Viaje a Gringotts

27.9K 2.1K 890
                                    

Después de haber recibido la carta de su madre habían pasado cuatro días, tiempo suficiente para que se pudiera recuperar un poco de sus lesiones causadas por Vernon, sabía que ir solo a Gringotts era peligroso pero realmente no había nadie a quien le pudiera pedir que lo acompañe, pedírselo a Sirius podría ponerlo en peligro con el ministerio, y Remus aún no estaba seguro de si aceptaría, el profesor Dumbledore estaría ocupado después de todo era director de Hogwarts, y bajo ningún motivo podía pedírselo a los Dursley antes de que siquiera diga una palabra ya lo estarían callando por lo que esa, mañana aprovecharía que sus familiares tendrían una salida por parte del trabajo de Vernon esa era la razón por la cual no se encontrarían en por lo menos cinco días, tía Petunia le había dicho ya que dejaría la puerta de su habitación abierta para que pudiera salir al baño y nada más ya que si hacía alguna otra cosa se enfrentaría con las consecuencias y Vernon. No le quedo más que esperar pacientemente hasta la mañana siguiente.

Ya estando seguro que sus tíos y primo se encontraban fuera, tomó su capa de invisibilidad se la puso, asegurándose de dejarla muy bien acomodada minutos más tarde salió de casa con paso rápido pero seguro en dirección a la parada de autobús más cercana, una hora después estando ya frente al banco mágico se quedó parado un momento pensando en si realmente era buena idea pero pronto comprendió que ya era demasiado tarde para considerarlo por lo que se armó de valor del cuál su casa en Hogwarts era extensamente reconocida y entró caminando rápidamente hasta estar enfrente de uno de los duendes

- Emm Disculpe me podría por favor llevarme con el encargado de las cuentas Melek - hablo con nerviosismo, el duende alzó la cabeza y al no ver a nadie enarco una ceja

- ¿Podría mostrarse para saber quién es, señor? - pregunto un tanto irritado el duende

- Si lo que pasa es que no quiero que nadie se entere que vine a aquí por esto - entrego con nerviosismo la carta que le había enviado su madre al irritado duende, quien al terminar de leer permaneció en silencio durante un momento

- Sígame - fue lo único que pronuncio al cabo de unos segundos mientras comenzaba a caminar hacia una sección que estaba seguro no muchos magos entraban, después de haber caminado alrededor de quince minutos finalmente se detuvieron frente a una puerta por la que entró el duende haciéndole una seña para que esperara afuera después de escuchar lo que fueron murmullos durante algunos minutos el duende salió - puede entrar Lu-khran le atenderá - y después de eso aquel duende se marchó dejando solo a Harry quien dando un suspiro de alivio entró en la oficina y se quitó la capa estaba seguro el duendo le dio una sonrisa divertida por eso y lo cual solo lo avergonzó un poco

- Mm Yo quería ha... - Harry no pudo terminar de hablar porque el duende le detuvo con una seña y luego se levantó de su asiento

- Sé porqué está aquí señor Potter y déjeme decirle que su situación es un poco delicada, y sí su madre la señora Potter dejó indicaciones por si algo llegaba a sucederle claro que todo esto lo hizo sin el conocimiento de Lord Potter, le pido que por favor espere un momento mientras voy por algunas cosas - y con eso salió de la oficina para regresar un momento más tarde cargando tres cajas de madera con el - Bien señor Potter primero debemos de hacerle una prueba para verificar su identidad y herencia posteriormente procederemos con lo dicho por la señora Potter - dijo mientras abría una de las cajas y de ella sacaba un pergamino y una pequeña daga de plata - tiene que hacerse un pequeño corte en su dedo y dejar caer tres gotas de sangre en el pergamino - aún inseguro Harry asintió y tomando con mucho cuidado la daga hizo lo que el duende había indicado, solo para ver cómo al caer las gotas de sangre comenzaban a aparecer letras en el pergamino

Nombre: Harry James Potter

Nacionalidad: Inglesa y turca

Sangrepura

HerenciaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora