Capitulo 2 - Negación

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                                                          Negación

Londres- Reino Unido

Salí a la terraza de mi apartamento para ver las calles agobiadas de autos y personas ir y venir por ser la hora del almuerzo; estaba en el último piso, cosa que ayudaba a no escuchar el ruido, miré a un lado y tenía una gran vista de la ciudad cuando giré hacia el otro vi a un hombre con una enorme cámara fotográfica apuntándome desde la terraza del apartamento vecino en el mismo nivel, me sorprendió al comienzo y luego sonreí falsamente; odiaba que me siguieran a todos lados y violaran mi privacidad pero no podía gritarle lo que sentía porque los productores me lo impedían por el contrato y la imagen que debía cuidar; entré de nuevo a la sala donde estaba Louis, mi amigo y compañero de banda sentado en el sofá viendo TV.

Louis giró la vista  al ver que regresaba a la habitación y fruncía el entrecejo, me senté a mi lado.

― ¿Todo bien Harry? ―me preguntó Louis.

― Si ―dije aun con mi vista hacia el frente― Ya los paparazis saben donde vivo 

― ¿De verdad?  ―vaciló asombrado― Solo ha pasado una semana desde que lo compraste 

― Lo sé, a veces creo que poseen telepatía o súper poderes. 

-―  De ser así quiero tenerlos también ―Rió dándome una palmada para que me olvidara del asunto― Este es el precio por ser músicos y famosos; tenemos que acostumbrarnos. 

Sonreí un poco, Louis siempre trataba de hacer que todos nos lleváramos bien en el grupo y evitar que nos arrepintiéramos de ello; me recosté del mueble y traté de despejar mi mente, en eso sonó la puerta del apartamento.

― ¿Quién será? 

― Yo voy ―Louis dio un saltó por encima del sofá y caminó hacia la puerta, al abrir se encontró con Joseph, mi agente personal― Ey ¿Qué tal todo? Pasa ―señaló el interior y cerró la puerta tras él cuando pasó, 

― Hola Louis, gracias ―saludó Joseph entrando al lujoso apartamento― ¿Cómo está ese cantante? ―me preguntó mientras sonreía acercándose para ocupar un lugar en un asiento lateral al mío.

- Ey Joseph ―me erguí para estrecharle la mano y sentarme derecho― Todo bien, aprovechando estos días para descansar un poco.

― Me alegro ¿te gustó el apartamento? ―Joseph señaló el lugar con sus brazos abiertos.

― ¿Qué si me gustó? Pues claro, está genial y es espacioso. ―Joseph me había buscado los contactos para comprarlo, aunque con los ingresos que había tenido de las giras eso no era un problema.

― Maravilloso, maravilloso ―él miró un momento a los lados como buscando el valor para lo que estaba a punto de decirme.

― ¿Estás bien? Te noto algo raro, ¿sucedió algo? ―además de mi agente era mi amigo y sabia cuando algo malo pasaba y no lo decía.

― Sí, creo ―pronunció esta última palabra en tono más bajo) ― Recuerdas que el otro día ustedes comentaron que querían que sus seguidoras conocieran más acerca de ustedes, de sus gustos y que los periodistas no hicieran las mismas preguntas siempre

― Si lo recuerdo ―hice señas de ¿por qué?― ¿A que viene eso?

― Pues, porque hay una revista digital, muy famosa de New York que quiere tener una exclusiva tuya ―traté de sonar emocionado― La revista se llama Contexto 

― Oye eso es genial, si estuve revisando su página el otro día; tiene información muy variada y actual. ¿Cuándo será la entrevista? ¿Tengo que ir a New York? ―preguntaba emocionado.

― No, no será necesario, ellos enviaran a alguien acá. Será más un reportaje o documental que una entrevista. 

― ¿Quiere decir que durará más horas?

― Si, serán…unos cuatro meses aproximadamente.

― ¡Cuatro meses! ―respondí sorprendido― ¿Y por qué tanto? 

― Es que tienen curiosidad sobre la banda y en ti como cantante; será una ayuda para impulsarlos a todos internacionalmente

―  Bueno, pero… ¿y cómo será ese documental? Solo en los conciertos y pequeñas entrevistas. 

― Si y no, lo que dijiste antes mas tu vida personal…también ―Joseph trató de sonreír aunque solo pudo poner un rostro algo nervioso.

Solté una carcajada.

― Me dices que me van a seguir con una vídeo cámara hasta mi casa ―seguí riendo― Que buena broma Joseph, casi me la creí 

Seguí riéndome a recostándome de nuevo en el sofá, agarrándome la barriga de tanto reír, y no solo yo, sino también Louis que había escuchado. Cuando al fin pude dejar de reír me sequé una lágrima que me había salido y volví a mirar a Joseph; este estaba serio desde su asiento, comprendí que no era mentira.

― ¿No es broma cierto?

― No, la persona que enviaron llega mañana al medio día y comenzará con la entrevista, se quedará aquí incluso. Fue un contrato que firmaron los productores y ejecutivos con la revista. 

― No, no puedo creer esto Joseph ―me puse de pie y comencé a caminar de un lado para el otro serio― Me estás diciendo que alguien vendrá a vivir conmigo por cuatro meses para que “supuestamente” ―dibujé las comillas con mis dedos― aumente el valor de grupo ¿están de broma? ¿Qué clase de contrato es ese donde disponen de mi vida sin consultármelo? 

― Bueno, en realidad Harry ellos realizaron este contrato basándose en el primero que firmaste dónde estabas dispuesto a vender tu imagen al público y permitir que esta fuera pública, aunque duela esa es la verdad, y es legal también. 

― No, es que no puedo si quiera procesarlo Joseph, no puedo ―negué estresado y cada vez más molesto― No quiero ni pienso tener a un completo extraño en mi casa solo porque a los grandes señores le dio la brillante idea de violar mi privacidad ¡Tengo derechos! ―grité desesperado.

Louis había escuchado toda la conversación sin pronunciar una palabra hasta que decidió intervenir.

― Joseph, no hay manera de llegar a otro acuerdo, esto lo veo muy brusco e inesperado. ―dijo Louis en tono sosegado.

― Lo sé Louis, pero ya se tomó una decisión, no estaba en mis manos, yo solo quería comunicárselo antes de mañana para que la sorpresa no fuese mayor ―en eso sonó su celular, un mensaje de los productores que tenía que reunirse con ellos, se  puso de pie― Perdóname Harry, de verdad ―me sostuvo por los antebrazos, tratando de sonar lo más sincero posible― Pero no puedo hacer nada, ya es una decisión ―Joseph se  acercó a la puerta e hice una seña a Louis de que se iba― Recuerda que mañana debes ir al aeropuerto a buscar al representante de la revista a la 1:00 pm, no lo olvides; yo igual te paso un mensaje esta noche. Bye Louis .

- Bye ― Louis le hice la misma seña y lo vio  salir; luego dirigía la mirada a mí que estaba demasiado callado y serio en el mismo lugar de hace unos minutos mirando al vacío― Harry ―pronunció tratando de usar un tono suave, mientras iba a donde estaba― ¿Qué harás? 

― Nada ―giré a verlo― No pienso hacer nada, si quieren que me despidan del grupo y listo. Te sonará egoísta Louis pe ro no pienso exponer mi privacidad a alguien que no conozco. 

― Te entiendo, pero si no lo haces te pueden demandar, créeme no le ganaras si haces eso. Puedes llegar a un acuerdo con quien te viene a entrevistar para que se quede en otro lado. 

Tenía  razón, estaba cerrándome a las opciones que existían.

―  Puedo hacer eso, me gusta esa idea. Pero va a tener que llegar aquí solo, no pienso ir a buscar a nadie al aeropuerto, para nada ―me giré y fui a la cocina a buscar algo de tomar.

― Estas cayendo en lo mismo ― me siguió  atravesando la sala― ¿Que pensarán la gente de la revista?  

― Me importa un pepino lo que piensen, si vamos al caso los interesados son ellos ¿no? 

― Si, pero si quieres conseguir un acuerdo tienes que ceder en algún momento. 

― Es mi última palabra, que busque la dirección si quiere. No me interesa ―di un sorbo de mi gaseosa pretendiendo que no me importaba.

― Esta bien, iré yo entonces ―dije Louis y yo le miré sorprendido, luego me sonrió― Así es, si tu no vas yo iré y lo traeré aquí para que hablen. Es mi responsabilidad también ya que tú nos vas a representar a todos. ―sentenció.

En PiezasWhere stories live. Discover now