capitulo 15(quiero ver a mamá Freen)

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[Pov Becky]

—Señorita Becky. - escuché la voz de Bruno del otro lado de la puerta. Sequé mis lágrimas y salí para ver qué quería - La buscan a fuera. - dijo al verme

—¿Quién? —Pregunté

—La Señorita Sarocha. - fui muy clara al decirle que no la quería ver

—Fui muy clara contigo y con todos los que trabajan aquí que si ella venía a buscarme les dijeran que no quiero verla. - estaba molesta

—Lo sé, señorita, pero ella está muy insistente. - bufé

—En un momento bajo. - me puse mis zapatos de andar y salí de mi habitación

Abrí la puerta de la entrada encontrándome con ella, tenía tantas ganas de abrazarla sin importar nada, pero no iba perder mi orgullo en un día. Ella me engañó por mucho tiempo, me lastimó haciéndome sufrir. Ahora que ella sufra

—¿Qué quieres? —Traté de sonar cortante

—Solo venía hablar contigo sobre Sam. - ¿ahora te importa mi hija?

—Te dije que no quería que metas a mi hija en esto. - respondí. Y era verdad

— Ella también es mi hija ... Sé que no he sido la madre ejemplar que te gustaría que fuera, sé que cometí grandes errores en el pasado. Y créeme que los estoy pagando caro, solo te pido que me dejes ver a Sam, es más por el divorcio no te preocupes yo te daré lo que me pidas ... Solo quiero ver a mi hija. - sé que Sam también es tu hija, pero sinceramente nunca lo ha demostrado

—No es problema mío, Freen. Es problema de ella si quiere verte, por mí puedes verla, es tu hija al final de cuentas. Pero la decisión de verla no es mía, si no Sam quiere pasar tiempo contigo yo no me voy a oponer. Eso sí, si le haces algo, te juro que te mato Freen. - le advertí y ella asintió

—Gracias ... ¿Crees que podría verla ahorita?

—No, se fue con mis padres de compras. - respondí - Si quieres venir a verla mañana. Claro si quieres y tienes tiempo. - use sus propia palabra  ella siempre era   "No tengo tiempo"   clásico de ella

—Claro, muchas gracias. - me agradeció - Yo-yo me voy ...

—Ya vete. - dije cortante

—Adiós ...— no le respondí a su despedida porque sentí unas ganas inmensas de llorar, y no quería darle el gusto que me viera en ese estado

Cerré la puerta en su cara y me recargue sobre esta, mis lágrimas comenzó a caer sobre mi rostro. Me dejé deslizar hasta quedar sentada sobre el piso, mi llanto fue más fuerte, que provocó que me escucharan. 
Angie se agachó hasta quedar a mi altura

— Mi niña ...— acarició mi cabellera

—La extraño, Angie. - dije entre el llanto

—Lo sé, cariño. Pero debes salir adelante por tí y por la niña. Ella te necesita ver más fuerte que nunca, ella es la más afectada en todo. - la miré. Angie tenía razón

—Lo sé ...— limpié mis lágrimas  que caían por mis mejillas - Yo me voy a mi habitación, gracias Angie. - besé su mejilla y subí a mi habitación

Cerré la puerta y me acosté sobre mi cama quedando boca abajo, abracé una almohada.

Te extraño tanto, me has echo sufrir de diferentes formas que sinceramente no encuentro el modo de odiarte. 
Quisiera olvidarte pero no puedo, tal vez un día lo haga, no te diré que pronto porque no sería como dejar de respirar. 
Tengo muchos motivos para olvidarte y despreciarte pero lograrste tener un amor inmenso en mi corazón ... 
Me has hecho fuerte de mil formas, me enseñaste a ser más astuta, más inteligente y no dejarme de NADIE. 
Te amo y te extraño.

—Hija, ya llegamos... Becky. - escuché la voz de mi madre y se acercó a mí - Becky, hija. Ya deja de llorar, no has parado en todo el día ...

—¿Cómo quieres que esté? —Pregunté

— Becky, no vale la pena llorar por ella ... No merece tus lágrimas. - mi madre tenía razón, pero aunque yo no quisiera llorar lo hacía

—La extraño, mamá. La extraño como no tienes idea ...

— Becky, no ... yo no lloraría por alguien que no vale la pena.

—Tú me dices eso porque no te ha pasado nunca. - me levanté y me senté para mirar a mi madre - Tú no me puedes decir que no llore porque tú no sabes lo que siento, mamá. Tú no sabes que se siente saber que de la persona que estás completamente enamorada te haya engañado con otra y lo peor, que esté embarazada. Dime tú ¿qué sentirías si papá te había hecho eso? —Mi madre me miró triste y mi hija entró a mi habitación

—Mami, mira lo que me compraron...— Sam traía una Barbie en sus manos, no terminó de hablar al verme con mis ojos hinchados - ¿Otra vez estabas llorando, mami?

—No mi cielo. Ven aquí. - extendí mis brazos para abrazarla, ella se acercó a mí y me abrazó

—Ya no quiero que llores, mami. - dijo llorando y mi madre la miraba

—No hija. - acaricié su cabello negro y besé su sien - Mamá, ¿me dejas hablar a solas con mi hija? —Le pregunté a mi madre mientras tenía a Sam en mi regazo

—Claro ... Las esperamos abajo para ver una película, Emily y Meena están haciendo palomitas. - asentí

—En un momento bajamos. - mi madre salió de mi habitación cerrando la puerta y dejándome sola con mi hija - Sam mi amor, te quería decir algo ...

—¿Qué mami? —Se sentó en el borde de la cama

—¿Extrañas a mamá fre? —Le pregunté y ella asintió

—Mucho ...— bajó su mirada y levanté su rostro delicadamente

—¿Qué tienes, mi amor? —Le pregunté

—Extraño mucho a mami fre, pero ya no quiero que te pegue. - salió una lágrima de  
sus ojos y la abracé

—Ella nunca me volverá a pegar mi niña, ya no.

—¿Vamos a regresar a la casa con mami Fre? —Preguntó y negué

—No, hija. - bajó nuevamente su mirada - Por eso te quería preguntar si te gustaría verla ...— Sam me miró nuevamente con una sonrisa y se limpió sus lágrimas

—Si mami, quiero ver a mami. - dijo con una sonrisa y limpiándose sus lágrimas

—Bien, mañana ella vendrá a verte.

—¿De verdad, mami?

—Sí hija. - ella besó mi mejilla y me abrazó - Me alegra que te pongas feliz, mi amor. Vente vamos con tus abuelos y tus tías a ver la película

—Vamos, mami.

A promise is a promiseWhere stories live. Discover now