No podía decir que era la primera vez que estaba así de incómodo, porque no era cierto.
Esteban se había pasado la vida ciertamente incómodo, sintiéndose encerrado desde adentro, encargándose hasta de su postura, su forma de mirar y hablar, sus gustos, sus expresiones, todo siempre parecía ser la actuación más importante de su vida, y era agotador.
Desde que estaba con Francisco se sentía libre, era él mismo, pero ahora, en la casa del campo de sus padres, se sentía un actor nuevamente.
Francisco había insistido muchisimo en que lo acompañe, sus padres lo habían invitado a pasar el domingo con ellos, era una reunión anual ya que nunca se veían.
Esteban le dijo muchas veces que era mejor que vaya solo, pero como parecía nunca tener voluntad, ahí estaba, sentado frente a sus padres, siendo un impostor.
-si, nos conocimos en el correo, Esteban se iba a casar...
-ah, ¿y porque no?-preguntó su madre mirando al amigo de su hijo, a su "compañero"
-todavía no, esperamos que a fin de año...
Fran sonrió y bajó la vista a su plato.
ambos habian dejado las alianzas guardadas en casa.
-y hasta entonces le permití vivir en casa, ya saben que tengo todos esos cuartos libres en vano
-a ver si empezas a tener más cuidado-le dijo su padre cortando la comida-esto de tu enfermedad te va a traer problemas, y si meter a un hombre a tu casa...
-no es el caso, Esteban es amigo, él no...-dijo aclarandose la garganta mientras miraba al mencionado, casi disculpandose con los ojos-él no está enfermo
-que bueno-dijo el padre-es peligroso, vos no deberías andar en la ciudad con ese problema tuyo, si alguien te ve siendo afeminado te pueden matar...
-ya lo sé
-y tu madre y yo no vamos a poder reclamar, tienen derecho...
-ya lo sé-repitió con el estómago cerrado
-si volvieras al campo con nosotros, te podemos cuidar-dijo su madre-el sobrino de doña Genoveva se curó, ahora es pastor
-no me gusta el campo...ni ser pastor
-pero acá no hay tentaciones,hijo
-allá tampoco-le dijo él fingiendo la sonrisa, acariciandole el brazo a su mamá-no estoy haciendo nada, solo trabajo...y Esteban me ayuda
Esteban, que ya no comía más y sentía la mirada dura del hombre de campo,que también era papá de Fran, encima, los miró.
-mi prometida tiene una amiga, creo que se lleva bien con Francisco-dijo siguiendole la corriente
-¡por dios, que alegría! ¡al fín hijo!
Fran sonrió para no llorar e igual que Esteban esquivó la mirada de su padre.
ambos sabían que él no creía nada, no tenía la ingenuidad de su madre.
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Durante la hora de la siesta, los dos se escabulleron en el piso de arriba.
Fran se sentó en el piano de cola y tocó alguna melodía mientras Esteban de pie lo escuchaba.
-podría dar clases de piano,ahora que estoy en paro
-podrías-le dijo él sentándose a su lado, pero de forma inversa
-¿pagarías?
-con besos-respondió besando su mejilla
-con besos no pago las cuentas, Esteban
Esteban sonrió y miró a su alrededor. la casa era hermosa y antigua, muy tranquila rodeada de campo y huertas.
-a veces quisiera tanto dejar todo
-¿a mí también?
-me quedaría solo con vos-le dijo acariciandole una mano-y tu piano
-dejemos todo
-sos tan literal siempre
-algún día papá y mamá no van a estar y esto es mio, podríamos vivir realmente en paz, con mi hermana no vamos a tener problema, se muere por sacarme la casa del centro.
Esteban sonrió y siguió acariciandole los dedos con suavidad.
-fue mucho peor de lo que pensé, no quería que te sientas incómodo-dijo Fran. finalmente había tocado el tema
-no fue incómodo
-me escuchaste mentir sin parar, hacer la voz de macho...
Esteban sonrió y le besó la cabeza
-la voz de macho la podrías usar más seguido en casa...
Fran sonrió, pero estaba triste. hacía pocos días habían ido a la manifestación que por fortuna fue tranquila.
lo había visto activo, pero ahora parecía otra persona, fingiendo ser quién nunca podría ser de verdad.
-es como un acuerdo que tenemos, ellos,mi hermana y yo. ellos tres lo saben, yo aceptó que ellos lo acepten como una enfermedad y hago todo lo que pueda para crean que me voy a curar
-haber traído a un hombre al almuerzo no creo que ayude...
-nunca traje a nadie, jamás, pero quería que te conozcan, que los conozcas...ellos no son malos-le dijo mirandolo
-claro que no, parecen buena gente y te aman
-si tan solo les fuera posible verme más allá...más allá de lo que para ellos es una enfermedad
-estoy seguro de que lo hacen-le dijo subiendo su mano hasta su rostro-si no fuera asi ni siquiera te hablarían, hablan con mucho amor de vos
-quería que sigan fingiendo no saberlo-respondió Fran al cabo de un momento-ellos fingen que me creen que sos mi compañero, yo finjo creer que me creyeron, pero en el fondo todos sabemos quién sos,que somos, que hacemos viviendo juntos...
-¿cómo una rebelión oculta?
-no-negó rotundamente-creo que en el fondo lo saben, y como lo saben, saben que mi pareja es otro varón, quería que vieran lo maravilloso que sos-le explicó subiendo su mano para apoyarla donde reposaba la Esteban-aunque no me lo digan ni lo comenten entre ellos jamás, que sepan que estoy en buenas manos, que me quieren, que la vida no es dura porque tengo a alguien, que no me quedé solo como ellos pensaban
-no vas a estar solo nunca-le dijo Esteban acercando su rostro-no te voy a dejar solo nunca-agregó mirandolo a los ojos antes de besarlo tiernamente.
