Angel De La Guarda [ Reituki ]

- 4 Musicalmente Conectados -

Akira no esta en la cama, ¿Que hora es? Tomo mi celular y lo desbloqueo, SON LAS 13:32 muy tarde, agarro mis muletas y salgo del cuarto, ahí estaba él, como siempre ocupado con algún que hacer de la casa. Esta vez estaba barriendo, parece como si no pudiera ver un poquito de mugre en su casa.

- Buenos días

- Buenos días? Buenas tardes mejor dicho

- Si, como sea

- Fuí a comprar hace un rato - Este chico no para de sorprenderme - Mira lo que te traje - Levanta la mano, era un cepillo de dientes ¿TAN MAL HUELO? Me sonrojo y parece que lo nota - Tranquilo, es porque no te lavas los dientes hace dos días si contamos este

- Esta bién, gracias

- Ve al baño y quitate la ropa, te vas a bañar - Dice mientras barre. Pero quien se cree que es? Mi madre?

- No puedo bañarme, recuerda la bota

- No seas mugroso! Yo te ayudo -¿QUE? eso solo... QUEEE?! - Ven - Me guía hacia el baño, capaz me estaba bromeando - Mira, te dejé una silla debajo de la ducha así no te quedas parado ni te sientas en el suelo. Con esta se abre la fría y con esta la caliente - Me indicaba - Y ahí tienes el shampoo y la crema, bueno, avisame cuando termines, no tardes mucho sino te quedas sin agua - Cierra la puerta del baño. SIN PALABRAS, soy un sucio. Pero vamos! Eso es fácil de malinterpretar.

Tengo que admitirlo, esto está bastante difícil, apenas mueves la perilla del agua y ya te sale un chorro totalmente frío o caliente, después de muchos intentos logré regularlo a mi gusto, tibio pero tirando a caliente, relaja todo mi cuerpo. Ponerme el shampoo y la crema fue lo más facil, pero enjabonarme el cuerpo fué todo un desafío. Cada vez que deslizaba mi enjabonada mano en alguna herida abierta, ardía como si me hubiese hechado alchohol, o me dolían los moretones, y ni hablar de la pierna, tuve que agacharme que era muy incómodo y dolía.

Al terminarme, abrí la cortina de la ducha y ví en el piso un boxer y otras prendas, seguramente me las había dejado Akira para que me las ponga. Está atento de todo. Esta vez me dió una musculosa blanca, "No tengo un torso como para usar esto" pensé, y unos jeans azules rasgados, tiene un poco más de onda PERO NO PENSABA PONERME ESE BOXER! Es totalmente antihigiénico. Decidí ponerme los jeans sin nada, pude hacerlo yo solo ya que el pantalón no era tan ajustado y no sentía tanto dolor como ayer. Me lavé los dientes y me fuí a la cocina/comedor

- Que tal el baño? Tuviste algún problema? - Se acerca mi mucama

- No, tranquilo... Que estas haciendo?

- Una ensalada... Quieres ayudarme?

Realmente no quería, no tenía ganas, pero iba a quedar como un hijo de puta - Claro - Me sonrío y puso una tabla con lechuga junto con un cuchillo en la mesa

- Sientate y comienza a cortar, ya está lavada. Mientras tanto yo corto los tomates.

QUE HAGO?

/ POV AKIRA \

Si que es inútil. Cuando voleteo a verlo, estaba cortando hoja por hoja. Creo que aprendí a los 9 años, este tipo se pasa de 20 y ni sabe cortar una lechuguita.

- Esto se hace así tonto! - No lo aguantaba, tenía que indicarle como  hacerlo - tienes que tomar cuatro o cinco hojas, y encimarlas - Hice todo lo que salió por mi boca - Y luego lo cortas así - Tomo sus manos, que eran suaves como la piel de un bebé, yo estaba detrás de él, con una le indicaba como cortar y con la otra agarrábamos la lechuga. No podía sentirse mejor, sus manos se dejaban llevar por las mías, yo procedía suavemente y con calma. Trato de observarlo, me giro apenas unos centímetros, ahí estaban, esos ojos que me hacían palpitar con más fuerza. Sin darme cuenta había dejado de mover mis manos a lo que Takanori se da vuelta para mirarme. Estabamos nariz con nariz, me quedé así un par de segundos, que pudé disfrutar gracias a la hermosa vista que me brindaban sus ojos.