Capítulo XLIII: El humano que engañó a la muerte

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Parrish detuvo el coche frente a la mansión Hale, mientras el sheriff en el asiento trasero cargaba su arma, su mirada se trasladó a Stiles, quien se encontraba ya dispuesto a saltar del asiento.

-No haremos nada hasta que no llegue Scott -el Sheriff cortó su acción firmemente, tampoco era un lunático, no tenían la menor oportunidad contra la Bestia ellos dos solos.

-El auto de Lydia está aquí -El chico lo miró, como si fuera estúpido quedarse esperando cuando podían ir simplemente allí y convencerla de que su plan era una tontería.

El sheriff sin embargo negó.

-¿Cómo supiste que estaba aquí? -Parrish frunció el ceño, preguntándole a Stiles la misma pregunta que rondó su mente durante todo el viaje.

Mientras el chico aún continuaba observando el auto de Lydia, estacionado a unos pasos, apretó sus labios.

-Una suposición -Miró nuevamente el coche, preguntándose qué tan rápido podía salir del auto antes de que su padre lo tecleara, cuando el sonido de otro vehículo a la distancia le hizo suspirar de alivio.

-Es Scott -El Sheriff se bajó del coche, con los otros dos siguiendo su ejemplo, cuando el auto se detuvo a unos pasos de ellos, Kira fue la primera en salir, seguida de Scott y Malia.

-¿Dónde está Chris? -Parrish preguntó mientras sacaba su arma del cinturón.

-Él y mi madre están encargándose de otro problema -Scott respondió vagamente-, Stiles... no deberías estar aquí.

El chico se cruzó de brazos.

-No podría estar en otro lugar y lo sabes.

Nadie respondió, todos sabían que era cierto.

-Entonces ¿cuál es el plan? -Malia fue la que habló-, no tenemos un arma para derrotar a la Bestia, Peter desapareció, nuevamente y ninguno de nosotros tiene una habilidad nivel Dios para poder vencerla.

Scott asintió.

-Eso es cierto, pero tenemos un plan. Bueno, algo así...

Todos fruncieron el ceño.

-¿A qué te refieres?

-Hace un tiempo atrás, Deaton me dijo que Beacon Hills se había convertido en una especie de faro para lo sobrenatural, todo este tiempo creímos que era debido a las cosas que hicimos, pero... creo que en realidad lo sobrenatural podía sentir que algo iba a suceder -los miró-, Wendigos, hombres lobos, coyotes, kitsunes, todos se han aglomerado en Beacon Hills, y creo que es debido a la Bestia. ¿Recuerdan la profecía de Noshiko?

Kira asintió.

-Siempre creímos que se refería al Nogitsune, creo que en realidad hablaba de la Bestia.

-Renacerá la bestia que nunca debió nacer... -Kira volvió a asentir-, también hablaba de unos elegidos, tres, "Uno escapara, uno será encontrado y uno morirá", mi madre nunca supo explicar esa parte.

Scott negó.

-Creo que sé cómo vencer a la Bestia, y creo que Lydia también lo sabe -Por primera vez parecía esperanzado-, creo que ella se dio cuenta la noche en la que el Nogitsune mató a Isaac, ella dijo que la entendió.

-¿Cómo matamos a la Bestia? -Malia cortó

-Recordándole quién es.

***

Lydia salió a la parte trasera de la casa, luchando por dar un paso después del otro a pesar del miedo paralizante que le corroía las venas. Sabía que así era la forma en la que esto debía acabar, había perdido cada una de las oportunidades que hubieran servido de ventaja, solo quedaba una opción.

Teme | Teen Wolf #6|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora