Capítulo 12

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 Termino de vestirme y salgo de la habitación

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 Termino de vestirme y salgo de la habitación.

—Luces muy linda, como siempre —dice Alejandro—, ¿segura de que ya no te duele tanto?

—No, ya no, es soportable. Además ya tomé el analgésico. —Le sonrío.

—Así que, ¿adónde iremos?

—A comprar un libro, ayer terminé uno y necesito otro. ¿No quieres ir?

Bajo las escaleras y él me sigue de cerca.

—Iría a cualquier lugar, pero sólo si es contigo.

—Que cursis son —dice mi madre al escuchar a Alejandro.

—Yo no he hecho nada. —Me sonrojo, ella empieza a reír y Alejandro igual.

—Toma, Evolet, para el libro. —Mi madre me da un poco de dinero, lo guardo en mi bolso.

—Más al rato se la traigo, señora —le dice Alejandro a mi madre.

Salimos de la casa. Su motocicleta está frente a la casa. Me ayuda a subir y luego él lo hace. Me abrazo a él, si me caí de la bicicleta y me di tremendos golpazos, no quiero imaginar qué pasaría si me caigo de la moto. Él arranca.

—Evolet, ¿cuándo irás con el psiquiatra? —pregunta un poco serio.

—Eh, creo que el lunes. ¿Por qué?

—Sólo tenía curiosidad, ¿te llevo a la librería que quiera? —Voltea a mirarme por un segundo y no puedo evitar sonreír. ¿Será que puedo confiar en él y dejarme llevar?

—¿En serio conoces alguna? —Me burlo.

—¿Me estás diciendo tonto o algo parecido?

Comienzo a reír.

—Llévame a la que quieras —digo al final.

.

.

Al llegar a la librería son las tres de la tarde, quizá no es grandiosa como la otra, pero igual es grande y hay muchos libros, hasta parece que me guiñan el ojo.

—¿Te gustó? —pregunta Alejandro.

—¡Claro que sí! —Le sonrío.

Me acerco a husmear en las estanterías, me tenso un poco cuando Alejandro rodea mi cintura con su brazo.

—Ese libro me gusta mucho —dice, señala un libro llamado los hornos de Hitler.

—Yo quiero el de Matar a un ruiseñor.

—¿Qué te parece si le preguntas a la encargada?

—Tienes razón. —Me separo de él y me dirijo hacia la encargada, se encuentra en la caja tecleando algunas cosas.

Más allá de las palabrasOù les histoires vivent. Découvrez maintenant