capitulo 86 (el mejor equipo Sarocha Armstrong)

4.1K 321 1
                                    

[POV Becky]

—Amor...—llamé a Freen quien estaba sentada en el borde de la cama dándome la espalada

—¿Sí?—volteó a mirarme

Se miraba triste, no me gustaba verla así. Decidí acercarme a ella, la abracé por atrás, le dí un besito sobre su hombro y luego recargué mi cabeza sobre este.

—¿Estás bien?—me atreví a preguntar aunque sabia la respuesta

—Te mentiría si estoy bien, mi amor—suspiró—.¿Sabes?, no quiero que nuestra hija la pase mal con lo de mi madre, es muy pequeña y yo sé que no entiende muchas cosas

—Juntas la ayudaremos, ¿sí?—la miré

—Claro que sí—me acarició mi mejilla y se acercó para darme un beso—.Te amo

—Te amo...—respondí mientras comenzaba a colocarme sobre sus piernas, provocando que nuestro beso poco a poco fuera haciéndose más rápido y caliente, sentí como ella me tomaba de mi cintura y con la yema de sus dedos hacía pequeños círculos sobre la tela de mi pijama. Por mi parte, comencé a bajar mis besos a su cuello

—No, no detente...—me miró—.No puedo, Becky...

— Freen...

—No puedo, enserio perdóname—con mucha delicadeza me quito de encima de ella y suspiró—Perdóname... Iré a mi oficina un momento, te amo—dejó un besó en mis labios y se acercó al moisés donde mi bebé estaba despierta—.Buenas noches mi princesita bella, te amo hija—besó su cabecita y salió de la habitación sin decirme nada más 

Suspiré. Mi mente comenzó analizar la situación, quizá fue mi error intentar hacer el amor con Freen, ella ahora no esta nada bien, lo mejor era disculparme con ella pero por el momento quiero darle su espacio.

Me puse de pie y fui a ver a mi bebé quien seguía dormida, con mucho cuidado la cargué. Mi bebé era hermosa, aún recuerdo a Sam cuando estaba así de pequeñita e idefensa.

—Hay mi bebé, ¿cómo puedo ayudar a mamá fre a sentirse mejor? Tú ya sabes que ella la está pasando muy mal pues tu abuelita Lisa está enfermita—le hablaba a mi bebé caminaba con ella en brazos por la habitación—.Todos estamos muy tristes por eso, también tu hermanita me preocupa mucho, vez que hoy no quiso cenar y ella es muy glotóna, así como tú—vi a Beca sonreír—¿Te da risa que te diga que eres glotoncita como tu hermanita?—volvió a sonreír—.¿Está feliz mi princesita? Amo verte sonreír mi cielo. Oye, contagiale a mamá fre un poquito de tu alegría, mi niña, ¿ándale, sí? Yo sé que para ti es fácil

Estuve con mi bebé aproximadamente veinte minutos en lo que la dormía y Freen no subía a la habitación, acosté a Rebecca en su moisés y salí de mi habitación para ir a la planta de abajo, toqué la puerta de la oficina de Freen

—Pasa—habló desde el otro lado. Entré y la vi sentada en su escritorio atenta en su computadora—Amor, sabes que tú puedes entrar sin tocar, ¿pasa algo?

—No, solo quería preguntarte si aún no subirás a dormir

—Estoy trabajando, Becky, en un rato subo—me dijo sin dejar de hacer lo que hacía en su computadora

—Bueno, entonces te veo en la habitación

Sin decir más salí cerrado la puerta y volví a subir a mi habitación.
Me acosté en mi cama y luego cubrí mi cuerpo con las sabanas, desconozco el momento en que me quedé dormida, sentí unos brazos tomar mi cintura.

—Te amo...—susurró cerca de mi oído

En ese momento me volteé para mirarla

—También te amo—contesté con una sonrisa

A promise is a promiseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora