A promise is a promise

capitulo 66 ( es hora de decirle a Sam del bebé)

[Pov Omnisciente]

                     

Había pasado un mes desde que Becky y Sam volvieron a vivir con Freen. Había sido un mes un poco difícil porque la pequeña Sam decía extrañar a sus abuelitos y tías, incluso ya no quería comer y ni jugaba. Un día, Freen desesperadamente de ver a su hija en ese estado decidió llamar a sus ex suegros pero Samuel le respondío muy groseramente diciéndole que había sido claro en su lo que dijo. Freen pensó que no debía rogarle porque ni siquiera dejó que le explicara.
Así que ella comenzó a poner de su parte para que su hija como mínimo comenzara a comer.

                     

Era sábado por la mañana. Freen y Becky se encontraban durmiendo. La ojinegra fue la primera en despertar, sonrió al ver a la castaña durmiendo tranquilamente, quitó los mechones de cabello que tapaban parte de su rostro. Era bellísima.

                     

Decidió no despertarla, y se levantó de la cama para ponerse su pantalón térmico, ya que había dormido en bóxers y con una remera.
Besó la mejilla de Becky, después acarició su vientre y lo besó antes de salir de su habitación y entrar a la de Sam. Notó que su hija aún dormía abrazado a su dinosaurio de peluche.

                     

Bajó a la cocina y comenzó a preparar el desayuno para Becky y su hija.

                     

Cuando había terminado, se sentó en una de las periqueras para checar y responder desde su celular algunos mensajes que Mónica le había mandado para confirmarle la junta que tendría el lunes a primera hora.
Sintió unos brazos abrazar su cuello por atrás, inmediatamente sonrió y se dió la vuelta para encontrarse con una Becky sonriente.

                     

-Buenos días-dijo Becky antes de tomar a Freen del cuello y juntar sus labios

                     

-Buenos días...-respondió tomándola de la cintura

                     

-.Que rico huele mi amor, ¿que cocinaste?

                     

-Huevos estrellados con tocino, tostadas con aguacate especialmente para ti, zumo de naranja y café para mí

                     

-Ay mi vida, no tenías que hacer todo esto para nosotras- Becky acarició la mejilla de Freen

                     

-Claro que debo de hacer esto y más por ustedes. Las amos

                     

-Yo también las amo. Las amo mucho mucho mucho-se besaron nuevamente

                     

-¿Cómo amaneciste?-preguntó Freen

                     

-Muy bien y ¿tú?

                     

-Excelente, ¿cómo está el pequeño de esta casa?- Freen se agachó para levantar la remera de Becky y depositar un beso en su vientre

                     

-Con mucha hambre- Freen volvió a mirar a Becky y la tomó del rostro para plantarle un beso suave en los labios