Capítulo 11: Plan En Marcha

420 38 14
                                    

Los minutos le parecían que andaban a un ritmo demasiado lento, juraba que vio a una tortuga andar más rápido que la aguja que se movía en ese viejo reloj colgado en la pared. Lemy y su padre dejaron las risas mientras seguían esperando su turno para tomar su bebida pedida y luego regresar a la casa, Lincoln solo descansaba tranquilamente en su silla, su hijo era el inquieto mirando con desesperación a cualquier otra dirección ahora que notaba como el tiempo le jugaba en su contra.

Era cierto que los niños abundaban en el local, pero se percató que todos esos eran menores que él, los pocos que de seguro eran de su edad y un poco mayores estaban dispersados y ocupados en sus propios asuntos, tales como mantenerse ocupados con sus consolas de videojuegos, estar dormidos, besándose como si fuesen alimañas hambrientas y estar persiguiendo a los más pequeños en el espacio especializado para ellos.

Se maldijo a sí mismo al olvidar traer su teléfono y sus audífonos para estar igual a algunos de esos otros muchachos y mantenerse en su mundo distraído con la amplia gama de canciones que bajó de internet. Sacó su frustración con un largo suspiro y luego redirigió su mirada hacia el hombre que se hallaba sentado a su lado.

-Lemy- A ver viejo, ¿no podrías aprovechar este momento de extremo aburrimiento y contarme algo? ─ Preguntó más por cansancio que por necesidad.

-Lincoln- No. ─ Su tono emanaba tranquilidad solamente.

Claro, a su hijo le sorprendió y le disgustó aquella respuesta.

-Lemy- ¿Y por qué no? ─ Estaba más resentido ahora. ─ Nadie te va a escuchar cantar. ─ Añadió.

Las otras personas de hecho se hallaban alejadas, por lo que sus palabras podían ser respaldadas. Lincoln sin embargo tenía buenos argumentos que poner en contra.

-Lincoln- Es privado, Lemy, no puedes esperar a que solo porque todos estén apartados, de repente no venga un chismoso e interrumpa la historia (observa a Lemy) ¿o quieres que por esa persona interrumpa mi narración? ─ Su tono era tranquilo, sabía que su hijo estaría de acuerdo en que nadie lo interrumpiera.

-Lemy- ... (Suspira) sí, claro, claro. ¿Cuánto falta para que Tabby regrese?

-Lincoln- Tranquilo muchacho, no somos sus únicos clientes, supongo que ya viste que ella sola debe encargarse de todo.

Le dolía, pero el viejo tenía razón, debía ser paciente, de cualquier manera el hombre que tiene al lado no se irá a ninguna parte. Tendría que recurrir a su imaginación y pasar el rato pensando, no tenía idea de en qué, pero lo haría.

En el caso de Lincoln, éste se cruzó de brazos y soltó un suspiro. Sus ideas daban vueltas sin cesar, para el resto del mundo solo eran segundos, para él era como la prueba de matemáticas más complicada, le mintió sobre la verdadera razón por la que sus esposas e hijas se fueron de la noche a la mañana, literalmente.

Debía ser cauteloso y contar todo a su tiempo, era sin duda lo más difícil que podía hacer, pudo simplemente decirle que todas se fueron de viaje como un especial día de madres e hijas que ellas mismas se inventaron, haciendo que ellos dos se quedasen al ser los únicos hombres, pero claro, haberse masturbado de forma somnolienta le hizo perder los cabales y contar la verdad. No todas las cosas que pasaban podía controlarlas, el alcohol es una de ellas.

No lo notaban ya que estaban muy sumergidos en sus propios asuntos, pero los demás comensales del lugar empezaban a murmurar, ya no era porque estaban los dos ahí, sino lo que iban a ocasionar una vez que la gota les cayera encima.

Era de esperarse que se sorprendieran y hasta soltaran un ligero grito cuando dos latas de sodas fueron colocadas en la mesa, Tabby ya se las había entregado.

-Lincoln- Oye, un poco más de calma, ¿quieres? ─ Dijo con algo enojado.

-Lemy- Pudiste hacer que me dieras un infarto. ─ Protestó el menor.

-Tabby- Jajaja, lo siento chicos, pero necesitaba regresarlos a tierra firme, un poco más y las moscas hubiesen hecho de sus bocas su nuevo hogar. ─ Soltó otra carcajada al ver como ninguno respondió.

Calló al notar como padre e hijo la miraban con sumo aburrimiento, pero en su mente solo sonreía con malicia ante lo que estaba a punto de hacer.

-Tabby- Okay, okay, lo lamento, les hice el favor de abrirlas por ustedes, dos buenas y frías sodas de sabores. ─ A Lincoln le entregó una de uva, mientras que a Lemy una de piña. ─ Jeje, muy bien, tengo prisa, espero verlos de nuevo por aquí. ─ De ahí se fue al otro lado de la cantina, posiblemente a buscar más cosas.

-Lemy- (Toma su soda) padre, ¿fui yo, o, la profesora Tabby actúo algo extraña? ─ Dio un sorbo y tan rápido como lo hizo, sus ojos se abrieron de par en par.

Sin embargo, eso pasó desapercibido por su padre, quien tomó de su propia soda.

-Lincoln- Concuerdo contigo (mira a Lemy y alza una ceja) oye campeón, ¿todo bien? ─ Al concluir con sus palabras, también abrió sus ojos de forma repentina.

-Lemy- (Da otro sorbo a su bebida) oye, viejo (dio un tercer sorbo y solo sonrió) ¿no sientes que estas cosas están algo agrias para ser sodas? ─ Un raro cambio de tema.

-Lincoln- (Da un sorbo largo a su soda) jeje, si muchacho (sonríe) pero ese agrio sabor es algo...

-Lincoln y Lemy- Adictivo...─ Se miraron y soltaron unas cuantas carcajadas.

Asomándose por una de las esquinas, Tabby observaba sonriente como el padre y el hijo degustaban de todo el contenido de las bebidas, haber sido testigo de lo que hizo Lincoln nueve meses antes de que Lina naciera le hizo entender claramente, que haya traído a Lemy fue un golpe de suerte doble, descubrió que el hijo también era de emborracharse fácil.

-Tabby- Jeje, hoy la música sonará por arriba de todos los estándares, esta fiesta será la mejor que haya visto este viejo soldado. ─ Caminó hacia ellos, trayendo consigo unas dos botellas pequeñas con un líquido desconocido.

El pequeño plan había sido puesto en marcha.

------------------

Fin del capítulo.

Todo va a su debido tiempo, tardaré mucho aveces, y otras no tardaré nada, pero ustedes saben que soy un humano, y los humanos tenemos siempre muchas cosas que hacer, algo nuevo estará por venir, así que espero les guste este cap. Nos veremos en alguna que otra actualización.

Un favor (una historia de The Loud House)Where stories live. Discover now