Lovely Sweet Hell (pausada)

Capítulo 12: ¿Y ahora qué?

-Deberíamos trazar un plan, establecer nuestras prioridades... -empezó a decir Mar.

-¡Los Saltadores! -gritó Calisto rápidamente, cortándola.

-Mi padre.... -susurró Yami, casi al mismo tiempo que la otra.

-Lo sé, lo sé, pero no me refería a esto. Queremos rescatarlos, muy bien, ¿Cómo? -las chicas se quedaron en silencio y el hada revoloteó nerviosa sobre sus cabezas- A eso es a lo que me refería, no podemos quedarnos más aquí, pero, ?A donde vamos? Esa es nuestra prioridad.

-Eso es fácil, tenemos que ir a por ese estúpido Lobo...

-No, es un Noble, y denunció a Yami a las Princesas, eso indica que está muy seguro de si mismo, así que no creo que tenga ninguna prueba en su castillo o algún sitio muy evidente- las demás asintieron- así que... si, probablemente tengan algún sitio escondido, a nombre de alguien más, como un lacayo suyo... no demasiado pobre, porque despertaría dudas que alguien así tuviera propiedades, pero alguien muy cercano a él también podría ser sospechoso...

-Pero... ¿Confiaría algo así a cualquiera? Quiero decir, alguien cercano a él sería lo más adecuado -opinó Calisto- sentándose en el suelo, a los pies de Yami, que seguía sentada en la cama-.

-Eso es cierto... Pero no creo que ninguno quieran mancharse las manos, probablemente estén controlándolo de cerca; pero los implicados, los que trabajan allí, deben de ser currantes... probablemente amenazados.

-Si, eso tiene sentido... -Yami acariciaba distraídamente el pelo de Calis, con cuidado de no rozar sus orejas, aún un poco magulladas. Alzó los ojos y miró interrogante a Mar- ¿Crees que tendrán allí a mi padre también?

-No lo creo, por que al encontrar a tu padre descubrirían también el pastel.

Todas asintieron, tenía sentido.

-¿Creéis que podrían haber pedido ayuda a otras especies? -Inquirió Calisto- Porque...

-¡Podría ser!-Saltó Coco, cortándola- Para difuminar aún más su rastro, ¿No?

-Es posible... Eso nos facilita a nosotras las cosas, un Príncipe Lobo que se relacione con otras especies... es algo que llamaría la atención. Podemos empezar a buscar por ahí -sugirió Mar- Desde luego lo más lógico es buscar en una gran ciudad donde convivan muchas especies y donde no quedaría nada extraño intercambios entre ellas... Pero necesitamos encontrar una coartada, probablemente estaremos en busca y captura y Coco llamaría demasiado la atención... ¿Cómo lo veis?

-¡Guau! Mar eres una pasada, ¿Cómo lo haces? -exclamó Calisto sorprendida.

-Yo... esto... bueno... es por... la tele.

-¿La tele?

-Si, esto.... ¿Sabéis lo que es? -Todas asintieron- Pues, a bueno... entonces... A mi, me gustan las series de policías y esas cosas y... ya sabéis.

Las demás murmuraron en asentimiento, pero después todas se quedaron en silencio, sin saber que decir. La hada voló impaciente alrededor de sus cabezas.

-Entonces.... ¿Que hacemos? -preguntó con su voz aguda- Hay que buscar la forma de investigar sin levantar sospechas.

-¿Y no podemos ir a mi pueblo? -inquirió Calisto- Entiendo que no podamos acudir a las Princesas Oscuras y que Yami no quiera saber nada de los seres de la Luz, pero nosotros somos Neutrales, podríamos ir al Prado.

-Es una opción -accedió Mar-Vayamos allí entonces.