alaska [h.s.]

Tres.

3

GRACE'S POV

Estaba nevando y mis pies estaban helados cuando desperté.

Me estire en la cama, prendí la televisión y no estoy segura de cuanto tiempo estuve ahí acostada simplemente viendo viejos capítulos de diferentes series.

Mirando cada tanto fuera de la ventana, los pequeños copos caer.

Sintiéndome reconfortada al sentir el calor de las cobijas, contrastada con el frío fuera de ellas.

Era ya casi medio día cuando mi estomago rugió con fuerza, exigiendo ser alimentado.

"No." Gemí al escucharlo y me enterré aun mas en el colchón. A respuesta, mi estomago volvió a rugir. "Oh, vamos." Suspire y talle perezosamente mis ojos, antes de quitar las cobijas y salir de ellas finalmente.

Sentía estar en un congelador al ponerme de pie.

Dando brinquitos para no tocar el piso más allá de lo necesario, fui rápidamente a mi maleta y saque los primeros jeans que vi, una camiseta de manga larga beige, ropa interior limpia y unos viejos Vans; y entonces eche a correr al baño, no sin antes tomar mi celular del buró.

Me bañe sin prisa alguna.

A pesar de que mi estomago seguía pidiendo alimento cada tanto, había decidido que merecía una ducha larga. Deteniéndome a limpiar correctamente cada parte de mi cuerpo e incluso, aplicando un par de exfoliantes en mi piel.

Había decidido no utilizar la tina, ya que tenía hambre, así que el solo utilizar la regadera adelanto un poco el tiempo que tarde en salir.

Me cambie en tiempo récord y salí del baño en vuelta en el vapor que salía de este, no sin antes ponerme mi anillo el cual me había quitado para bañarme.

Acomode mi cabello de modo que mi cabello ondulado caía en bonitas ondas a penas rozando mis hombros.

Aplique rímel a mis pestañas y un poco de color a mis labios.

Levante mi chamarra café de lana del día anterior y me la puse, sintiéndome caliente en ella.

Tome las llaves y mi celular del tocador y salí del cuarto.

Mis ojos volaron en todas direcciones una vez que comencé a bajar las escaleras.

La noche anterior me había sentido como en un sueño. Así que ahora, con el sol entrando por las ventanas, la casa parecía más real que nunca.

Pase mis manos por el frío comedor con adoración una vez que pase junto a el.

Entre a la cocina y fruncí el ceño una vez que recordé que no había nada que comer. Suspire.

"Veamos..."

Camine hacia el refrigerador del cual colgaba un pequeño cuaderno de notas. Tome la pluma que había dentro de ella y arranque una hoja.

Hice una pequeña lista de lo que necesitaría.

-Agua.

-Pan.

-Huevos.

-Jamón.

-Queso. Mucho queso.

-Barras nutritivas.

-Té. Mucho té.

-Leche.

-Fruta.

-Verdura.

-Frituras.

Releí mi pequeña lista pensando en si faltaban cosas. Estaba bastante segura de que así era, pero en este momento no podía pensar en mucho mas.