"Quizás debería aceptar que ya fue, que no fuimos, no somos y no vamos a ser " -Leah Amara Stilinski
Leah Amara Stilinski, una joven de 15 años, quién estuvo enamorada del joven McCall desde muy pequeña, pero a pesar de todo estuvo para el en sus m...
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Habían pasado días desde la platica con Peter, el recital de la preparatoria estaba a la vuelta de la esquina literalmente, era mañana, así que quería dormir bien.
Pero como siempre Stiles interrumpe mi sueño, ya que entro a mi habitación sin tocar y haciendo un escándalo.
—Leah, Leah —me decía el castaño moviéndome de un lado a otro — despierta, Lydia llamo, al parecer encontraron otro cuerpo.
Al escuchar eso olvide que quería dormir más de lo usual y me levanté de una, para después ponerme mis tenis y apurar a Stiles para salir.
—Vamos, por ahí hubieras empezado —le dije a mi hermano.
Salí por la puerta y ambos fuimos hacia donde estaba Lydia, por suerte mi padre casi no estaba en casa.
Scott igual venía en camino y de hecho nos lo topamos en el camino venia detrás nuestro.
Llegamos a la preparatoria y mi hermano se bajó como loco buscando a Lydia, Scott y yo íbamos detrás de él.
—¿En dónde están?—pregunto mi hermano al bajar del coche. —por aquí —nos grito Allison.
Al parecer Lydia nos había llamado a todos, pero la castaña llegó antes, y ahí estaba ambas chicas, Lydia parecía estar desconcertada al no saber que pasaba.
—¿Lydia? —le pregunté. — ¿Que paso? —es lo mismo, lo mismo que en la piscina —nos dijo la pelirroja —subi al auto, pare en un lugar totalmente diferente y termine aquí y les llamé porque hay otro cuerpo. —¿Encontraste un cadáver? —le pregunto mi hermano —No, aún no —le dijo la chica
Lydia sabía que había un cadáver en la preparatoria al parecer es como un sexto sentido, pero ella quería que nosotros lo encontraramos, no ella.
Mi vista se fue hacia un lado y ahí vi algo que me dejó boquiabierta, era una agente de policía, pero no era cualquier agente, la conocía era Tara, ella nos ayudó a mi a Stiles con nuestras tareas.
—Chicos —les dije cuando comenzaron a discutir — creo que hemos encontrado el cadáver.
Los chicos giraron y al igual que yo quedaron en shock al ver a la persona, había sangre por todos lados y ella estaba con los ojos abiertos.
Llamamos a papá y este nos corrió del lugar como siempre lo hacía, se había vuelto una costumbre.
Al día siguiente no fui a clases, quería descansar un tiempo en casa, bueno, al menos un día.
Estaba acostada en mi cama, ya estaba despierta y pare en busca de algo, pero cuando di vuelta para regresar a mi cama la ventana estaba entreabierta y escuché un ruido desde el balcón de la misma.
En mi mesa de noche había una daga por si llegaba a pasar algo, lo tome y fui con cuidado hacia la ventana, la abrí de una y aventé a la persona que estaba ahí.
