La muerte de Mustafa fue como un balde de agua fría para sus seres más cercanos y para quienes querían verlo en el trono.
Fatma sultan se encamino hacia los aposentos de Nükhet y comenzó a gritar un sin fin de insultos para ella y para Hürrem, Bayaceto había reprendido severamente a su madre y había deseado que Iskender muriera de la misma manera.
—Madre - Mahşa se acercó a ella —¿Todo esta bien?
—Lo esta, una tormenta se avecina, pero al menos se que he vengado la muerte de mi hijo Ümut.
—Era algo que debía hacerse - Nükhet asintió. —De todos modos eran culpables, que su amor por él no ciegue a nadie.
—Déjame sola, voy a prepararme para la visita de Mahidevran - Mahşa se reverencio y salió.
Días después en el palacio se llevó acabo un funeral algo pobre para el que alguna vez fue el heredero, Fatma sultan soltaba su veneno cada que la veía y a Nükhet le gustaba aquello.
—Es una víbora que viste colores brillantes cuando nuestro şehzade se ha ido - las presentes la miraron.
Las criadas no estaban de acuerdo con Fatma sultan, pero tampoco podían desobedecer la.
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𝐔𝐧𝐚 𝐣𝐨𝐲𝐚 𝐞𝐧 𝐞𝐥 𝐩𝐚𝐥𝐚𝐜𝐢𝐨 | 𝐒𝐮𝐥𝐞𝐲𝐦𝐚𝐧 𝐈©
Historical FictionUn amor como el fuego, ardiente pero destinado a extinguirse. Dejo de ser la belleza de circasia a ser la sultana más poderosa. Aquella que hizo a todos temblar y pedir perdón de rodillas. Para el sultán Gaia era " una joya en el palacio" Y para otr...