Suicidarse no es una opción. (KatsuDeku).

Capítulo 7: Confesión, Confusión, y Decepción.

||Esteee capítulo es más asemejado al anime, pero le he cambiado varias cosas para que sea más estilo KatsuDeku, bastantes cosas además, espero que OS guste, no creo que me haya salido muy bien la verdad, aún así aquí lo tenéis:3.

Después de todo lo anterior, conseguí recuperar mi libreta de héroes, aunque esta estaba estaba destrozada y encima, empapada, resulta que cuando Kacchan lanzó el cuaderno por el balcón de clase, este cayó sobre un pequeño manantial donde hay peces, el instituto nos encargamos de cuidarlo, menos mal que no deje que se comieran mi libreta.
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Estaba andando ya de camino a casa, mirando mi cuaderno, aunque este estaba hecho pena, lo que me importaba era su contenido, así que una vez aprendida la lección de no traer mis cosas especiales al instituto, lo guardé en mi respectiva maleta la cual era color amarilla, bastante grande a decir verdad, con diferentes huecos y bolsillos, así que para acordarme lo metí directamente en el bolsillo mayor, junto a los materiales de clase. Luego hecha esa acción, colgué de nuevo la maleta sobre mi pequeño y pocos desarrollados hombros, cayendo por mi pequeña espalda el cual llegaba a tapar por encima de mi trasero.

Sumergido en mis pensamientos, divisé el mismo recorrido de siempre, sabía muy bien que Kacchan era mi vecino, su casa estaba a escasos centímetros de la mía, y no me apetecía nada encontrarmelo de nuevo, así que opté por un atajo el cual casi nunca iba, pero aunque llegue un poco más tarde y le de la vuelta a la manzana, no quería ver a mi "mejor amigo".

Amigos.

Llegando a un punto, pensando sobre todo lo que he tenido que aguantar a lo largo de mi vida, esas humillaciones constantes martillaban mi cabeza como punzadas consecutivas.

De repente, como un flash de cámara, vino a los ojos de mi cerebro la imagen, más bien el maldito recuerdo de aquél sueño.

Soñé que me besaba con él, soñé que no interactuábamos cómo enemigos, tampoco como amigos, si no como una pareja real.

Amor.

Negué varias veces con mi cabeza, frunciendo mi ceño y mordiéndome con frustración mi labio inferior, provocando que este en la mordida quede blanco, luego de soltarlo, sentir la sangre recorrer por el interior de este dejado ahora un color más rosado en mis labios.

Sí, reconozco que esa admiración era a más.

No era simple amistad lo que yo sentía y siento, ahora mi corazón bombeaba tan fuerte que parecía que explotaría en mi interior y vomitaría malditas mariposas que aletean en mi estómago.

Hablando metafóricamente.

Con mis pensamientos ahogados, sin darme cuenta, el sol que oscurecía mi paisaje de llegada a mi casa fue presente, levanté mi vista para darme cuenta que estaba pasando por un túnel bastante oxidado, no tenía más de 20 pasos, pues muy grande no era, pero sí que era ancho y bueno, por la noche sería incómodo pasar.

Comencé a mirar a los lados, empecé a escuchar un chirrido ruido, como si estuviesen arrastrando algo, justo dentro de las alcantarillas, deduci que posiblemente serían ratas.

Aunque si fuesen ratas, serían 7 veces mayor.

Acelerando mi paso, ya harto de ese sitio, esos 20 pasos haciéndose largo, sentí que algo viscoso, frío, gélido y resbaladizo rozaba mi nuca, colándose poco a poco por mis rizos verdosos, cómo si estuviese acariciándome, alertado me giré, el miedo se había apoderado de mi cuerpo y esa sustancia que me estaba haciendo estremecer, fue una imagen espantosa lo que me llevé.

Aquel ser, era un villano, este era grande, expandido, su color verde era exactamente igual que el color del agua de las cloacas, me llegaba una pestilencia colándose por mis fosas nasales, olía horrible.