La Usurpadora |Book 1|

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Pero sólo se vieron presionados por el espinoso silencio.

── Así que.

Orsini se tensó el pecho con fuerza. Respiró como un dragón furioso que emite llamas.

── ¿Así que te vas a vengar? ¿Sí, desgraciado?

Cada nota de su voz reflejaba un sentimiento de desprecio, vergüenza e ira.

── ¡Sí! Eso fue desagradable. No sabía lo pésimo que resultaste ser. Pero, ¿cuál crees que es el problema?

── …….

── Aunque, ¡Sabía que eras capaz de insultarme y humillarme!

Parecía que sus ojos saltones iban a estallar si los tocaba.

── Ah.

── ¿Qué?

── ¿Creo que ha ido bien?

En ese momento, Orsini se tensó de nuevo y me apretó aún más el cuello.

── Parece que estás desesperada por morir. ¿Habría alguna diferencia si murieras?

── Es gracioso.

── ¡No! Incluso si te mato aquí, ahora mismo, a nadie le importa de todos modos. Eres tú. ¡Eres tú, Kanna!

Le falta el aire. ¿Realmente iba a estrangularla?

En cuanto lo pensó, Orsini la golpeó. Retrocedió rápidamente, pero no sintió mucho dolor al caer sobre el suave césped.

Levantando apresuradamente la cabeza.... Orsini ya se había ido. Una devastada Kanna miró a su alrededor.

¿Qué? ¿Es esa una forma de escapar? ¿Cómo se puede hacer algo así?

¿Tan rápido? ¿Así que en vano? Se quedó mirando el vacío frente a ella y sintió que el poder abandonaba mi cuerpo. Se acostó de espaldas.

«¿Ha terminado?»

No puede ser. ¿Orsini Addis sólo fingió que quería estrangularme?

── ¿Está borracho? Si estuviera en su sano juicio, no habría tenido la suerte de escapar.

No, he oído que si bebe, se pone peor.

Se sintió muy decepcionada porque esperaba con ansias su siguiente arrebato.

Estaba esperando que Orsini la golpeara de nuevo o incluso más. Dejó clara evidencia de su actitud en ella.

Como antes, los labios agrietados o las mejillas hinchadas.

Si es así, ¿no podría utilizar el ataque como excusa para pedir permiso a su padre para salir de casa?

«Pero sería imposible convencer a Alexander si Orsini me atrapa y le cuenta a mi padre sobre mi provocación.»