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Issei caminaba algo tranquilo por las calles de la ciudad de Kuoh. Naruto, se encontraba a su lado, y como siempre solo estaba revisando su celular, y aunque tenia curiosidad por saber que tanto veía el mercenario en su móvil, no se atrevió a preguntar.

Habían pasado un par de días desde el intento de asesinato y su paranoia había disminuido un poco. Mayormente a que el rubio le había explicado mejor todo sobre lo sobrenatural y el porque lo intentaron matar.
Estaba ligeramente sorprendido y aterrado por el hecho de tener una Sacred Gear, aunque el rubio no específico cuál tenía.

El sol comenzaba a ocultarse en el horizonte de Kuoh, tiñendo el cielo de tonos anaranjados y morados. Issei y Naruto caminaban en silencio, cada uno perdido en sus pensamientos. Issei aún procesaba la información que Naruto le había dado sobre el mundo sobrenatural y su propia conexión con él a través de la Sacred Gear.

--¿Sabes?-- comenzó Issei, rompiendo el silencio. --Nunca pensé que mi vida daría un giro tan... extraño.--

--La vida tiene una forma peculiar de sorprendernos. Y en cuanto a tu Sacred Gear, pronto descubrirás de qué se trata. Solo necesitas estar en la situación correcta para que se revele.-- Naruto dijo en un tono aburrido y sin apartar la vista de su celular.

Issei asintió, sintiendo una mezcla de anticipación y nerviosismo. --¿Y qué pasa si no puedo controlarlo?--

--Si no te matas a ti mismo, alguien te matará.-- respondió Naruto con firmeza, y sin endulzar la situación del castaño.

Issei no dijo nada y simplemente se quedo en silencio procesando las palabras de Naruto, y tolo lo que había pasado en estos días.
Recordó que en estos días el séquito Gremory los había estado vigilando en cada momento dentro de la academia. Tal vez no era él mejor en eso, pero pudo sentir la hostilidad de los demonios Gremory, en especial la que fue dirigida al rubio que lo seguía a todos lados, a una distancia considerable y sin interactuar más de lo necesario algo que agradeció.

A pesar de que no le interesó mucho su reputación, ya que fue clasificado como el pervertido de la academia, el entablar relación con el chico problemático de la academia disminuirá sus ya escasas posibilidades de conseguír pareja.

La ciudad de Kuoh se sumergía lentamente en la penumbra de la noche, y con ella, la realidad de Issei se teñía de sombras y misterios. A su lado, Naruto seguía siendo una presencia constante, un guardián en el caos que se había convertido su vida.

--Es un mundo peligroso, Ismael.-- continuó Naruto, guardando su celular y mirando al joven con una seriedad que rara vez mostraba. --Pero mientras me pagen no estás solo.--

Issei asintió pasando por alto el cambio de nombre, ya se había acostumbrado a que el rubio no dijera su nombre. --¿Crees que puedas enseñarme algo?-- pregunto.
Se sintió ligeramente más cómodo y en confianza, con el rubio.

--Mi contrato no abarca eso. Pero si tienes diez dólares te enseñaré algo.--  Naruto dijo en un tono neutro.

A pesar de que nunca actuó con un contrato tan bajo, el castaño le agrado, y realmente no tenía nada mejor que hacer. Enseñarle al niño a defenderse lo mantendría entretenido hasta que Azazel decida que hacer con él, o hasta que su contrato se termine, y le daría algo de dinero en efectivo qué realmente necesito. Sus cuantas bancarias seguían vaciandose casi al instante en el que se le deposito el dinero.

--¿10 Dólares? ¿Eso cuanto es en yenes?-- Issei dijo pensativo, hacendo la conversión en su mente y buscando algo en su mochila. --¿Necesariamente tiene que ser en dolares?--

--Son aproximadamente mil quinientos yenes.-- explicó Naruto con una mirada práctica. --Y los yenes también funcionarán. El dinero es dinero, después de todo.--

שד צלליםWhere stories live. Discover now