu Gerardo. ¿Pasa algo?—preguntó curioso

   — Problemas y más problemas. Estoy harto de Melissa, me fastidia, me acosa es insoportable, creyó que en realidad la quería. Demasiado patética.

¿Son la misma? ©Where stories live. Discover now