Amantes enemigos

Cap 14: Conviviendo

Ayer estuve pensando, bastante estuve pensando, y decidí quedarme. Hablé con mi hermano y mi novio y tome esa decisión, aunque capaz me arrepienta, me voy a quedar igual.

Con Rodri y algunos amigos de Buenos Aires habló re poco, pero voy a intentar darles más bola, porque mira que incluso con Mia nos alejamos un toque.

Llamadita:

-Me tenes re olvidado, qué onda con vos?- Me habló rodri.

-Perdóname jaja, no sabes todo el quilombo que tengo en la cabeza ahora.- Le dije y me disculpe medio medio.

-Si, Iván me contó, te juro que cuando me contó flashe película jaja.- Se burló de la terrible coincidencia de mierda que nos tocó.

-No te burles pelotudo, no me lo banco más a tu amiguito. Mejor decime, ¿cómo sigue todo por allá?- Le pregunté, tenía unas re ganas de saber, aparte de que capaz soltaba la de como había seguido la rela entre él y mi hermanita del alma.

-Todo igual, nada más que ahora no esta la uni viste, hay más tiempo libre. ¿Cuando volves? Te re extrañoo.- Me dijo Carre saturando un toquesito el micrófono del cel.

-Jaja, vuelvo después de las vacaciones, pero vos podes venir, no?- Le pregunté a Carre, lo re quería ver, así que si aceptaba venir yo sería re feliz.

-Obvio mi vida, capaz el mes que viene igual, tengo asuntos acá, pero voy a hacer lo posible para ir.- Me dijo y yo me desilusione un poco.

-Dale, yo te espero acá entonces, prometo no dejarte tan de lado ahora jaja.- Le dije.

(...)

Hablamos como dos horas más, con Carre es re común eso, empezamos hablando de un tema y terminamos hablando de otro que nada que ver.

-Chau mi vida, te amo, cuidatee.- Me despidió Carre, yo corte, y me tocaron la puerta de la pieza.

Fin llamadita

-Soy Pablo, puedo pasar?- Me pregunto Pablo, mi padrastro, desde el otro lado de la puerta.

-Si, pasa.- Le respondí.

-Puedo hablar con vos, o estas ocupada? Vuelvo después igual, no pasa nada.- Me habló amablemente Pablo todavía parado en la puerta que ahora estaba abierta.

-Obvio, decime que pasó.- Le dije y él se sentó en mi cama a un lado mío.

Este chabon era muchísimo mejor que el viejo verde con el que mi mamá estaba antes, Pablo me transmitía mucha paz, no tenía miedo al hablar con él.

-Bueno, yo sé que vos sos re joven, y mi hijo igual. Yo no debería meterme ni nada, pero, porqué se llevan así?- Me preguntó Pablo.

-Así?- Le pregunté haciéndome la boluda.

-Si, yo sé que mi hijo es buena persona, pero aveces siento que se me salió de las manos. Mi hijo... consume drogas?- Me habló como buscando una respuesta clara. Yo no sabía que chota decirle, la tiro así, tan de una.

-¿Qué? ¿De dónde sacó eso?- Le pregunté, estaba re confundida, ¿Iván drogándose? Osea si, es medio mierda, pero no se si sea drogadicto o algo así.

-Tuteame, mira que tan viejo no estoy.- Dijo Pablo y se rió.

-De verdad vos no sabes nada?- Me preguntó con cara de confundido.

-Iván y yo no nos llevamos re piola que digamos, él no me cuenta sus cosas y yo no le cuento las mías, así nos llevamos. Y capaz me cae re mal, pero no creo que se drogue.- Le dije sincerándome con él.

-Mi amor, acá estas, vení que te necesito.- Le habló a Pablo mi vieja entrando a mi pieza, por lo menos tocas la puerta, no?

-Dale amor, ahora voy.- Le respondió Pablo y se giró para mirarme cuando mi vieja cerró la puerta.