Capítulo 23

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    Alysha no se consideraba una persona de justicia, más bien ella sabía que lo suyo era la venganza, Larys Strong era su siguiente víctima.

Al principio le costó entender, la inexperta princesa no era alguien que capte los mensajes ocultos, tenía sus secretos pero nada tan sofisticado como El Gusano Blanco, así que cuando la criada le susurró al pasar no comprendió a qué se debía, pero ahora que había atado cabos, sabía quién era el culpable de su casi muerte a manos de un grupo que nunca más volvió por ella gracias a su amante, Cregan. Pero ese eslabón perdido no podía seguir así, todo debía caer en su lugar, y el lugar de Larys eran las malvadas manos de Alysha. Todos tenemos claro que ella no es una heroína y tampoco una villana, es una persona muy humana, lo que la convierte en algo peor.
   
    Una vez advertido, no hay ataque a traición.
   
    Los pasos de Lord Strong eran lentos y erráticos, la princesa dorniense jamás confundiría su andar y lo reconoció al instante.
   
    --Cerdito, cerdito travieso, ¿a dónde vas con tanta prisa?-- De entre la oscuridad del pasillo, la figura de Danna emergió como si el Desconocido mismo viniera por él.    
   
    Se detuvo y la miró asustado, podía imaginar que algo malo le pasaría pero realmente no tenía idea del peligro en el que estaba. --Señorita Danna, no esperaba verla por aquí, me temo que no puedo detenerme a platicar con usted, llego tarde a una reunión con la reina Alicent.-- Intentó evadirla pero ella le impidió avanzar al ponerse delante suyo.
   
    --Me temo que no podrá asistir.-- Del otro pasillo oscuro, apareció Azir, con su pesado martillo en la mano y la vista clavada en él.
   
    --Es...-- Apretó el agarre de su bastón, estaba nervioso. --es importante que asista.-- Pasó saliva observando a ambas mujeres. --¿Dónde están los guardias?-- Miró a los lados y vio como, mientras lo miraba, Sir Arryk cerraba las enormes puertas que le darían una salida. No habría guardia en ese pasillo, estaba solo frente a su verdugo, verdugo con perfume de mujer.
   
    --Me gustaría decir 'buenas noches, Larys Strong',-- Frente a él apareció Alysha, con una sonrisa que daba miedo, sabía que estaba ahí para pagar. --pero no creo que sean tan buenas para usted.--
   
    --Princesa, por favor, me gustaría seguir mi camino en paz.-- La voz le falló dejando ver lo asustado que estaba.
   
    Alysha soltó una risa como si aquello hubiera sido lo más gracioso. --Larys, pequeña rata deforme,-- Dijo con asco.-- es que tu no entiendes...-- Se acercó más. --estás en grave peligro ahora.--
   
    Danna le tapó la boca y lo arrastró hasta una de las habitaciones vacías que Arryk había desocupado especialmente, era de esas que nadie siquiera limpia.
   
    --¡Ayuda! ¡Ayuda!-- Intentaba gritar pero la pelirroja le dio un golpe de puño tan fuerte que la mandíbula comenzó a dolerle horrible al punto de no poder hablar.
   
    --Nadie puede ayudarte rata, así como te encargaste de que nadie pueda hacerlo con el padre de Jace, ¿recuerdas?-- Larys abrió los ojos grande al oír eso. --Cuando dejaste que las llamas se lleven a tu familia por avaricia, ¿adivina qué?-- Le palmeó la mejilla con fuerza, haciendo que la mandíbula duela mucho más. --Llegó la hora de saldar cuentas con tus muertos y conmigo, porque tienes que pagar el daño que me hiciste.--
   
    Alysha se lo había advertido "vuelve a hacerme algo y te haré arrastrarte hasta mi, saltarás sobre tu pie deforme". Danna lo amordazó y le sostuvo las manos mientras la dorniense le quitaba los zapatos.
   
    --Espere, por favor no lo haga, se lo ruego.-- Sollozó.
       
    --Es asqueroso.-- Comentó Azir.
   
    --Así que por esto te masturbas viendo los delicados pies de la reina Alicent, maldito enfermo, ¿verdad?-- Alysha lo pateó. --¿Te gusta verla llorar mientras te muestra una parte de ella?-- Azir arrastró su martillo y el metal de este le rozó el pie, haciendo que se retuerza. Larys soltaba lágrimas silenciosas mientras se sentía vulnerable.
   
    --Está llorando.-- Carcajeó Danna.
   
    Aly se agachó frente a él y le sostuvo la cara con fuerza, ella era una mujer bastante fuerte y el tenía la mandíbula dañada. --¿Quieres suplicar? ¿Te sientes destruido? Dime una cosa... ¿Cómo se sentía tu hermano al oír a tu padre quemarse? ¿Cómo se sentía tu padre al saber que su hijo, su precioso y valiente hijo ardía por no dejarlo solo? Yo también se cosas, idiota. ¿Sabes como se sentía mi hermano al saber que su padre había muerto?-- Lo sujetó con más fuerza e hizo que la mire. --¿Sabes todo el daño y traumas que causaste? ¡¿LO SABES, MALDITA ESCORIA?!-- Lo soltó con brusquedad. --¿Ves? Aquí puedo gritar todo lo que desee y nadie va a escucharme, por alguna razón el sonido no sale de estas cuatro paredes, es la habitación favorita de la rata asquerosa de Aegon pero ahora me es de utilidad.-- Se inclinó para mirarlo. --Apuesto que piensas en tomar venganza luego.-- En sus ojos había un odio profundo que le oscurecía la mirada. --Hazlo y te obligaré a marchar desnudo por la calle, completamente expuesto a la burla y asco del pueblo y luego te colgaré en la plaza. No juegues conmigo, Strong, no soy Alicent ni mucho menos tu padre, tengo mucha imaginación para dañarte antes de matarte y esto que haré es lo menos perturbador entre todos mis pensamientos contra ti.-- Pateó su bastón debajo de la cama polvorienta para que no pueda hacerse de él.
   
    --¿Estás asustado, cerdito?-- Se burló Danna muy cerca de su oído. --No imaginas el asco que me da ver tus pies expuestos. Tranquilo, no tenemos fetiches con deformidades, no vamos a masturbarnos viendo la mierda que escondes detrás de tu horrible zapato, me seca la vagina de solo verlo.-- Aquello hizo reír a las damas.
   
    --Luego de lo que va a pasarte, lo pensarás dos veces antes de forzar a la reina.-- Alysha canturreó.
   
    --Por favor...-- Suplicó entre lágrimas.
   
    --Es una lástima que sea una perra sin corazón porque tu llanto no me conmueve, pero sigue rogando, me deleita.-- Lo recorrió con la mirada. --Tuve que consolar a Jace, a Rhaenyra, ver los ojos traumatizados de Alicent, recibir golpes por parte de tus amigos...-- Había oscuridad en sus ojos. --¿Crees que unas putas lágrimas pesan más que eso?-- Le pateó el pie malo.
   
    --Se lo suplico...-- Susurró, la vio inclinarse sobre sus piernas. Danna lo silenció y entonces el castigo comenzó.
          
    --Debiste hacer que me maten esos malditos del burdel, porque estoy aquí para hacerte pagar.-- Le aplastó la rodilla con las manos al punto de romperla y Azir dejó caer su martillo sobre el pie sano, haciendo que la carne estalle bajo el metal. Sus gritos ahogados por el paño que la pelirroja puso en su boca lo dejaban en silencio, las lágrimas caían mientras las oía reír, estaba acabado, habían terminado con Larys.
   
    --Ya no eres tan poderoso, ¿verdad, cerdito?-- Le susurró Danna, quien le sujetaba con fuerza los brazos. --Quiero ver como te arrastras.-- Le dijo al oído.
   
    --Párate sobre tu pie malo, ahora.-- Ordenó la princesa. Larys la miró sin responder, tenía la mirada vacía. --Hazlo o el martillo caerá sobre tu pie otra vez.-- Le amenazó y él, con un esfuerzo sobrehumano, se sujetó a la cama y se puso de pie pero cayó. --Si no puedes caminar hacia mi, quiero que te arrastres y me supliques que pare y no siga destrozando partes de tu cuerpo.-- Escupió con asco. --Arrástrate por mi perdón.--
   
    Canalizando en sus brazos la poca fuerza que tenía, cumplió y se arrastró mientras lloraba y repetía "perdón, perdóneme princesa, se lo ruego", cada centímetro que avanzaba, Aly lo retrocedía para aumentarle la dificultad de llegar a ella.
   
    --En poco tiempo perderá tanta sangre que morirá.-- Comentó Azir, observando el camino de sangre a su avance.    
        
    La dorniense caminó hasta él luego de inspeccionarlo con desprecio. --Larys Strong,-- Se inclinó y dejó un beso de boca cerrada en sus labios. --deuda saldada.-- Se levantó y salió de la habitación con ambas mujeres, dejándolo sólo y roto.
   
    Se arrastraba por los pasillos oscuros dejando a su paso una pincelada de sangre, su ahogado pedido de ayuda no era escuchado, el llanto le debilitaba la voz. Un par de pasos fueron su esperanza y luego de oir gritos pidiendo ayuda, cerró los ojos y todo fue oscuridad...
   
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    --Anoche...-- Respiró profundo. --Anoche ocurrió una tragedia.-- Comenzó la reina. --Larys Strong fue atacado cruelmente y ya no volverá a caminar, está muriendo.-- Dijo con pesar, al borde de las lágrimas.
   
    --Qué trágico, que doloroso, que terrible. Una pérdida irreemplazable, acabo de perder el apetito por la angustia.-- Comentó Alysha con sarcasmo, ganándose una mirada de molestia por parte de varios en la mesa, pero no de Daemon, quien sonrió al oírla.
   
    Aemond la sujetó del brazo para atraerla a él y susurró con molestia. --¿Puedes dejar de ser tan malditamente irrespetuosa con Larys y mi madre?-- Comentó entre dientes.
   
    Aly se soltó con brusquedad y bebió de su copa. Cuando Aemond miró a su izquierda, Cregan lo veía fijamente, el príncipe tuerto se puso nervioso y tuvo que desviar la mirada.
   
    --¿Se sabe algo de los culpables o la persona responsable de eso?-- Preguntó Ceryse.
   
    --Como si Larys no tuviera una lista interminable de enemigos deseosos de hacerle pagar.-- Comentó con burla Daemon.
   
    --Casi todos los nombres de esta mesa están en esa lista.-- Alysha miró a a reina y esta no dijo nada.
   
    --Lo humillaron cruelmente, se arrastró con su pie expuesto y el otro destrozado.-- Ceryse expuso con molestia.
   
    --Ceryse, por favor, te importa un carajo ese tipo.-- Bufó Cregan. --No sería el primer imbécil que recibe su merecido.--
   
    --Pero no soy simpatizante de la brutalidad.-- Respondió ofendida.
   
    --Mal por ti, la brutalidad es un castigo necesario.-- Siguió su hermano.
   
    --No son las palabras más acertadas para un Lord Protector.-- Intervino Aemond.
   
    --Claramente habla desde su lugar de príncipe mimado que no conoce los peligros fuera de la Fortaleza Roja.-- Lo miró el norteño. --La brutalidad es necesaria para poner orden o cobrar venganza, fue eso lo que me ayudó a recuperar mi puesto, son las palabras más acertadas para quien es Lord Protector en el Norte.--
   
    --Si supiera sobre comandar, entendería que la diplomacia lo es todo.-- Comentó Otto.
   
    --Entiendo que eso sea así para usted, un segundo hijo,-- Aquello hizo que el Mano tense la mandíbula. --pero no es así en realidad, las intervenciones pacíficas son lo primero, las advertencias después y por último se utiliza la brutalidad para ejercer orden.--
   
    --Un rey que le da más importancia a la diplomacia que al orden en sí suele dejar que sus subordinados se den el lugar que creen merecer y de allí vienen las confusiones de rangos.-- Jace lo miró. --Quizás, Larys Strong necesitaba brutalidad para recordarle cuál es su lugar porque la diplomacia que usted predica le dio más alas de las merecidas.--
   
    Baela y Alysha se miraron y sonrieron mientras intentaban disimularlo llevando la copa a sus labios.
   
    --No entiendo por qué eso la angustia tanto, reina.-- Rhaenyra la miró. --Es un subordinado más, muchos de esos pasaron cosas peores.--
   
    --Y usted se ve más afectada por esto que por reales tragedias, no imagino a qué se debe.-- Comentó Daemon.
   
    -Es que, por la brutalidad, entiendo que solo una persona aquí es capaz de hacerlo.-- Ceryse sonrió.
   
    --¿Tiene alguien en mente? Porque veo que ea rápida para inventarse conclusiones.-- Lucerys la miró con molestia, sabía que algo tramaba la Stark.
   
    --Solo dos personas tienen ingenio para infringir ese tipo de dolor pero solo una es cobarde como para no decir que fue.-- Mantenía la sonrisa en sus labios.
   
    --Si tienes un culpable, dilo.-- Exigió Otto.
   
    --Daemon Targaryen es conocido por su barbaridad, sabemos de lo que es capaz por rumores o hechos confirmados.-- Comentó.
   
    --Yo no reniego de lo que soy.-- El peliplata la miró serio.
   
    --Lo sé, y por eso lo descarto.-- Le sonrió. --La única persona que actúa y no se hace cargo es Alysha.-- La miró por encima de su hombro.
   
    --Deja de decir estupideces, Ceryse.-- Cregan se mostró enojado. --Puras especulaciones, lo único que haces es correr tras la falda de tu suegra en busca de migajas de aprobación, no tienes nada más que chisme. Ella busca un culpable y tu intentas complacerla y darle uno.--
   
    --Absolutamente todos en esta mesa podríamos ser.-- Comentó Daemon. --No veo justo acusar a Alysha.--
 
    --Alysha no siente afecto por Larys pero no haría algo así.-- Aemond la defendió. --Se más inteligente y no te dejes llevar por chisme.--
   
    --No puedes hacer una acusación tan grave sin pruebas. Intentas ir contra la corona por un subordinado.-- Lucerys volvió a hablar.

 𝘍𝘪𝘳𝘦 𝘖𝘯 𝘍𝘪𝘳𝘦[En edición] ۞ Targaryen - Martell - StarkOnde as histórias ganham vida. Descobre agora