Extra 2 - 'Un gran amigo'

263K 35.2K 60K
                                    

—He oído que Max pasará a Alice a los avanzados.

Rhett asintió distraídamente, dejando las cajas donde Tina acababa de decirle. Ella lo seguía con otro montón. Siempre había cosas que hacen en el hospital, así que la visitaba a menudo para echarle una mano.

—¿Crees que está lista? —preguntó Tina con una pequeña mueca de preocupación.

—¿Para ser una avanzada? ¿O para tener a Deane de profesora?

Tina lo miró por un momento.

—¿Te preocupa que Deane sea su profesora?

Rhett no respondió inmediatamente. No sabía qué decirle. Hacía días que era consciente de que Alice terminaría en el grupo avanzado. La había visto en clase, le había dicho a Max que era buena disparando... pero verlo suceder era una cosa muy distinta. Él podía ser duro en clases, pero Deane sería peor. Y no podría ayudar a Alice sin que lo acusaran de favoritismo.

Dejó la última caja con un poco más de fuerza de la necesaria y miró a Tina, que seguía pareciendo un poco preocupada. Estuvo a punto de confesar que sí, que le preocupaba, pero al final optó por tranquilizarla un poco.

—Relájate, mamá oso —le dijo, con una mano en su hombro—. Alice es más dura de lo que aparenta. Si Deane se pasa, le dará una patada en la boca.

—Eso no me tranquiliza, Rhett.

—No podemos cuidarla eternamente.

—Lo sé, pero... —Tina suspiró pesadamente—. Siento que es tan inocente para todo esto...

Sí, era inocente para muchas cosas que era mejor no mencionar en voz alta porque él no debería pensarlas con una alumna. Rhett puso una mueca.

—Se las apañará —murmuró, intentando convencerse.

—¿No tienes que ir a avisarla?

—Sí, debería —suspiró—. Nos vemos más tarde, Tina.

Salió del hospital con el humor por los suelos. No le apetecía tener que ser el que hiciera que Alice abandonara esa habitación, pero se suponía que ahora estaría en su especialidad.

Cruzó la calle al otro lado sin mirar a nadie en concreto, pero tuvo que detenerse cuando alguien se metió en su camino. Casi puso los ojos en blanco cuando vio quién era.

—¿Puedes dejar de seguirme de una vez, Deane?

—No estoy siguiéndote —ella frunció el ceño, señalando el edificio de alumnos—. Estaba hablando con uno de mis alumnos. ¿Qué haces aquí?

—Nada que te incumba.

—En realidad, creo que lo sé —Deane esbozó una pequeña sonrisita—. No tendrá nada que ver con que cierta alumna nueva vaya a ser, de repente, una avanzada... ¿no?

—Sigue sin ser tu problema.

Pasó por su lado, pero se detuvo cuando la escuchó reírse.

—Ya veo lo que hace falta para que te asciendan aquí dentro.

Eso, por algún motivo, consiguió que Rhett se tensara de pies a cabeza. Quizá no fue tanto por lo que dijo, sino por cómo lo dijo. Se dio la vuelta hacia ella, enfadado. Deane sonreía con cierta superioridad.

—¿Tienes algo que decir? —preguntó Rhett directamente.

—¿Tienes tú algo que decir sobre el ascenso de la chica?

—La han ascendido porque se lo merece.

—A lo mejor la han ascendido porque es tu favorita. Esperemos que no termine como tu antigua favorita.

Ciudades de Humo (¡YA EN LIBRERÍAS!)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora