♧ 11.1

512 49 13
                                    


Cuando Jungkook y Jimin se fueron al baño, la música empezó a resonar con mayor intensidad para Hoseok y Taehyung, quienes, debido al continuo consumo de alcohol en medio del baile, habían estado pegados todo el rato. El omega se había sentido incómodo al principio, pues habían pasado años desde la última vez que bailaron en un club nocturno; pero, conforme pasó la noche y se acostumbró nuevamente al ritmo de Hoseok, toda incomodidad fue desvaneciéndose.

El DJ había colocado una variedad de canciones en los minutos que estuvieron en medio de la pista, lo que había causado que cambiaran de estilos de baile a cada momento, pero sus manos se habían mantenido unidas todo el rato. Ebrios como estaban, lo más seguro era que no recordaran absolutamente nada de esa noche al día siguiente y eso estaba bien para ambos, porque estaban seguros de que, estando sobrios, no iban a poder disfrutar como lo hacían en ese instante.

Taehyung seguía sosteniendo la mano del alfa hasta que empezó a sonar una canción con un ritmo más bailable. Hoseok lo tomó de la cintura una vez más y se movieron fluidamente en la pista. Todo fue bueno por ese momento hasta que a Taehyung se le ocurrió cantarle parte de la canción.

―¡Y YO TE VEOOO A TRAVÉS DE LA VENTANA CUANDO TE VAS! Y LLORANDO ME DAN GANAS DE DECIRTE QUEDATEEEE.

Hoseok no sabía cómo reaccionar. Entre la embriaguez y los sentimientos encontrados tras esos momentos de baile, recordó su matrimonio y los días felices que tuvieron años atrás. Le fue imposible no desear volver a eso, pero no se atrevió a decir mucho, por lo que prefirió seguirle la corriente y cantarle el coro.

―¿POR QUÉ ESTAMOS DURMIENDO SOLOS SI NOS SEGUIMOS QUERIENDO??? SI NOS SEGUIMOS AMANDO, NO DEJAMOS DE LADO EL ORGULLO Y VOLVEMOS???

Taehyung recibió el mensaje, ciertamente, pero no se hallaba ni cerca de la sobriedad para tomarlo con calma. Con una personalidad más fuerte y un resentimiento oculto, el omega lo empujó fuertemente y le gritó por lo ocurrido.

―¡Seguiríamos juntos si no lo hubieses cagado tanto! ¡Idiota!

Hoseok no tardó en responderle.

―¿Solo yo tengo la culpa? ¿Quién se ponía a pelear por la mínima cosa que ocurría entre nosotros?

―Siempre tuve razones para empezar nuestras peleas ―aseguró Taehyung.

―¿Razones? Solo llegué tarde una vez al evento de Yeonjun y lo convertiste en un asunto enorme. Si no le hacía caso a tus llamadas, te enojabas durante días conmigo, cuando sabías perfectamente que tenía trabajo importante para hacer.

―Ese siempre fue el problema: ¡Tu maldito trabajo! Siempre era tu trabajo antes que yo, incluso antes que Yeonjun.

―¿Qué querías que hiciera? ¿Eh? Trabajo para darles lo mejor a los dos, ¿qué deseabas que hiciera en ese entonces, cuando estaba empezando a tener una buena fortuna para nosotros?

―¡Te quería a ti, imbécil! ¡No quería ese dinero! ¡Te quería a ti!

Hoseok se acercó al omega cuando lo vio a punto de llorar y lo abrazó por la cintura, pese a las negativas del omega. El alcohol seguía en el sistema de ambos, por eso la sinceridad había fluido libremente, y, aunque no lo recordaran al día siguiente, sus lobos se iban a quedar con ese corto momento para ellos mismos.

―Me tienes aquí para ti ―susurró Hoseok.

―Ya es tarde.

―No, no lo es, Taehyung.

Entre la tensión, la melodía de la nueva canción colocada, la embriaguez y los deseos de su lobo, Hoseok se atrevió a dar el primer paso y lo terminó besando. Taehyung se resistió al principio, pero terminó flaqueando ante el aroma del mayor, el mismo que había extrañado todo ese tiempo.

Misión: Reconciliación ; hopev au.Onde as histórias ganham vida. Descobre agora