Rocío es...

Desde cero...

Desde cero...

Fuimos en un taxi las tres hasta la casa de mi madre, durante todo el viaje no pronuncie ninguna palabra, tampoco mi mama y Rocio insistieron en que hablo por lo que les agradeci mentalmente.

Al llegar las dos me ayudaron a entrar los bolsos que me habia llevado para mi viaje a Entre Rios. Al entrar a la casa de mi mama (casa que fue de toda la familia hasta que nos fuimos separando) note todo muy extraño, como si en esa casa no hubiese luz, no hubiese vida; cosa que antes de mi partida no era de esa manera o no lo note.

Me ayudaron a llevar los bolsos a mi ex-actual habitacion en total silencio, dejamos los bolsos sobre la cama y las tres nos quedamos mirandonos en silencio.

-Bueno las dejo, ustedes tienen mucho de que hablar- dijo mi mama llendose de la habitacion rapidamente.

Era el momento de hablar, ahora o nunca.

Pero... ¿Que le iba a decir? ¿Ella realmente habia perdonado absolutamente todo?

Esta nerviosa no voy a negarlo, pero todos esos nervios los tire a la basura cuando la vi a ella en un estado nervioso mucho peor que el mio.

Agarrando en borde de su remera de flores celeste y con la cabeza gacha, repiqueteando el pie derecho en el piso y moviendo la boca como si tuviese una conversacion muda.

-Caro yo.. em.. como decirlo?- dijo empezando nuestra charla nerviosamente

-No, para, sentate y hablemos mas tranquilamente- le dije tomando las riendas de este asunto, yo lo inicie y me voy a hacer cargo.

Ella se sento en la cama de una plaza que habia en mi habitacion, yo me sente en una silla que tenia frente a la cama que estaba ubicada en un tipo de escritorio improvisado. La mire a los ojos unos segundos y luego de tomar aire profundamente comence a hablar.

-Nose como pedirte perdon, nada va a compensar lo que hice y lo que senti, pero quiero volver a empezar- le dije con la cabeza gacha mirando hacia el piso, no podia soportar ver esos ojos verdes que estaban tan llenos de dulzura que algun vez lloraron por mi causa.

-No, no tenes que pedirme perdon, yo lo pense bien y Guille hablo conmigo y recapacite pero quiero preguntarte algo ¿Yo te presione en algun momento para que me siguieras en todo?-me pregunto ella con la voz afligida. Esta chica era demasiado buena, fui una perra desde el momento cero y aun asi cree que ella fue la culpable.

-Rocio, la que esta mal aca soy yo, siempre te vi muy perfecta y yo queria ser como vos, nunca me di cuenta que en lo que te destacabas era lo que hacias con pasion o lo hacias porque te gustaba; en cambio yo lo hacia con desgana porque no era mi deseo. Por eso siempre estaba por debajo tuyo, porque yo realmente no deseaba hacer esas cosas, yo solo queria ser como vos, perfecta- le confese lo que me habia guardado.

-No toquemos mas el tema, empecemos de cero- me dijo con una sonrisa que yo le correspondi y luego nos abrazamos como si fueramos chicas otra vez. Como si todo comenzara.

Sin preguntas, sin juicios, sin reproches.

Estaba en casa.