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POV Caspian

— ¡¿Quien eres?!

El chico volteo a verme pero por la lejanía no pude ver bien su rostro, solo sabía que era pelinegro, algo pálido y delgado.

Regrese a dentro donde pude ver a la Reina Lucy abrazada del Rey Peter.

— ¿Quien era ese chico?

Cuestioné y ambos me vieron por unos segundos antes de susurrarse algo.

— ¿Cómo era?, Porque supongo que preguntas porque lo viste, ¿Verdad?

Le asentí al Rey Peter.

— Ya estaba lejos cuando lo ví, pero su cabello era negro, su piel blanca, bueno no tanto, más bien algo pálida y...

— ¿Crees que pueda ser Eddy?

Dijo la Reina Lucy viendo a su hermano.

— Se supone que Ed murió a manos de la bruja blanca, es imposible y si resulta ser él, ¿Quien nos asegura que quede algo de humanidad en él?

Fruncí el ceño ante eso puesto que no comprendía lo que decía.

— ¡Él evitó que revivieran a la bruja blanca!, ¡Peter es Ed, pudo ser fastidioso, engreído y malcriado en su momento, pero sigue siendo nuestro hermanos y el Rey de Narnia!

¡Lo sabía!, Había otro Rey.

— No, solo estaba destinado a ser el Rey de los bosques de occidente y ningún narnianos sabe de su existencia, es mejor dejar el pasado atrás, además, Ed nos traicionó, no lo olvides, quien nos garantiza que no evitó que revivieramos a la bruja blanca solo por mantener su poder, si es que tiene alguno.

Me sentí incómodo por lo cual simplemente me dispuse a ir a dónde la espada y la tomé entre mis manos, era pesada y estaba más fría que el hielo que ahora se derretía a su alrededor.

— ¡¿Alguien me puede explicar que está pasando?!

Llegó la Reina Susan y parecía desconcertada.

— Nada, no pasa nada Susan.

Dijo el Rey Peter para luego simplemente irse.

— Caspian irías a buscar a ese chico, por favor, eres el único que lo vio.

Al escuchar la petición de la Reina Lucy no supe que pensar, ¿Dónde buscaría a alguien que se fue volando?

— ¿Que chico?

Cuestionó la Reina Susan a lo que yo solo le di una afirmación a la Reina Lucy y salí de allí.

Camine rápido por los túneles hasta llegar a la salida, todos estaban comiendo y hablando entre ellos, sería fácil irme sin que me notarán.

Camine con cautela fingiendo ir al río que estaba a unos cuantos metros, podía jurar que alguien me seguía.

No me iba a arriesgar y mejor decidí sentarme a orillas del río, la corriente estaba "calmada", no iba tan rápido como en otras ocasiones.

"¿Quien será ese chico?... Dijeron que podría ser un posible enemigo, o así lo entendí, ¿Pero porque?, La reina Lucy no me enviaría a una posible muerte, ¿o si?"

Negué rápidamente olvidando me de todo y simplemente me concentre el lo que entendí.

— Te encontraré chico misterioso.

Quería suponer que nadie me escuchaba pero al escuchar el agitar de las ramas y luego pasos casi inaudibles tras de mi, supe que tenía razón, después de todo, no podían confiar al 100 en mi y me mantendrían vigilado.

— Disculpe la intromisión principe, pero, ¿A qué chico se refiere?

Mire de reojo a Reepicheep.

— Es pelinegro, algo pálido y delgado, al menos es lo que pude ver, él Rey Peter dice que es imposible que sea él, no entendí mucho, pero ahora se que en el bosque de occidente hay un Rey, o hubo uno.

El ratón asintió y sus intenciones de querer irse corriendo no fueron muy bien ocultas.

— Si me disculpa principe, tengo que hacer guardia.

Dijo tan rápido que casi fue como si no hubiera dicho nada entendible, pero tal vez tener una mente tan despierta me ayudó a entender lo dicho.

Respire profundo antes de levantarme y caminar rio abajo, esa era la dirección a dónde el chico se fue y lo encontraría, aunque no podía confiarme porque si me llegaba a desviar un poco, fácil terminaría cercas del castillo del que una vez fue mi hogar.

POV Edmund

— Bajemos aquí Draco.

Pedí, solo quería descansar un poco, tal vez no estabamos tan lejos pero si tardarían unas horas en llegar a nosotros.

— ¿Cree que el niño telmarino le diga a sus hermanos de usted?

Asentí, eso era seguro.

— Pero ya no importa, lo que importa es terminar con el reinado de los telmarinos y que Narnia vuelva a su gloria, o al menos la mitad de ella.

Sonaba feo pero era verdad, nada podría ser igual a como era antes, en la era de oro, independientemente de todo.

— ¿Que hacemos?

Me encogí de hombros, ahora no importaba mantenerme en el anonimato, tenía si o si, terminar con esto y si tenía que hacerlo sin mis hermanos lo haría.

— Miraz me quiere muerto después de lo que pasó anoche, y más que nadie se, un Rey nunca se puede negar a un duelo.

Él parecía sorprendido.

— Entonces si vence a Miraz, que es obvio que lo hará, ¿Usted será el nuevo Rey?, un "usurpador" por así decirlo.

Le asentí, después de todo, hasta yo mismo me consideraría así mismo un usurpador ya que sigo siendo considerado como un traidor, al menos a mí punto de vista.

— La diferencia sería que yo le entregaría el trono al telmarino y ya que mis hermanos decidan que hacer.

Él asintió, juraría que llevábamos horas allí, desayunamos, comimos, me bañe y él se asió, no había peligro cercas y los narnianos que reviví y cure a noche se acercaban poco a poco, los árboles no mienten aunque no suelen hablar mucho.

— ¡Carajo!

Abrí los ojos tan rápido como ese susurró llegó.

Me senté y a mi alrededor solo estaba raco que dormía plácidamente, no había peligro, pero estaba seguro que esa voz se escuchó y no era parte de un posible sueño que se olvidó tan rápido como desperté.

Me levanté aún viendo a todos lados y un nuevo quejido se escuchó aunado a una maldición algo infantil.

Camine a dónde se escuchaban las quejas y pude ver cómo el chico que me vio vatallaba en sacar su pie de un tipo trampa de esas que los enanos suelen colocar desde hace un siglo atrás para mantener a los enemigos hasta que vallan a revisar.

— ¡Si te sigues moviendo te apretaran más!

Le informe sin mostrarme y aunque me mostrará era imposible que me viera puesto que la noche había caído.

— ¡Ayúdame!, ¡Por favor!

Negué y los pasos tras de mi me hicieron bufar.

— Sabe que los enanos ahora están en nuestro territorio y otros en la fortaleza majestad, de aquí a que ellos vengan a revisar las trampas, el joven ya habrá muerto de deshidratación.

Asentí pero aún así espere a que siguiera pidiendo ayuda, cuando decidí liberarlo ya estaba dormido y temblaba ligeramente por el frío.

— Si que es raro ver a alguien que tiene una "edad" similar a mi, al menos físicamente, ¿Crees que me quede el cabello largo?

Draco nego de inmediato y rei ante eso, pues tenía razón, el cabello largo solo le quedaba a algunos y ese era el caso del telmarino.

Continuará...

(25-08)/29-09-22

El Rey De Occidente Where stories live. Discover now