𝙃𝙤𝙪𝙨𝙚 𝙊𝙛 𝘽𝙡𝙖𝙘𝙠 || 𝐒𝐚𝐠𝐚 𝐇𝐚𝐫𝐫𝐲 𝐏𝐨𝐭𝐭𝐞𝐫
Tiempos Oscuros se acercan, pero ella será la luz al final del túnel, ella será la luz de la esperanza en los tiempos difíciles, ella será la esperanza que salvará a todos.
Madelyn Black...
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Quien diría que Madelyn recibiría la marca tenebrosa a los 16 años, en su sexto año en Hogwarts.
Y su vida no podía ser más tétrica, con los mortifagos invadiendo la mansión y sobre todo porque el mismísimo Lord Voldemort estaba en ella.
—Así que tú eres hija de... Sirius. —dijo Bellatrix saliendo del salón, haciendo una mueca al pronunciar el nombre de Sirius.
—Bellatrix. —murmuro Madelyn reteniendo su furia.
—Debes sentirte muy honrada —dijo Bellatrix soltando una risa—. Al recibir la marca tenebrosa.
—Claro que lo estoy. —mintió Madelyn con expresión fría.
La puerta del salón fue abierta nuevamente, Draco salió de ahí, acomodando de Narcissa quien tenía una expresión decaída. Madelyn pudo ver los ojos de Draco, parecía que se había aguantado las ganas de llorar. Se veía cansado, preocupado y su sonrisa se había ido.
—Parece que ya es tu turno, querida. —le dijo Bellatrix cruzándose de brazos.
Madelyn no le respondió nada, y entró sin miedo a ese salón. Al fin vería a Voldemort, ese Mago Tenebroso que no había hecho más que causar sufrimiento.
El salón estaba vacío, a excepción de una persona que estaba sentada en la cabecera de la larga mesa.
Ahí estaba él, más blanco que una calavera. Con la nariz tan aplastada como la de una serpiente, con pequeñas rajas en vez de orificios.
—Así que tú eres Madelyn Black. —dijo Voldemort con su serpenteante voz levantándose.
—Sí, mi... señor. —Madelyn se odiaba a sí misma por pronunciar esas palabras, era tan convincente que Voldemort le mostró algo parecido a una sonrisa.
—Me complace tu presencia, Madelyn. Me alegra saber que quieras unirte a mí siguiendo los pasos de tu familia —dijo—. Espero me seas tan fiel como Bellatrix.
—Le seré fiel, mi señor, incluso más que Bellatrix. —dijo Madelyn, Voldemort sonrió interesado.
La serpiente de Voldemort había comenzado a deslizarse muy cerca de Madelyn.
—Tengo una misión para ti, Madelyn —dijo Voldemort rodeándola.
—Y la cumpliré exitosamente, mi señor. —afirmó Madelyn mirándolo de reojo.
—Los Malfoy no han demostrado ser muy competentes últimamente, ¿no crees? —pregunto Voldemort agitando su varita, Madelyn no respondió—. Ya que eres tan unida a Draco les daré la misma misión.
—¿Y cuál es?
—Asesinar a Dumbledore. —dijo finalmente Voldemort con una sonrisa.
A Madelyn le hirvió la sangre al saber la misión que le había dado a Draco. Bueno no era de sorprenderse, después de lo que sucedió con Lucius era de esperarse que alguien pagara sus errores. El mero hecho de que fuera Draco era bastante doloroso.
