Capítulo 38/18

255 35 3
                                    

Bea.

Supongo que se puede decir que los novios están nuevamente en el apartamento de la ciudad.

... aunque no lo diré. Me da un poco de vergüenza.

*Eliminar. Eliminar y volver a comenzar*

De nuevo en el apartamento y esta vez más relajada que nunca. He aprobado mis dos exámenes, con la nota mínima, pero los he aprobado, por otro lado... ¡ Sam y Cassie vendrán a pasar un fin de semana con nosotros!

Desde que llegamos Callum no se ha despegado ni un solo momento de Caprichitos, lo tiene todo el tiempo encima y creo que comienzo a ponerme celosa. ¿Es posible eso?

La vecina de piso que lo cuidó mientras estuvimos fuera dijo que Caprichitos se portó bien, que si, que maulló mucho como de costumbre, pero que en ningún momento le dió la impresión de que haya pasado un mal rato, incluso lo puedo ver más regordete, por lo que asumo que ha sido bien alimentado.

Tomo asiento a un lado de Callum en el sillón, sin embargo este sigue acariciándole el puente de la nariz al gato naranja que ronronea sobre sus piernas.

-Yo también quiero un poco de atención- me quejo.

-Te toca esperar- me dice divertido.

Para cuando baja a Caprichitos de su regazo yo ya me he distraído con otra cosa.

Bajo su mirada me levanto, tomo del mueble de la televisión su cámara y vuelvo al sillón con la misma entre las manos. Una sonrisa traviesa se forma en mis labios.

-¿Puedo sacarte una foto?

-No- intenta quitarmela de las manos, yo lo esquivo.

-¿Por qué no? Tú me sacas fotos todo el tiempo, y a veces sin aviso.

-¡Porque tú sales bien!- se ríe mientras se acerca más.

Abro la boca para reprochar mientras me extiendo aún más lejos para que no tome la cámara y me deje salirme con la mía.

-¿Y tú no?

Se encoge de hombros.

-No me gusta que me tomen fotos.

-¿Es algún tipo de complejo de fotógrafo o algo de eso?

Callum se ríe mientras vuelve a intentar tomar la cámara.

-Vamos, Bea. Esa cámara me gusta mucho, no quiero que tenga ningún accidente.

Frunzo mi ceño ofendida, un instante después me doy cuenta de que estoy atrapada entre el sillón y Callum.

-¿Accidente? ¿Por quién me tomas?

-Por la misma persona que ayer dejó abierta la llave del agua e inundó medio baño.

Evito su mirada sabiendo que tiene razón y se la devuelvo. No pasa ni siquiera un minuto cuando siento sus labios contra mi mejilla.

-Tú también me gustas, intrusa. No te pongas celosa de la cámara.

-¿Entre la cámara y yo a quién elegirías?- le pregunto entrecerrando los ojos con cierta gracia.

-Mhmmm...- me da una mirada bastante intensa de arriba hacia abajo.

-¿Entonces?

-Una foto desnuda tuya en la cámara.

-¡Callum!

Lo empujo avergonzada y sintiendo que las mejillas se me tornan rojas y calientes.

Mi empujón no sirve de nada, no lo mueve, de hecho, él lo utiliza como incentivo para avergonzarme aún más con la pura realidad.

El Destino De Lo Imposible ✓Where stories live. Discover now