Your mess is mine ¦¦ L. S

Segunda parte. Capítulo 6: Zachary, parte 2

Louis se despierta en medio de la noche y encuentra a Zachary tendido al final de la cama, acurrucado en una bola con gatito debajo de la barbilla. Louis suspira y se agacha para levantar cuidadosamente al niño y ponerlo entre él y Harry. Zachary se retuerce un poco y gime, pero no se despierta, por lo que Louis vuelve rápidamente a dormir.

La próxima vez que se despierta, es con Noah empujándolo en la nariz.

"Papi", dice cuando Louis finalmente abre los ojos. "¿Por qué hay un bebé aquí?"

Louis gime y sacude la cabeza, alejando las manos de Noah de él. "Buenos días a ti también, amor", susurra. "Ese es Zachary, se quedará con nosotros por un tiempo".

Noah frunce el ceño y mira al niño. Zachary está profundamente dormido con el viejo pijama de Noah, a pocos centímetros de la espalda de Harry. Todavía está sosteniendo a su gato de peluche cerca, con la pequeña nariz presionada contra el pelaje.

"Parece que se lastimó", dice Noah, observando los moretones en el cuello de Zachary.

Louis se sienta contra la cabecera, con cuidado de no despertar a ninguno de los dos. "Noah", comienza. “Tenemos que ser muy amables y gentiles con él, ¿sí? Sus padres fueron muy malos con él, y él se quedará aquí mientras deciden qué pasará después ”.

Incluso Louis no está seguro de a quién se refiere cuando dice eso . El poder que pueden tener, tal vez, las personas que deciden si Zachary se queda o no. Louis desea tanto que solo dependiera de él y no un complicado desastre de sistemas y agencias judiciales. Desearía poder llevar a todos los niños como Zachary y mantenerlos a salvo, y se da cuenta de que eso es imposible, pero Zachary parece un lugar perfecto para comenzar.

"Está bien", responde Noah, de repente se ve muy serio. “Lo protegeré, como protejo a mi Amelia. ¿Se levantará pronto? Papá y yo podemos hacerle panqueques, eso siempre me hace sentir mejor ".

Louis sonríe y estira la mano para abrazar a Noah. "Eres tan maravilloso, cariño", murmura, pensando en todas las cosas horribles que leyó en el archivo de Zachary anoche. La idea de que cualquier niño tenga que pasar por eso lo hace sentir un poco más protector con sus bebés de lo que normalmente sería. "¿Sabes cuánto te amo?"

"Sí", Noah suspira, abrazando a Louis con fuerza. "Yo también te amo, papi".

Louis oye crujir a su lado y mira hacia atrás para encontrar a Harry rodando. Él les sonríe y suspira: "Mis muchachos".

"Papá", jadea Noah. "Estás despierto, tenemos que preparar el desayuno para Zachary".

Harry asiente y se sienta, frotando su cabello. "Está bien", murmura. "Vamos frijol, puedo escuchar a Amelia saltar en su cuna".

Noah sonríe y sale corriendo, sin duda camino a la habitación de Amelia. Harry se detiene por un momento, el tiempo suficiente para inclinarse sobre la cama y besar a Louis.

"¿Está bien?", Pregunta, mirando hacia donde Zachary todavía está profundamente dormido, con el clip apenas colgando de su cabello.

"Asustado, creo", responde Louis, reprimiendo el impulso de acercar al niño a él. "Me quedaré aquí con él, no quiero que esté solo cuando se despierte".

Harry asiente y lo besa una vez más, aliento mañanero y todo. "Desayuno en la cama, entonces", decide.

Con eso, Harry se levanta de la cama y va a buscar a Noah antes de que su hijo pueda intentar sacar a Amelia de su cuna nuevamente. Louis se queda donde está, colocándose contra la cabecera con su computadora portátil para poder trabajar y enviar un correo electrónico a la oficina para informarles que trabajará desde su casa durante unos días. Es un poco corto precipitado, pero últimamente ha estado tan tranquilo que a nadie parece importarle mucho.