Capitulo 10.

5.6K 355 78
                                    

—Deja de molestarme con esa varilla. —Hice un puchero mientras Elizabeth recubría mis pestañas con una sustancia viscosa color negro.

—Oh, lo siento, princesa. —Elizabeth resopló con sarcasmo— ¿Debería usar mis dedos?

—¿Qué se supone que debe hacer esto, de todos modos? ¿Teñir mis pestañas a negro a pesar de que ya lo son? Basura. —Me reí, mirando a Elizabeth rodar sus ojos por encima de mí.

—Para que resalten tus ojos —ella respondió. —Ahora vamos a aplicar un poco de polvo. Tu tez está ya muy bien, ¡así que vamos a hacer una capa fina y luego terminamos!

—¿Así que estás diciendo que esto hará que le guste a Harry? —pregunté, mirando a sus ojos mientras sostenía el pincel en la mano.

—Evelyn. —Liz suspiró—. Harry se está enamorando de ti. Él tenía un flechazo en ti antes de todo esto. Antes de que te haya comprado lencería de lujo y pusiese esta máscara en su cara. Creo que en todo caso, deberías estar preocupada por te folla hasta la mierda.

—Liz —susurré— No hables así. No quiero tener relaciones sexuales por el momento. La Biblia dice que cuando nos casemos.

—Oh, ¿así que vas a casar con Harry? —Elizabeth rió— Oye, Eve. No creo que Harry vaya a proponerte en algún momento cercano.

—¿Por qué no? —inquirí, y apreté los ojos con fuerza mientras ella sacudía el polvo en mi cara.

—Tienes dieciséis años. He estado con Anthony durante un año o dos, así que tenía diecisiete años cuando comenzamos a salir. Pensé que era amor después de la primera semana, y mamá me dio una bofetada en la cabeza diciendo: "Eso no es amor, Elizabeth. Eres demasiado joven para saber algo acerca de la palabra A". —Elizabeth se rió entre dientes.

—¿Qué estás tratando de decir?

—Yo no estaba enamorada de él después de la primera semana. —Elizabeth frunció el ceño— Nunca estuve enamorada él.

—¿Entonces por qué estas con él?

—Evelyn. —Elizabeth suspiró profundamente—. Estoy enamorada de él ahora. Estamos en una gran pelea en este momento porque él no cree que el bebé sea suyo.

—Yo tampoco lo haría. —Fruncí mis labios— Dices que tienes mucho sexo. Quiero decir, ¿cómo podría confiar en ti?

—No es el momento, Eva. —Elizabeth miró— Sé que me jacto de tener sexo todo el tiempo con los hombres. Mentí. Sólo he hecho un par de veces y fue con Anthony. La única razón por Anthony no cree que el bebé sea suyo, es porque di muchas mamadas.

—¿En serio? —pregunté— ¿Por qué te tiras por ahí todo el tiempo? Te vistes de manera inapropiada.

—Sólo deseo gustarle a más de un chico. Soy una perra egoísta, lo sé —Liz dudó.— Pero mamá y papá no están tan interesados en mostrar que le importo. Sólo quiero que la gente se preocupe por mí.

—Me preocupo por ti —hablé.

—Lo sé, Evelyn. —Elizabeth sonrió con picardía—. Pero tú eres mi hermana. Eso no cuenta.

—Sé cómo te sientes —me abrí—. Cuando Harry llegó, él me hizo sentir especial. ¿Es por eso por lo que me gusta tanto?

—No lo sé, hermanita. —Elizabeth se rió en voz baja— Pero tú importas. A Harry le gustas porque no eres como yo. No ruegas por atención.

Novice [h.s]Where stories live. Discover now