Experimento 009 (Sasusaku)

Final

Nuestro hogar
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Había abierto los ojos de golpe, se sentía confundido y muy desorientado.

"¿En donde estoy?, Acaso, estoy muerto"

Pensó el azabache con confusión, pero una vez que pudo ver mejor, se dio cuenta de que se encontraba en una habitación, se incorporó con lentitud, una mueca de dolor se instaló en su semblante, pues había sentido pequeñas punzadas en su cabeza y su cuerpo ardía con molestía, como si, se estuviese quemando por dentro.

- Tks... Maldición- maldijo por entre dientes.

Sasuke intento hacer aún lado la sábanas y levantarse de la cama, pero se detuvo al ser consciente de la persona, que tenía posada su cabeza al borde de la cama, la cual se encontraba dormida.

- Sakura- susurro el azabache, al ver a su esposa dormir de esa forma tan incómoda.

Miró la forma en como sus manos estaban entrelazandas y una sonrisa apareció en sus labios, todo ese tiempo ella lo estuvo cuidando.

Saber eso lo llenaba de un fuerte sentimiento de calor en cada célula de su cuerpo, al igual que una sensación amarga que apareció en su garganta y bajaba hacia su pecho, era consciente de que había preocupado a su esposa y que ella estuvo cuidándolo toda la noche.

Hasta que el sueño la venció y se quedó profundamente dormida.

- Sakura, despierta Sakura- susurro el azabache acariciando la cabeza de su amada.

La pelirrosa abrió lentamente de sus ojos, tuvo que parpadear un par de veces para acostumbrarse a los rayos del sol, que bañaban toda la habitación, gracias a que la ventana se encontraba abierta.

Se talló los ojos con el dorso de su mano, y una vez que perdiera el sueño, abrió los ojos como plato al ver que su esposo había despertado.

- ¡Sasuke, despertaste!- exclamó ella, quien no dudó ni un segundo en lanzase a los brazos de su amado- Dios, tenía tanto miedo.

- shh, estoy bien, estoy aquí contigo- murmuró el pelinegro, correspondiendo aquel abrazo, que su esposa le estaba dando.

- no sabes el miedo que pase, al verte tan herido, por un segundo creí que morirías.

- eso no pasará mi amor, te prometí que te protegería a ti y a nuestro hijo, ¿Recuerdas?- le recordó, intentando tranquilizar a su mujer, quien estaba llorando en silencio- ahora todo estará bien.

El azabache la agarro por los hombros y rompió con aquel abrazo, solo para ver su rostro,  con una mano empezó a secar sus lágrimas, con delicadeza, mientras que una sonrisa tierna se dibujaba en su rostro, haciendo que ella sonriera también.

Solo Sakura tenía el deber de ver su lado tierno y cariñoso, porque Sasuke solamente fue así con ella.

Ambos no tardaron en besar sus labios, con desesperación, las lágrimas no tardaron en volver a resbalar por las mejillas de la chica, había tenido tanto miedo, había pasado cinco días en la que Sasuke no despertaba y era todo un alivio al ver que ya su esposo se encontraba bien.

- te amó- murmuró el azabache, rompiendo con aquel beso, a centímetros de los labios de su esposa.

- yo también te amo, Sasuke- respondió, para luego volver a unir sus labios en otra besó.