Capitulo 5: Sterk sál Syn (Fuerte alma de Syn)

3 1 0
                                    

La forma de que no le hagan más daño era decir eso, pero por otra parte era una forma de marcar una diferencia entre la maldad y un poco de bondad. Seelene no quería arriesgar más de su bondad y que luego aquella misma bondad la apuñale por la espalda; apostaba por todo y Balian lo notaba a cada milímetro de las palabras de Seelene.

« ¿Hasta dónde llagarías? Si en la sangre nos inculcaron esto, esto nos hicieron ¿pretendes cambiarlo?».

— Conllevarás una gran responsabilidad.

— Estoy dispuesta a cargar con ella —hizo pausa—, seré yo quien lo proteja y lo entrene. No le daré un calabozo como habitación y tampoco una aparte.

— ¿Ah? — dijo Balian confundido— ¿Entonces donde lo pondrás?

— En mis aposentos. Soy la única con mayor fuerza que él, la única que lo puede vencer en caso de que se revele y la única que lo puede neutralizar.

— Esto es inaceptable, comandante.

— No se puede poner en riesgo su vida. No se sabe con exactitud si esa es su verdadera naturaleza.

— No doy aprobación, es arriesgado —dijo Kjell.

— Tú nunca das nada —se oyó a Dyanne mientras entraba con una caja plateada—, solo problemas — El cuerpo de Seelene se tensó al ver la caja, miró a Balian mientras le repetía varias veces que no lo hiciera, que no iba a resultar, que solo empeoraría la situación.

— Si él no es igual a todos, si le depositas tanta fe, si reconoce tus palabras y acciones él lo va a soportar y te demostrará la misma devoción. Si pretendes tenerlo como tu espada de defensa y testigo de tu propósito, es necesario hacerlo.

— Comandante, Reina Seelene —habló Dyanne— tal vez las intenciones de usted son las mejores, sin embargo no podemos darle aprobación así como así. Como consejo de sabios nosotros velamos personalmente su vida y si nuestras decisiones no son las correctas nos pesará las consecuencias.

— Bastante años pasaron desde que una flama pisó este mismo territorio, en estos tiempos duros de guerra es casi imposible volver a tener confianza con el enemigo desde que existe la enemistad —siguió Balian.

— Majestad, comprendemos cuál es el objetivo de esto y no podemos dejar de lado esta medida, tanto para el favor de usted como el de todo el clan — concluyó Dyanne.

Seelene no tuvo más remedio que agachar la cabeza, no por derrota, sino porque tenían razón. Estaba orgullosa de ellos y con un poco de pena por el muchacho. Por otro lado Klöud estaba irritado por no comprender la situación actual y también porqué le dolía la cabeza desde hace rato, le preguntó a Lynn que significaba todo lo que decían y ella dijo solamente que mantenga la cabeza fría y tranquila. « ¿En serio

Balian y Dyanne ordenaron a un debate y ejecución del tema en privado, eso significaría que iban a tardar más de algunas horas, así que Seelene aprovechó para hablar con Klöud para explicarle lo que sucedería. Al ponerse en cuclillas frente a él y lo vio igual de empalidecido como la sala, la miró a Lynn con inquietud.

— ¿Por qué no lo revisaste? No creo que sea el mismo efecto de la sala —habló un poco bajo.

— Lo siento, mi señora, pero no quería interrumpir en la discusión.

— ¿Te sientes bien? Dime que te sucede, te ves horrible —él negó.

— Quiero que me digas que es esa caja que está tras tuyo y porque... —se detuvo por una puntada en su cabeza mientras jadeaba aceleradamente.

La esencia de la guerra©Where stories live. Discover now