CUATRO PAREDES

ESCARCHAS

Faltaba solo horas para mi partida, ya estaba amaneciendo y no había podido dormir en toda la noche, pensando en lo que seria mi futuro, habían tantos rumores respecto a el,su aspecto era una incógnita para casi todo los nobles, las personas que lo conocían personalmente eran pocas y de su confianza por lo que nunca divulgaban su aspecto  ni nada relacionado a el , las pocas cosas que se sabían de el y que no eran rumores es que era el segundo hijo del rey con una concubina , con el don del manejo de espadas. desde los 14 años ya era considerado un maestro en el manejo de espadas y participo en guerra desde los 15, un genio en estrategia, su padre el rey lo quería coronar por sus grandes logros en batalla pero rechazo la corona para no lidiar con la aristocracia  y eligió tener la mitad de las tierras del reino, esa parte fue el lado norte que estaba alejado de la capital para así no tener que preocuparse por la nobleza, también tomo el titulo de duque.

me levante para abrir las cortinas y apreciar el amanecer - que cielo tan hermoso, en el frió norte habrá amaneceres así- me preguntaba.

-señorita , su equipaje ya esta en la carroza le ayudare a vestir- dijo rose , me vistió y me peino, rose estaba triste y yo lo notaba ,aunque yo no estaba mejor que ella, dejar a rose y a Alex hacían doler mi corazón de solo pensarlo, alex me acompañaría hasta el norte, pero por ordenes del duque nadie mas que yo se quedaría en sus tierras no quería a mas personas en su propiedad , en algún momento hablaría con el y se lo pediría como favor ya que alex y rose eran mi única familia y viceversa, rose era una viuda y alex huérfano ,estabamos unidos por el destino y yo lo sabia.

-rose siempre fuiste una madre para mi, me enseñaste a hablar, caminar, escribir y leer , y no puedo estar mas agradecida por ello- le dije mientras le abrazaba y lloraba.

-señorita susan usted es la hija que todos desean - dijo llorando- la extrañare todo lo que me quede de vida

-rose, esto definitivamente no es un adiós- dije mientras salia de la habitación limpiando mis lagrimas.

como era de esperar nadie en esta familia me despediría, no es como que me sorprendiera o me doliera ya que no tenia ningún aprecio por nadie en esta casa 

-alex, eres el mejor-le sonreí y me apresure a entrar a la carroza, y asi era , el era el mejor , me había enseñado a manejar la espada desde los 8, me hizo aprender  historia de otros países y un poco de estrategia, claro era lo único que el podía enseñarme ya que eso era todo lo que sabia, pero yo estaba mas que agradecida por esas cosas.

-igual usted señorita - cerro la puerta y la carroza se puso en marcha.

bien podía escaparme y renegar este destino era lo que mas deseaba. pero mi padre tenia con que chantajearme y esos eran rose y alex que no tenían donde ir, rose era la viuda de un barón que se suicido por las cuentas que acumulo y por ello permanecía en nuestra casa por seguridad y  porque su marido y mi padre fueron amigos,claro que ella no quería deber nada a nuestra casa y se ofreció como criada. y alex como soldado  puede ser ejecutado por traición si mi padre así lo deseara.

lo hacia por ellos, lo haria todo por ellos me repetía una y otra vez, el cambio de temperatura ya se estaba sintiendo, alex, me tendió una manta y me cubrí mi cuerpo entero en ella  solo dejando mi cabeza afuera. muy pronto llegaríamos a la primera posada.

-alex en que piensas- le pregunte ya que no aguantaba el silencio

-en lo blanca que es la nieve- me dijo, mire por la pequeña ventanilla

-es cierto, blanca y hermosa-sonrei mientras admiraba el paisaje

el carruaje se detuvo y eso solo significaba que llegamos a la primera posada ,moría de hambre así que cene algo y luego fui a mi habitación , trataba de despejar mi mente y no pensar en la boda ni nada relacionado al duque del norte, pensaba en toda las cosas que rose me había enseñado, y estaba tan agradecida por ello , ya que pensar en cosas como estas me distraían , debía admitirlo era una dama inteligente y bastante linda para su edad, podria llegar hasta a casarse de nuevo .

los días se volvieron repetitivos, tratar de acercarnos lo mas que podíamos de día y en la noche descansar, el cambio de temperatura se sentía cada vez mas a mediada que íbamos avanzando.

  El frió se colaba dentro de la carroza, las tres mantas que cubrían mi cuerpo no parecían querer cumplir su función, la pequeña ventanilla de la puerta estaba casi llena de escarchas impidiéndome la visibilidad, solo podía escuchar los pasos de los caballos.

Ya sabia que estábamos cerca, con hoy se cumplían 5 días de viaje, nos quedábamos en posadas en la noche y a primera hora del día seguíamos el viaje, y hoy era el ultimo día de viaje. Hoy lo tenia que conocer, mi futuro esposo,  al que nunca había visto,  habia evitado todo el viaje pensar en ello pero era inevitable, me intrigaba su aspecto ya que nadie de mis conocidos lo habia visto ya que el evitaba toda las fiestas de la sociedad, solo se dedicaba a la guerra, los rumores que recorrían  la corte era de un monstruo que solo tenia sed de sangre y no estaba interesado en nada mas que no sean guerras y muertes.  cada vez que pensaba en ello me entraba un escalofrió que recorría todo mi cuerpo.

Me sobre salte cuando abrieron la puerta de la carroza, me había perdido en mis pensamientos , Alex me tendía la mano, tarde solo un segundo en reaccionar, lo mire con miedo ya que no quería bajar y el lo entendía, ya que todos en la corte sabían los rumores, podía ver la preocupación en sus ojos , le sonreí ligeramente para tratar de aliviarlo.

Baje lentamente y solo la nieve fría en mis pies me hizo reaccionar y mirar al frente, y ahí estaba el,estaba un paso adelante que todos sus soldados y resaltaba mas que un sol en invierno, nuestros ojos conectaron y sentí el escalofrió del miedo cuando vi los ojos mas fríos y la sonrisa mas sádica que pude ver en mi corta vida.