Me pierdo entre tanta luz al ritmo de la música. No sé qué hago en este lugar ni el sentido que tiene mi vida, pero no me importa.
Deslizo mis pies como si tuviera algo de arte y miro los rostros que me rodean. Sonrisas, movimientos que oscilan entre el ritmo y el acompasado, aliento a alcohol.
Definitivamente prefiero cantar a pleno pulmón y no pensar que en la puerta de la discoteca, unas horas después, alguien hará de esta un colchón.
Me miento y miro el cielo. Alguien llora sabiéndose desgraciado eterno. Cae la primera. Ve el futuro. Se ahoga en la corriente.
Las luces se apagan. Todos fuera. Paraguas abiertos.
Marcha. Solo queda el río. Está temblando la orilla.
Persona y naturaleza. Soledad. Oscuridad.
Alguien mira hacia la discoteca y siente el vacío de dentro. Ojalá pudiera entrar y desahogarse. El agua le ha calado muy adentro.
Se encienden las luces y aparece una silueta. La música no suena, pero qué melodía tan maravillosa aquella de la puerta que se abre. Palpitaciones al ritmo de las lágrimas.
El río se desborda cuando ve el sol y lo abraza, pero no importa. El sol aguanta. El agua se evapora.
Alguien vive. Alguien duerme.
Alguien ya no llora.
YOU ARE READING
Atentamente, Octubre
PoetryAntología de relatos y poemas realizados durante el mes de octubre por la participación de la iniciativa Inktober. Espero que os gusten mucho y que los disfrutéis tanto como yo lo hice escribiendo. Que disfrutar a veces no quiere decir pasarlo bien...
