19: Duerme conmigo.

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28 de julio.

No le quise preguntar nada a Karly sobre su repentino cambio de humor y su llanto. No quería entrometerme, no quería que llorara una vez más.

Después del desayuno, Liam se ofreció acompañarme al gimnasio del hotel, hace mucho que no iba y estaba pensando en aprovechar las mañanas de esta última semana yendo ahí.

Él estaba sentado en una pelota inflable de las que usan las personas que practican yoga, con una Tablet en la mano, mientras yo estaba en la caminadora.

—Acabo de descargar una aplicación de distinta programación ¿qué series me recomiendas? —Preguntó mirándome.

—A como te veo, una serie de abdominales —Respondí, reí al verlo rodar sus ojos.

—Es enserio, alguna de comedia o no sé.

—No veo series, pero puedes preguntarle a mi hermana, ella es experta —Le dije.

—Bueno, buscaré una de suspenso mientras tanto.

Estuve un rato en la caminadora, después levanté pesas otro rato, ya había perdido la costumbre de hacer ejercicio, me cansé muy rápido.

Fui a tomar una ducha a la habitación, al entrar a la ducha me di cuenta de que había dejado mi ropa afuera, como siempre, rodé los ojos y me metí a la ducha.

Al salir tomé una toalla y la enredé en mi cabello, luego salí del baño escurriendo un poco de agua en la alfombra, lo único que escuché al salir de ahí fue un pequeño grito. Me sobresalte y luego me di cuenta de que era Karly, sus ojos estaban tapados por sus manos y sus mejillas más rosas de lo normal.

—Dios, tapate.

Fui por mi ropa y me metí de nuevo al baño, me vestí y salí otra vez, ella ya estaba viendo la televisión. Cuando sintió mi presencia volteó a mirarme y sacudió su cabeza.

—Es la segunda vez que casi de te veo desnudo —Dijo incómoda.
—¿La segunda? —Pregunté confundido.

—Sí, la primera fue en el estanque ¿recuerdas?

Me dio escalofríos al recordarlo, esos parásitos pegados a mi cuerpo succionando mi sangre.

—Es verdad —Murmuré y luego me senté a lado de ella en su cama. Estaba viendo caricaturas.

La miré de soslayo y sonreí. Era una chica muy bonita. Pero también tenía un carácter infernal.

Sintió la mirada sobre ella y se giró para mirarme, levantó una ceja —¿Qué? —Preguntó curiosa.

Sacudí mi cabeza.

—Es curioso el poder que tienes sobre mí.

—¿Tengo un poder sobre ti? —Preguntó sonriendo y asentí.

—Te veo y ni siquiera tienes que hablar... todo lo que puedes hacer es sonreír y hacer de mi día el mejor —Susurre.

Ella sonrió y se acercó sorprendiéndome con un beso, corto, pero era un beso. Luego seguimos viendo esas caricaturas que carecían de sentido.

***

Fuimos al supermercado a comprar dulces. Y había tanta ropa de verano que lucía muy bien, pero era muy cara.

—Ojalá mi mamá me hiciera otro baby shower porque necesito ropa —Murmure para mí mismo pero Karly escuchó y rio.

Ella había mantenido su mano entrelazada de la mía, era algo raro que fuera ella la que no me soltara, como si no quisiera perderse entre las personas, o como si no quisiera que yo me perdiera.

—¿Estás bien? —Le pregunte y ella sólo asintió.

***

Cuando ya pagamos toda la comida chatarra que habíamos comprado (que iba a echar a perder mi mañana en el gimnasio), nos sentamos en unas mesas del área de comidas.

Y entonces no pude contener más la curiosidad.

—Corazón, ¿puedo preguntarte algo?

Ella asintió. Había estado muy callada. Cada vez que le preguntaba sobre algo ella solo asentía. Estire mis brazos por encima de la mesa para tomar sus manos.

—¿Qué sucedió anoche? ¿por qué llorabas?

Ella me miró unos segundos y después suspiró.

—Escuché que hablabas con tu madre, ¿qué es lo que no quieres dejar ahora? ¿queda mucho tiempo para qué? ¿qué es sobre lo que no estás segura de querer hacer ya?

Ella lucía abrumada, maldije internamente, no quería que se sintiera así, le di una mirada disculpándome.

—Harry, te lo diré después de un tiempo de que volvamos a la granja —Ella respondió.

—¿Lo prometes? —Le pregunté. No estaba seguro de que lo haría.

—Lo prometo.

—¿Confías en mí?

—Lo hago — Respondió.

—Bien, quiero que sepas que puedes hacerlo y que cuentas conmigo para lo que sea, ¿de acuerdo? —Ella asintió, luego besé su mano.

***

Karly

Era lo suficientemente cobarde para decirle a Harry lo que podía o no podía (pero que seguramente sí) suceder en un futuro no muy lejano.

¿Por qué tenía que ser tan cobarde?

Cuando salí de ducharme, él estaba sentado en el sofá de la habitación viendo un programa de bromas. Me recosté en mi cama con el objetivo de dormir, pero unos segundos después sentí cerca su presencia. Se recostó a mi lado y besó mi hombro.

—Buenas noches, princesa —Susurró y después sentí como se levantaba de ahí para ir a su cama.

Entonces me giré y le pedí algo por lo que me sentí estúpida. Le estaba dando más ilusiones.

—Duerme conmigo —Fue lo que dije.

Él parecía sorprendido al principio pero en menos de dos segundos ya estaba de nuevo a mi lado, mientras acariciaba mi cabello. No traía camisa, solo un par de pantalones de franela. Lucía muy bien así, muy acogedor.

Tomó mi mano y la apretó fuertemente. Entonces quise llorar. No quería soltar nunca su mano.

Unos segundos más tarde se quedó dormido con su mano entrelazada de la mía y su rostro escondido en mi cuello.

Iba a lastimarlo, yo no quería que eso sucediera. Él era una persona tan buena que me daba miedo siquiera decirle una palabra sobre ello. Tendría que hacerlo en algún momento, pero no ahora. Era una estúpida. Porque entre más tiempo me tomara para decírselo, más lastimaría su pobre corazón.

Es por eso por lo que no quería que él se enamorara de mí. Y yo no quería aceptar que estaba comenzando a sentir eso mismo hacia él.

Sin darme cuenta comencé a aprender sus horarios, cuando se dormía, cuando se levantaba, cuando era la hora que ya tenía sueño y empezaba a contar chistes sin gracia.

Su forma de hablar cuando estaba enojado, su voz grave más profunda de lo normal, la vena de su cuello saltada. Su mirada profunda.

Y hasta su manera de ser dulce, sus caricias, sus besos, sus frases y el brillo de sus hermosos ojos verdes.

Y tenía miedo.

Miedo de que podría alejarme, sin querer, de todo eso.

***

Nota: 

Pregunta random, ¿qué les gusta más? ¿el frío o el calor? Yo amo el frío.

Por favorrrrrrr voten y comenten, me harán muy felíz :3

Nos leemos!
-k.

Angelic Organics (h.s.)Where stories live. Discover now