Capítulo 6: Tu y yo podemos gobernar nuestros corazones.

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"Entonces Harry Styles rompió con su novio", dice Jade un día, acercando una silla a la mesa de la sala de descanso. Leigh-Anne no está muy lejos, levantandose de su propia silla. Louis levanta las cejas y se recuesta en su propia silla, levantando sus fideos y girando algunos sobre su tenedor.

"Lástima", dice.

Leigh-Anne se burla y mira a Jade. "Te dije que ya lo sabía. Apuesto a que nunca estuvieron juntos, para empezar".

Louis sonríe y da otro mordisco. "No estoy diciendo nada", dice, porque en realidad no lo está.

Jade frunce el ceño. "Bueno, todavía no me gusta. No puedes engañarme, Lou, realmente te gusta".

"Realmente me gustan mis fideos", dice Louis. "Y me encantaría si alguna de ustedes me hiciera una taza. Noah me tuvo despierto toda la noche, tuvo fiebre."

Las caras de las chicas inmediatamente se vuelven comprensivas. "Oh, cariño", suspira Jade. "Deberías haber llamado. ¿El está bien?"

Louis asiente y se levanta, ahuyentando a Leigh Anne de la tetera. "Sí, creo que lo vomitó todo", luego se estremece y se disculpa rápidamente. "Lo siento, probablemente arruine tu apetito ahora".

"Estás bien, cariño", se ríe Leigh, agarrando su taza y la suya para lavarse rápidamente. "Pobre bebé, es demasiado dulce para estar enfermo. Dale un beso de mi parte."

Louis sonríe y saca el resto de sus fideos mientras espera a que hierva la tetera. De repente, su teléfono está sonando, zumbando sobre la mesa donde lo dejó, y se congela. Louis mira casi a cámara lenta mientras ambas chicas se lanzan a buscarlo, la cara borracha y sonriente de Harry desaparece bajo sus manos.

"El teléfono de Louis, Leigh Anne hablando", dice Leigh alegremente, saltando y retrocediendo cuando Louis intenta perseguirla. "Lo siento, ¿dijiste Harry? Harry, ¿quién?"

Jade se ríe y lo alcanza también, gritando: "Harry, tienes que venir de inmediato, Louis está preguntando por ti".

"Oh, él es absolutamente incorregible", acepta Leigh, saltando de los intentos de Louis por recuperar su teléfono. "Ha habido lágrimas y todo. Siempre es Harry esto, Harry aquello ..."

Louis hace un último intento desesperado por agarrar su teléfono y se lo arrebata de las manos. "Ambas pueden joderse", grita, antes de llevar el teléfono a la oreja. "Harry cariño, ¿cómo estás?"

Harry se ríe histéricamente. "Estoy maravilloso ahora", dice. "¿Cómo estás?"

"Molesto", dice Louis, mirando a las chicas que prácticamente se derrumbaron unas a otras riendo. La mirada molesta en su rostro solo sirve para hacerlos reír aún más y frunce el ceño. "Oh sí, las dos son jodidamente divertidas, apenas puedo soportarlo".

Jesy entra a inspeccionar el ruido y después de que las otros dos explican lo que está sucediendo, estalla en carcajadas. Louis pone los ojos en blanco y decide llevar su taza de té a su escritorio.

"Oh, no comiences tú también", murmura Louis cuando Harry no deja de reír. "Será mejor que llames con buenas noticias, Harold".

"Estoy en casa", dice Harry, y ninguno de los dos comenta lo bien que suena. "Mamá ya tiene la cena hecha, está muy emocionada".

Louis sonríe al pensar en la madre de Harry y realmente no quiere pensar demasiado en por qué es así. "Por supuesto que lo esta amor, tú eres su bebé".

Harry ríe suavemente y Louis escucha una puerta cerrarse suavemente en el fondo. "Probablemente lo entiendes más que yo, supongo. ¿Cómo estás? Suenas exhausto."

Your mess is mine ¦¦ L. SDonde viven las historias. Descúbrelo ahora