Capítulo 49: Semíramis parte 2

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[Si todos los reyes tuvieran reinas en sus tronos]

Estaba nevando afuera cuando Shirou finalmente pudo levantarse de la cama. Su Servant lo había envenenado. Assassin puede haber considerado una misericordia hacer eso. Él personalmente preferiría atar a alguien o algo sensato como eso. Yendo a su teléfono, sus manos marcaron rápidamente el número de la casa de Rin. Sonó y nadie cogió el teléfono. Ni siquiera pudo dejar un mensaje de voz en su teléfono, ya que su buzón estaba lleno. "Ella podría estar ignorándome".

Assassin había dicho que la guerra concluiría esta noche. Ella y Caster probablemente iban a cazar a Rin y terminar la guerra, entonces. No quedaban otros Servants. Archer solo contra Assassin y Caster era demasiado. Shirou tuvo que abrir su directorio telefónico, buscando en él el registro antiguo. "Vamos, vamos..." Llegó a la página de servicios religiosos y encontró el número de teléfono de la Iglesia. Pero cuando lo marcó, el número ya no estaba en servicio. "Ese sacerdote, su nombre era Kotomine... Kotomine Kirei". La búsqueda de cualquiera de los nombres de los sacerdotes tampoco arrojó nada.

Llamó a Issei. Respetuosamente había levantado el teléfono al segundo timbre. "¡Moshi moshi! Templo Ryuudo, ¿cómo podemos ayudarte?".

"Issei, este es Shirou".

"¡Shirou!" Issei sonaba bastante feliz de saber de él. "Faltaste a la escuela ayer. Tengo tu tarea para ti".

"Gracias." Shirou admitió honestamente. "En realidad estaba llamando para ver si podía pedirte un favor".

"Cualquier cosa." Issei respondió. Era un buen amigo, y no era de los que decían que no.

"¿Conoces esa iglesia cristiana en la colina al norte de la ciudad? He estado tratando de comunicarme con alguien allí y pensé que tu papá podría saber cómo contactarlos. Intenté buscando en la guía telefónica pero el número estaba desconectado. "

"¡Oh! Puedo ayudarte más que eso, Shirou. El sacerdote de esa iglesia está con mi padre en este momento. Puedo conseguirlo para ti, si quieres hablar con él".

"Gracias, Issei. Me salvaste la vida".

"Dame unos minutos y vuelvo". Issei prometió. No tuvo que esperar mucho.

"Emiya Shirou..." La voz del sacerdote cruzó la línea. "Me sorprende que me hayas buscado. Teniendo en cuenta que ya no eres un participante".

"Todavía soy un master". Shirou no cuestionó cómo sabía que había perdido a Assassin. "Y te llamo para pedirte ayuda".

"Tu Servant tomó mi iglesia. No puedo brindarte ningún tipo de protección de los otros participantes en la Guerra del Grial". La voz no tenía amabilidad. "¿Por qué tendría alguna razón para ayudarte, Emiya?".

"Porque conozco su línea de tiempo".
Hubo una pausa. "Contemplaré cualquier petición temeraria que puedas tener".

"Assassin dijo que todo termina esta noche. Planean terminar la guerra. Rin va a caer en una trampa. Ella es la única Master que queda".

"Realmente eres un alma descarriada al pensar-".

"¡Espere!" Shirou interrumpió. "Quería tu ayuda para detenerlos. Te ayudaré a recuperar tu iglesia".

"¿No estás pidiendo santuario?".

"No", le aseguró Shirou. "Esto es para mí. Cometí un error y no puedo vivir con eso".

"Esto puede sonar hipócrita viniendo de un sacerdote, pero tal vez debería dejar de lado el error y seguir con su vida. Cualesquiera que sean sus intenciones, claramente carece de previsión. ¿Qué le hace pensar que su apoyo lo llevará a arreglar tu error? Basado en tu historial, ¿cómo te ves a ti mismo lograndolo?"

Fate: La saga de invocaciones de Shirou EmiyaWhere stories live. Discover now