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Sylvien sonrió ligeramente. Levantó su copa de vino y bebió.

Al escuchar las diversas historias, se rumoreaba que Kanna era muy hermosa.

Había estado escondida en las sombras toda su vida.
Ya había visto la cara de Kanna. ¿Cuándo fue eso?

Un día se coló en el dormitorio de su marido.

Entonces dudó y se levantó el flequillo. Tal vez su rostro reflejaba confianza. Y esa confianza estaba justificada.

Porque Kanna es una chica que llama la atención, lo que nadie puede reprocharle.

── ¿Qué estás haciendo?

── Duque. Bueno, somos marido y mujer. Así que...

── Vuelve. Antes de que llame a los sirvientes.

Ese día fue el primero y el último.

Pero Kanna seguía sin mostrar su rostro.

¿Hay algo más insignificante y despreciable que los ojos negros?

Entre otras cosas, ¿Estaba ahora fuera de la vista en el jardín con otro hombre?

Sylvien ni siquiera pudo reírse porque sintió que un profundo resentimiento le subía a la garganta.

Llorar y resentirse por amor, aferrarse a sus pies... ese tipo de cosas ya no funcionaban, y huir de casa era inútil.

«Parece que está usando su propio truco.»






⚘⚘⚘







Mientras tanto, Kanna estaba aprendiendo algo nuevo e inusual.

── Si me caso en el futuro, probablemente seré un hombre de familia.

¿Un hombre de familia? Es gracioso, pero sólo eres bueno destruyendo familias.

── Otros hombres nobles suelen tener varias esposas, pero yo no. Una esposa es suficiente.

Escuchó la ridícula charla, pero mientras caminaba, observó un espectáculo fascinante.

«¿Qué significa una familia de verdad para un tonto que es un desalmado y cruel?»

Sí, ¡sigue hablando!

¡Palabra por palabra cava tu propia tumba!

── Sus palabras son encomiables. Cualquiera que se convierta en la esposa de Sir Orsini encontrará la felicidad.

Bueno, si te casas sólo mirando el dinero, el poder y la apariencia, puedes probar suerte...

Un momento de sarcasmo.

«Huh.»

Kanna fue testigo de algo muy divertido.

Orsini.

Orsini se daba palmadas en ambas mejillas...

«Oh, esto es imposible.»

Verlo puede provocar náuseas.

Kanna bajó la cabeza y luego la levantó, sintiendo un estruendo en su interior.

Afortunadamente, en ese momento Orsini logró cambiar su expresión en cierta medida.

── Sí, seguramente la haré feliz.

── Lo sé.

Ella deseaba tanto que su hermano hablara en un tono elevado y casual, pero su voz sonaba tranquila, como la de los verdaderos románticos. Muy desagradable.

La Usurpadora |Book 1|Nơi câu chuyện tồn tại. Hãy khám phá bây giờ