Superheroicos °Comodín y tú°

🌩️CAP 13 cuánto te amo🌩️

Esas palabras me enternecieron, sentí como mi corazón se apachurraba por lo que me pidió comodín. Me conmovió al punto de que las lágrimas empezaron a caer por mis mejillas.

- Nunca más cariño- dije en susurros para Comodín -

- Sufrí demasiado cuando desapareciste, ni un segundo deje de buscarte- dijo entre sollozos-

- Ya no tienes que buscarme, ya estoy aquí y no me iré nunca mas- dije acariciando su cabeza para tranquilizarlo-

El me abrazaba con todas sus fuerzas, como si en algún instante yo me fuera a ir de su lado. Acaricié su cabello, nos quedamos en silencio unos segundos, no estábamos 100% adentro de su cuarto, estaba mi cuerpo ala mitad de la entrada. Todo lo que paso, paso en menos de un segundo.

Se separó poco a poco incorporándose en una postura recta, su rostro ya no estaba serio, estaba tranquilo, con paz interna y la demostraba. Su semblante demostraba tranquilidad, como si lo que le preocupaba ya por fin lo había dejado en paz.

Si mira y la mía estaban conectadas, era contacto visual, cara a cara. Solo el y yo, su mirada bajo poco a poco a mis labios, se acercó poco a poco, sus pasos eran cortos pero seguros.

Al estar a unos sentimientos de mi rostro y de mi cuerpo, una de sus manos viajo a .i cintura, con ese agarre me acerco a su cuerpo lo suficiente como para estar a unos milímetros y sorpresa ya estaba dentro de la habitación.

Con un movimiento cerro la puerta de su alcoba con un ligero portazo al final y me recargo a esta. Wow el si sabía ponerme nerviosa al punto de que me temblaran casi las piernas, su otra mano libre se posó sobre mi hombro un poco más arriba así recargando se en la puerta, sus labios a un milímetro de los míos, su respiración pegando contra mis labios.

Se acercó un poco más hasta que por fin nuestros labios se encontraron, una reencuentro en el cuál se podía sentir cuánto nos habíamos extrañado. Su mano acariciaba mi cintura y abdomen, mis manos subieron a su pecho y de ahí recorrieron poco a poco hasta llegar a su cuello, una se quedó a un costado de este y otra recorrió un poco más hasta llegar a su nuca y jugar con su cabello.

El aire hizo de las suyas agotando se para los dos, no separamos solo unos milímetros juntando nuestras frentes con los ojos cerrados controlando nuestras respiraciones.

Mi pecho subía y bajaba repetidamente y el de el no se quedaba atrás con ello. El aire volvía poco a poco a incorporarse en nuestros pulmones, ese silencio entre nosotros o casi silencio ya que eran jadeos en susurros casi de parte de los dos por el hecho de que nos acabamos de besar agotando nuestro oxígeno.

Pego mi cadera a el con la mano que se encontraba en mi cintura y en un solo susurro dijo.

- No sabes cuánto te amo niña bonita- dijo para terminar con un suave y corto beso-

CONTINUARÁ...
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