EL PLAN

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Una oleada de sentimientos invadió a Adolfo en cuestión de segundos, miró a sus hermanos, recordó a María, los sueños extraños; el viento soplaba en su rostro recordándole su poder, imaginó volver a convertirse en aquel ser mitológico lleno de poder pero no podía.

- ¿Por qué? - Se animó a preguntar al fin a Julián - ¿Por qué vi todo eso?

- ¿Dudas de su veracidad, Ehécatl? - Al oír ese nombre se le revolvió el estómago, entonces ellos en realidad estuvieron en su visión, en otro plano quizá

- No - Contestó seguro - Pero ¿Por qué ahora? ¿Por qué si Micté y Mictlán fueron claros con el voto de silencio?

- ¡Porque estamos hartos! - Dijo en voz alta Pablo, respiró e intentó tener calma al ver en los ojos verdes de su hermano un destello de miedo - Es que tu no sabes la maldición que es ser inmortal - Intentó explicar tras un suspiro - Ver morir a aquellos humanos a quienes les tomas cariño... o amor - Bajó la mirada, evitando llorar - Tener sentimientos como todos ellos y no evitarlo, perder nuestros poderes poco a poco, ver a los gachupines invadir nuestras tierras por poder y adaptarnos a ello. Viajar, siempre viajar, de aquí a allá, cambiar de apariencia con los recursos que podemos y nunca descansar como los demás.

- Sí, en realidad al principio lo vimos como una aventura - Continuó el mayor - Inclusive bromeábamos en apostar en cuántas vidas lo lograrían - Explicó - porque evidentemente la primera fue muy dura. Eran apenas tiempos de cambio, los españoles llegaron a invadir nuestras tierras y nosotros aún éramos Dioses, porque seguían teniendo fe en nosotros. Ustedes nacieron en tierras aztecas, precisamente aquí en Chiapas y tu fuiste un valiente guerrero, creo que querías continuar tu misión con nosotros desde otra perspectiva. Mayahuel una simple india criada en casa, trabajaba en el campo donde ahora se le conoce como Comitán, su familia era muy pobre y la tuya también. 

- ¿Qué falló ahí?

- La invasión española - prosiguió el joven delgado y hippy - Ella se llamaba Sugey y tú Ikal, eras guerrero azteca. En realidad creemos que tu alma quiso seguir con su misión de Dios porque pertenecías a una tribu fuerte, eras parte de los líderes y nosotros aún como Dioses procurábamos ayudarlos en medida de nuestras posibilidades. Tuvieron dos hijos y viajaron en familia por protección mucho durante la guerra. Ella tenía linaje mágico, escogió una madre bruja y heredó su poder, creemos que es también parte de su misión divina. La conquista duró años, no fue cosa de un día a otro y cuando al fin lo lograron tú y tu familia fueron capturados. Un grupo de asquerosos invasores soldados los tuvieron privados de su libertad, fuiste torturado hasta la muerte y luego ella... - Pausó 

- ¿Qué pasó con ella? - Insistió Adolfo lleno de ira, rencor, culpabilidad y tristeza. Sus hermanos volvieron a cruzar miradas inseguros de terminar la historia - Necesito saberlo - Pidió suplicante

- Mataron a sus hijos frente a ustedes, después a ti y a ella... la violaron antes de terminar también con su vida. Ella los maldijo como bruja y vimos que tiempo después tuvieron un final trágico aquellos hombres, eran españoles y aunque lograron tomar nuestras tierras muchos de los aztecas vengativos también los cazaban, por justicia propia. Ellos terminaron peor, Ehécatl. 

- Lo soñé - Recordó - Justo anoche que estuve con... María. - Un escalofrío recorrió todo su cuerpo, la piel se le erizó, las manos comenzaron a sudarle - Ella es... 

- Sí - Confirmó Pablo - Di con ella hace algunas semanas en uno de los andadores de la ciudad. La reconocí por cierto lunar que tiene que vida tras vida ha tenido. 

Era demasiada información por procesar, no podía estar equivocado porque lo sentía. En su sueño no vio el final de María sino sólo su muerte y tenía ganas de toparse a ese par de soldados en esa vida y molerlos a golpes, entendió de golpe la extraña conexión con ella y tenía la imperiosa necesidad de buscarla, de decirle, de amarla.

- No lo hagas - Pidió Julián casi leyendo su mente - Ella no está lista para el despertar todavía. Ha sufrido mucho, también has sido un tremendo hijo de puta en algunas vidas, porque entre más reencarnas más se ensucia tu alma, más olvidas tus raíces, más enseñanzas debes tener porque hay más propósitos, se convirtieron en humanos y eso implica muchas cosas. 

- ¿Qué hago? - Miró a sus hermanos, pidiendo consejo

- Por eso te despertamos Quetzal - Sonrió el flaco llevando la pipa de MJ a su boca nuevamente y tras fumar prosiguió - Ya hemos roto las reglas y aunque los Dioses mexicanos ya no son vistos como tal, Mictlantecuhtli y Mictecacíhuatl siguen teniendo su poder porque aún creen en ellos. Algunos les dicen Santa Muerte, uniéndolos en una sola figura, siguen reinando y no son malos, también nos han ayudado mucho pero desconocemos las consecuencias de esto así que procuremos que ella despierte sola, bueno, con tu ayuda, pero no de esta manera, quizá no lo soporte. 

- ¿Cómo hago eso?

- Tienes que cumplir la misión. Se convirtieron en lo que hoy los espirituales describen como "Llamas Gemelas" y de hecho, pendejo, fueron ustedes los que iniciaron esa conexión almática. Entonces su deber es completar todas las fases que implica... Es muy complicado porque las definen como 8 pero quizá son más. Nosotros como Dioses no la entendemos, nuestra alma es nuestra, no la dividimos ni podemos hacerlo. Tenemos la teoría que si están juntos ella irá despertando poco a poco, sabemos que ha tenido sueños de su existencia como Diosa y eso nos da el indicio de que Mictlantecuhtli y Mictecacíhuatl también ya se cansaron o nos tienen piedad.

- Bien. Me voy - Advirtió Adolfo parándose de la silla acapulco sintiendo su energía fuerte y decidida - Pero antes... Quizá, no. Me voy a quedar aquí y buscar un empleo. ¿Saben de algún lugar que pueda rentar? 

- Lo previmos cuando Tonatiuh le leyó las cartas a tu mujer hace algunas semanas, supimos que venías en camino - Aseguró el barbón - Ven

Julián caminó rumbo al oscuro pasillo que llamó la atención del ojiverde al llegar a dicho lugar; lo siguió inmediatamente. Su hermano encendió la luz del corredor y logró ver un cuarto al final con una puerta grande y gruesa de madera que abrió para dar vista a un cuarto amplio, ya adecuado con una cama King, un enorme clóset y un librero de iguales proporciones, un pequeño escritorio y una puerta corrediza que daba al jardín trasero, cada cuarto tenía acceso a él como área común.

- Te preparamos este lugar - Informó su hermano colocándose detrás de él y poniendo su grande mano en el hombro del joven - La casa perteneció a un matrimonio viejo, aún creyentes de nosotros porque todavía los hay. Nunca supieron que éramos aquellas leyendas pero lo intuían porque a veces aún despiertan ciertos poderes, si me pongo muy de malas hay tormentas y en felicidad pequeñas lloviznas. Esperamos que también puedas acceder a los tuyos después. Puedes mudarte cuando quieras - Esculcó en su bolsillo y sacó un juego de llaves del lugar que le entregó a Adolfo, quien en ese momento tuvo el impulso de abrazarlo y lo hizo. Su hermano le dio unas palmadas en la espalda y luego se separó, tomándolo de los brazos para mirarlo a los ojos como el mayor de la familia - No nos falles - Pidió. 


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