Bailando con el diablo

capítulo 8: Decisiones

Ese mensaje me dejó descolocada, que el estuviera rondandome a mi era una cosa, pero que se metiera con Michell o Josh ya era algo totalmente diferente.

Los problemas de "el" conmigo tenían que ser solo conmigo, que involucrara a alguno de los chicos, independientemente de mi relación con uno de ellos, era algo que no iba a permitir; Así que hice algo de lo que tal vez me arrepentiría después: Llamé al número del que me había llegado ese mensaje.

Sonó al menos 4 veces antes de que una voz que conocía perfectamente respondiera - Hola Gianina-

- ¿Que mierda es lo que quieres?

- Ni un hola? Recuerdo que antes incluso me abrazabas, cómo cambian las cosas.

- Eso fue antes de saber quién eras realmente, ahora termina de decir ¿Que es lo que quieres? Porque no voy a dejar que dañes a gente que no tiene nada que ver con esto - le dije con un tono amenazante aunque en realidad estaba temblando. Caminé rápido a mi habitación mientras escuchaba la respuesta.

- Gianina, eso lo harás tú, no yo- dijo de manera irónica. -pero supongo que quieres evitarlo así que te daré la opción de que lo hagas, te veo mañana a las 10:00pm en la dirección que te enviaré- y después de eso colgó dejándome sin palabras.

Al instante llegó un mensaje con la dirección:

Callejón 54, cerca del parque de la ciudad a las 10. Te quiero sola Gianina.

Después de eso me di una ducha, me coloqué ropa cómoda y me quedé en mi habitación pensando en lo que acababa de suceder. Yo tenía miedo de lo que el pudiera hacerme, si, pero con todo y mi miedo tenía que evitar a toda costa que el dañara a quienes me rodean, ahora tenía amigos, tenía a Josh y a pesar de que fuera un pesado, estaba empezando a tenerle cariño.

Traté de no pensar en eso así que me coloqué los audífonos mientras hacía algunas tareas que tenía. Pasó un rato y escuché que tocaban a mi puerta de una manera bastante insistente.

Arg, que molesta la gente  toca la puerta así.

Y la gente que respira, la gente en general es bastante molesta.

Abrí la puerta de mala gana encontrándome con Darla, la chica rara del grupo clandestino aún más raro. Había olvidado que les debía una respuesta.

- Entonces Gia ¿Si o no?- dijo cruzándose de brazos.

- No- respondí cerrando la puerta en su cara pero ella metió el pie para evitarlo. No tenía tiempo ni ganas de tener está conversación pero entonces volví a abrir con la sonrisa más falsa que pude. - oye su grupito es bastante lindo, pero no pondré en riesgo mi beca.

- Si nadie se entera, no estará en riesgo- dijo como si fuera obvio, era un poco pesada la chica.

- Mira no tengo porque darte mil razones, para que lo entiendas, no bailaré con ustedes porque no quiero y ya- Respondí ya un poco harta de esto.

Ella solo me miró como ofendida y entonces dijo: -te arrepentirás de esto- y por la misma se fué.

¿Me acababa de amenazar? Lo que me faltaba, más enemigos.

Entré a mi habitación y seguí haciendo tareas toda la tarde.

Ya habían pasado varias horas, no tenía ni idea de qué hora eran y Vi que mi puerta de abría de golpe y Josh entraba de muy mala gana. - Te esperé por media hora Gia, MEDIA HORA- dijo molesto y casi me auto bofeteé mentalmente, ¿Cómo pude olvidar la salida con Josh?.

- Ay, lo siento lo olvide.

-Si ya lo noté, es la primera vez que me dejan plantado.

- Bueno tengo una idea, pidamos comida a domicilio y hagamos una pijamada justo aquí ¿Te parece?-Me miró aún molesto por un segundo pero luego cambio la expresión y asintió con la cabeza.

-Bueno, ¿Que pedimos?- yo sonreí como un angelito - ¿pizza?

- ¿En serio? Habiendo tanta variedad de comida, en serio te mereces el apodo de chica básica.

Yo solo me rei y tomé el celular para pedir la Pizza.

Unos 10 minutos después la pizza llegó y nos sentamos en mi cama a comer, yo tomé un pedazo desesperada y me lo llevé a la boca cerrando los ojos cuando le di el primer mordisco - mmm, deliciosa como siempre- .

- no entiendo tanto drama por una pizza- dijo Josh mientras le daba un mordisco a su rebanada - es lo más normal del Mundo - Yo lo miré ofendida.

-oye la pizza es la mejor comida que existe y no pienso discutirlo con nadie - el solo bufó y siguió comiendo.

Cuando terminamos decidí hacer algo para animarnos un poco - oye, juguemos a las preguntas - le dije a Josh y para mí sorpresa el aceptó animado.

- a ver, ¿Color favorito?

- el rojo- respondió dándole un sorbo a su refresco -  ¿El tuyo?

- Es el verde agua.

- ¿Tu género favorito de baile?- está vez preguntó él.

- Amo el hip hop, pero muy pocos saben que en realidad mi género favorito es el contemporáneo - respondí algo apenada.

- ¿Contemporaneo?- dijo riéndose a carcajadas - no te imagino bailando toda delicada, es casi como si bailaras ballet -

- no es lo mismo y no te rías, en realidad siento que me expreso mejor así - respondí ofendida.

- Si como sea- dijo aún riendo. - El tuyo es el popping supongo.

- pues si, pero también me gusta mucho el krump, toda esa energía e intensidad que puede llegar a transmitir es simplemente... Magnífico - dijo y se notaba un brillo en sus ojos que nunca había visto, se notaba que de verdad le gustaba.

Y así pasamos la noche averiguando cosas sobre el otro, descubrí que amaba Marvel al igual que yo y que le gustaba leer. La verdad es que Josh era un chico interesante y bastante inteligente, cuando no estaba siendo un engreído era muy bueno escuchando y tenía buenos gustos musicales, ambos éramos fans de 5sos.

El día anterior había comprado unas mascarillas y no se me ocurrió mejor momento para utilizarlas.

- Josh tengo una idea- dije sonriendo mientras iba por las mascarillas.

- Por esa sonrisa, no creo que sea una de las buenas- dijo quejándose como siempre,el muy idiota.

Volví con las mascarillas y el me miró con una cara de "ni se te ocurra".  Me aplique la mía y cuando me acerqué a ponerle la suya no dejaba de moverse para impedirlo.

-Por dios ya quédate quieto!

- No, porque no quiero que me pongas esa crema verde en la cara.

- pero quedarás precioso, ya deja de quejarte.

- TE DIJE QUE NO!- dijo esquivando otra vez la brocha con la que le aplicaba la mascarilla.Ya me estaba hartando pero no iba a abandonar mi misión ¡ De eso nada!

Me subí a su regazo y le sujeté la cara con una mano mientras le aplicaba la mascarilla con la otra, el me miró con su cara de niño malcriado pero no le hice caso y seguí aplicándola.

- Eres muy molesta ¿sabías?

- Ya cállate Josh- en ese momento voltee la cara y al mismo tiempo que el y por ese instante fui conciente de lo cerca que nos encontrábamos,  nos miramos y por un segundo bajó la mirada a mis labios, tragué saliva bastante nerviosa pero por alguna razón no podía quitar mi mirada de él. Me tomó desprevenida colocando su mano en mi muslo aún sin dejar de mirarme; Mi cerebro había entrado en corto circuito y no sabía muy bien como reaccionar.

Ya bésalo! Era lo único que se repetía en mi mente.

El acercó su rostro al mío y faltaban pocos centímetros para poder tocar sus labios, pero allí fue como si hubiera regresado de golpe a la realidad, me alejé y sone mi garganta de manera ruidosa.

- Ehh, yo... Creo que,  iré a quitarme esto de la cara- y fuí al baño sin esperar una respuesta de él.