Capítulo 16

128K 5.6K 562
                                    

El dueño de la cafetería una vez que se acercó un poco más a ella, le habló

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

El dueño de la cafetería una vez que se acercó un poco más a ella, le habló.

—Venus ¿qué haces aquí?

—Buenas tardes, señor Clark.

—Buenas tardes ¿qué haces aquí? No es seguro el lugar para ti.

—Descuide, estoy esperando a un amigo que acaba de entrar.

—Dile que salga, no es segura para nadie la cafetería en estos momentos.

—No se preocupe, señor Clark, mi amigo es experto en estos temas —le dijo y Caden salió del lugar ya que la había visto hablar con el hombre.

—Buenas días señor, soy Caden Wayland —le dijo extendiendo su mano.

—Mucho gusto, joven —le dijo aceptando mano—, ¿eres pariente de Bill Wayland?

—Sí, soy su hijo.

—Bill siempre ha sido un cascarrabias.

—Y lo sigue siendo —le respondió su hijo riéndose.

—Dale mis saludos, casi siempre lo veía en el verano por aquí, ¿no ha venido contigo?

—Se los daré, no, él no ha venido conmigo, he estado viendo la cafetería por dentro, no ha quedado del todo destruida, pero llevará por lo menos un mes y algo para que quede como nueva.

—Sí, yo pensé que terminaría todo en dos semanas como mucho, pero es imposible, muchacho.

—No es tan imposible, pero llevará trabajo, y mucho.

—Lo sé, costará, pero volverá a lo que fue antes del huracán. ¿Has seguido los mismos pasos de tu padre?

—Sí.

—Entonces, podrías ayudarme a que la cafetería vuelva a ser lo que era antes.

—¿Tiene el plano de la cafetería?

—Sí, pero está en mi casa, si quieres, mañana por la mañana te lo llevaré.

—De acuerdo, señor Clark, lo estaré esperando.

—Excelente entonces, la verdad es que me has quitado un peso de encima, muchacho, sinceramente no tenía idea en dónde conseguir un arquitecto.

—Mañana hablaremos bien del tema, si nos disculpa, tenemos que irnos.

Se despidieron del dueño del local, y volvieron a emprender el camino hacia el departamento de Venus.

—Estás de vacaciones, Caden, no puedes trabajar en tus vacaciones, has venido a distraerte, no a volver a cargarte la mente de trabajo y saturación.

—Vine aquí para salir del problema que tengo con mi esposa, que espero terminar con ella definitivamente, no para despejarme la mente sobre el trabajo, Venus, amo lo que hago, y detesto haber cometido ese error del que mi familia, tú y yo sabemos también.

La Secretaria ©Where stories live. Discover now