Capítulo 1

24 2 0
                                    

Me he levantado de la cama y he mirado el móvil para ver que hora es, son las nueve de la mañana y ya tengo cuatro llamadas perdidas de mi compañero, según parece hoy me va a tocar trabajar y eso que pensaba que ser ayudante de un agente de policía amigo de mi padre, iba a ser algo que me daría ventajas, pero parece ser al contrario. No llevo ni dos semanas y ya hemos tenido que resolver cuatro asesinatos.   

Mientras me hago el desayuno llamo a mi compañero y le pregunto que donde se encuentra esta vez el cuerpo, me da indicaciones de como llegar y antes de colgar me dice que intente llegar lo antes posible. Desayuno rápido, me ducho, me preparo y me fijo en que llevo el arma y la placa, y salgo disparado hacia mi coche.

Parece que las calles de Washington están petadas, eso me pasa por salir en hora punta, busco la mejor ruta para llegar, pero según el GPS por todos lados hay atascos, maldigo en voz alta mientras se oye un montón de pitidos de claxon sonando, porque la gente no llega a trabajar. Entonces la única solución que tengo para llegar a tiempo y que no me echen la bronca es poner la sirena para que me abran camino.

-Por fin estas aquí Andrew, pensé que te habías vuelto a dormir- me dice mi compañero en plan broma.

-Bueno Max, al menos no he llegado tarde, como tu y mi padre pensabais en un principio- Le digo con una cara un poco burlona.

Me presento me llamo Andrew y tengo 25 años recién cumplidos, y soy ayudante de uno de los mejores inspectores de policía de todo Washington, Max, que a parte es el mejor amigo de mi padre, un policía retirado que le ayudo en un montón de casos.

Tanto Max como yo nos acercamos donde esta la cinta policial, enseñamos las placas y nos dejan pasar, enfrente de nosotros se ciñe un cuerpo medio tapado por una sabana, y al lado un medico forense. Mientras Max empieza a hablar con los testigos que vieron el cuerpo yo me acerco al forense.

-¿Se sabe quien es y la causa de la muerte?- le pregunto al forense mientras este se pone en pie.

- Chico joven de entre 25 y 30 años, sin carnet de identificación, se supone que ha sido un robo que ha salido mal, ya que le han quitado todo lo de valor que llevaba encima. Tiene cuatro heridas las cuales fueron causadas por una daga y también se que fue torturado, pero no sabré mas detalles hasta que no me lo lleve al deposito y le hagas unas cuantas pruebas mas- me dice el forense, mientras yo tomo notas en mi cuaderno para que no se me olvide nada.

Unos ayudantes recogen el cuerpo y lo meten en una furgoneta, a mi alrededor veo un montón de sangre, se supone que es de la victima pero hay algunas que van en otra dirección y pueden ser del asesino. Mientras saco mis conclusiones de lo que puede haber pasado, Max se acerca por mi espalda y me asusta haciendo que de un brinco y ponga cara de asustado.

-Me sorprende que te haya asustado yo y no te asusten los cadáveres, eso debe de venirte de familia- me dice Max riéndose a carcajada limpia. Aunque Max ya tienes sus años es tan bromista como un joven de veinte.

Le comento lo que estaba pensando antes de que me asustara y el piensa que puedo llevar razón e indica a unos policías, para que recojan muestras separadas de la sangre, y así el forense pueda decirnos algo sobre su procedencia. Max me indica que nos toca irnos y dejar que el resto se ocupe.

Max ha venido con otro policía, asique como no tiene coche me toca llevarle a mi. Ya son casi las doce de la mañana y tengo algo de hambre asique le digo a Max que voy a parar para tomar algo, el acepta y me cuenta lo que le han dicho los testigo sobre como encontraron el cuerpo.

Según parece el joven estaba colgando bocabajo de una barra que sobresalía de un edificio, ellos pasaban por casualidad de una quedada de amigos y en cuanto vieron la escena llamaron a la policía asustados, no vieron a nadie mas cerca ni nada. Me sorprendo al saber como estaba el cadáver, porque si hubiera sido solo un robo aunque hubiera sido torturado, no se tomarían la molestia de colocar el cuerpo en esa posición. Creo que el asesino quiere que descubramos algo.

Estoy tan centrado en mis pensamientos que no me doy cuenta de que Max a pagado ya la consumición y me esta llamando para que volvamos a la comisaria, me disculpo y ambos nos montamos en el coche.

En la comisaria como siempre hay mucho jaleo y Max me obliga a mi ha hacer el papeleo del caso, cosa que me parece un rollo, pero como acabo de empezar no me puedo ir quejando porque me toque hacer las cosas que nadie quiere. no tardo mucho y me pongo a hablar con mas policías que también están sin hacer nada mientras Max esta hablando con su jefe para que nos de ordenes de lo siguiente que tenemos que hacer hasta que llegue mas información del caso.

-Andrew quiero verte en la sala de tiro en media hora, aun no has tenido oportunidad de usar la pistola con nadie pero aun así te toca practicar, no quiero que te me mueras en el primer fuego cruzado que tengas, tu padre me mataría- Me dice Max mientras me hace una seña para que vaya en esa dirección.

Desde que salí de la academia Max siempre me obliga a entrenar cuando no hay nada que hacer para que así sea un mejor policía como mi padre y él  en su época. Yo elegí la carrera de policía porque sabia que así podía ayudar a la gente y también haría feliz a mi padre.


Un recuerdo olvidadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora