Capítulo 01

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Ciudad de Kansas, Missouri

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Ciudad de Kansas, Missouri

Estudio de Arquitectura Wayland


La joven secretaria, hacía bastante tiempo que trabajaba para aquel estudio de arquitectura, sobre todo para el señor Wayland, o simplemente Caden, en el pensamiento de la muchacha.

Desde el momento en que lo vio, se había enamorado perdidamente de él. Era todo lo que habría soñado y mucho más. Venus, llegó de casualidad a su trabajo, para pedir un puesto en su estudio de arquitectura. Solo quería hacer algo, no le importaba mucho de qué, solo quería tener su propio dinero.

Empezó desde abajo, primero como cadete de él, llevando recados, encargos, archivando folios, hasta ascender a su secretaria personal. Siempre habían tenido un trato cordial, y amable, sin pasarse de la raya por parte de él, la joven no pretendía mucho, solo trabajar a su lado, aunque muy en el fondo de su ser, esperaba que algún día pusiera los ojos en ella. Siempre se trataron como profesionales y solamente dentro del ambiente laboral.

Venus, había entrado de casi adolescente a su estudio, y con el tiempo, aquel hombre, su jefe, se le iba metiendo cada día un poquito más debajo de su piel. El vestuario de ella, siempre era recatado, y profesional, el típico de secretaria ejecutiva de un muy importante estudio de arquitectura que se dedicaba a la construcción y diseño de ejemplares establecimientos, edificios y toda clase de proyectos que el estudio planeaba y llevaba a cabo.

Venus, siempre llevaba las blusas, faldas tubo y chaqueta con tacos altos pulcramente, y lo terminaba con un rodete a lo alto de la cabeza y con muy poco maquillaje, un poco de máscara de pestañas, un pulcro trazo por dentro en color negro y bálsamo para los labios, debido a que casi siempre se le resecaban. La joven hacía oídos sordos a las palabras fuera de contexto que le dedicaban dentro del estudio cuando su jefe no los miraba. Aquella mañana no fue la excepción en donde su jefe debía dar una muy importante reunión de negocios, con socios y nuevos interesados en construir un edificio de oficinas en Chicago.

—Buenos días, Venus —le respondió de forma lasciva uno de los socios.

—Señorita Avner, por favor, y buenos días, señor Hutson.

—¿Por qué tanta formalidad, Venus?

—Señorita Avner para usted.

—Prefiero llamarte Venus.

—Basta Hutson, siéntate y deja tranquila a la señorita Avner —le dijo el jefe de ella.

El señor Hutson tuvo que obedecerlo, y sentarse como se lo había pedido su socio a cargo de la reunión empresarial. El trabajo de Venus en cada reunión era repartir los formularios a cada integrante del proyecto y tomar notas de las cosas que se hablaban dentro de la reunión misma. A mitad de la reunión, ella les sirvió café para todos, su jefe se lo agradeció y ella le sonrió.

La Secretaria ©Where stories live. Discover now